No estoy dispuesto a perder otra vez

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Sebastian se colocó de pie a menos de medio metro de la cama de Leila. Ella no volvió a conciliar el sueño por lo que comenzó hablar con los ojos rojos que la observaban desde la penumbra.

-Sebastian?
-Si? Lady Trancy.
-Por que mi hermano desconfía tanto de mi?
-Quizá haya cambiado mucho desde la ultima vez que la vió.

Leila cree que es la mejor respuesta que podría haber recibido. Nada la podría haber complacido más. Se destapa y se levanta de la cama. Toma de la mano al cuerpo que acompaña esos ojos de sangre y lo atrae hasta la cama. Tiene frío y miedo, así que le pide que la abraze. Las horas continúan pasando en la oscuridad. Y a medida que pasan Leila se acurruca mas en Sebastian, tanto que acaban nariz con nariz. Sebastian puede sentir la cercanía de sus labios con los de Leila. Quiere besarla, solo un poco, para saber como se sentirán. Leila a besado muchos labios sin duda... Pero nunca unos tan endemoniadamente llamativos. Cuando están apunto de salvar las distancias que los separan Sebastian le da la espalda.

-Yo amo a Ciel sabes?
-Lo sé- dice Leila al escuchar lo obvio
-Ciel antes era una persona normal. Era muy hermoso... Pero le amé, y eso fue un error. Quería su alma con locura pero mas quería besarlo. Y con las esperanza de conseguirlo algún día le devolví su alma. Lo perdí completamente cuando se convirtió en demonio. No quiero volver a perder, no voy a sentir nada por ti, ni ahora ni nunca. Si me disculpa mi Lady.-hizo una reverencia y se fue.

Quizá lo que la dejo más en shock no fue el hecho de que la rechazará, si no que hubiese dicho todo eso sin ninguna expresión en su cara salvo cuando se fue. Una leve sonrisa, característica de Sebastian.Leila estaba convencida de que si el quería ignorarla ella haría lo mismo. Pobrecita en su completa inocencia se creyó capaz de eso.

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Grell, el antes mencionado shinigami vaga por las calles de un pueblo en busca de su querido Sebas-chan. Entonces escucha unos llantos provenientes de una casa. Puede ver como una chiquilla llora. Se acerca a ella pero no se permite hacer nada ya que ella sale corriendo incluso antes de verle. Corre sola, al bosque, en la mañana de un 24 de diciembre.

(Likes y comentarios son genial recibidos 😄 y si veis que algunas de las fotos que uso en los capítulos es vuestra podéis decírmelo y pondré vuestros nombres o las borraré sin ningún problema)

Una historia mortal...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora