Creepypastas (Personajes)

Grey the Killer (Ginger Grey)

ORIGEN

Subí la capucha de mi sudadera negra. No quería que nadie viera mis golpes o moretones, mis ojos grises sin luz, ni brillo, ni vida. Salí de la escuela para encontrarme con los brabucones de siempre. Eché a correr rápidamente por la calle mientras que ellos me perseguían. En un par de minutos dejaron de seguirme.

Entré al barrio privado en donde vivía con mis tíos. Mis padres y mi hermano murieron en un accidente de auto. Entré a la casa para encontrarme a mi tío hablando con uno de sus contactos. Me quité la sudadera quedándome en una remera blanca y unas calzas de maya negras con unas botas. Tapé como pude las marcas en mis ojos. Ambos voltearon para verme, mi tío me dio una mirada de desaprobación y supe que era tiempo de que me retirará.

Subí las escaleras despacio tratando de no molestar a mi tía, que veía la televisión. Cerré la puerta de mi habitación con cuidado y me tumbé en la cama. Le di un rápido vistazo a la fotografía de mis padres y de mi hermano mayor, con él siempre me divertía y jugábamos a las escondidas, al ajedrez y aun montón de cosas más. Me dolía no verlos, a veces escucho el chirrido de los neumáticos, la bocina del camión y  otras veces siento el impacto del camión que golpeó el auto de mis padres sin piedad. Alguien llama a mi puerta.

—Entra —dije, levantando la cabeza.

Nani entró con una ligera sonrisa en su rostro.

—Mañana es la fiesta de Halloween. —Bufé sin entusiasmo, obviamente mi tío no me dejaría ir—. Tengo algo para ti

Me dio una camiseta de tirantes, una falda negra con bolados blancos, unas medias rayadas blancas y negras, unas botas nuevas negras y un par de guantes.

— ¿De dónde sacaste dinero para esto? —pregunté sorprendida, Nani era la ama de casa, ella era la única que me hacía caso—. Te juro que te devolveré todo el dinero.

—No te preocupes, te ayudare a hacer un vestido para Halloween, así te podrás mezclar con la gente y disfrutar un poco.

Me levanté y la abracé con fuerza.

Al final, transformamos todo eso en un hermoso vestido. Con el maquillaje parecía irreconocible. Le di las gracias a Nani y bajé las escaleras tratando de que nadie me viera y me mezclé con la gente. Evite a mi tío toda la noche. La fiesta se fue tornando cada vez más y más aburrida. Todos hablaban de negocios y cosas que yo no entendía.

De repente, alguien me agarra del brazo y tira de mi hacia la salida. Era mi tío. Me lanzó a la calle y comenzó a patearme con fuerza, mientras me retorcía del dolor.

— ¡Maldita perra! —me espetó—. Solo tenías que quedarte en tu habitación.

Me levanté y comencé a correr lejos de él.

Me alejé de mi casa por horas y, cuando decidí volver, vi a un perro sentado en la esquina. Me acerco a él.

—Hola, chiquito, ¿te perdiste? —pongo la voz tierna, pero lo que veo me dejó atónita. El perro se dio la vuelta, dejando ver una sonrisa malévola, sus ojos rojos y su pelaje cubierto de sangre. El perro salta sobre mí y muerde mi brazo, le doy una patada y el perro se va corriendo.

— ¡Estúpido Perro —le grité mientras que él se alejaba.

Volví como pude a mi casa. Estaba muy cansada y mi vista se hacía cada vez más borrosa. El brazo ardía como el demonio.

Al entrar a mi casa, la fiesta ya había terminado. Mi tía fue la primera en verme, pega un grito y se va corriendo a buscar a su esposo. Yo caigo al suelo y todo se volvió borroso.

Desperté en mi habitación. El brazo ya no me ardía y seguía con la misma ropa de ayer. Lo primero que hice fue ir al baño, pero lo que vi en el espejo no me asusto, ni me sobresaltó. Mi tez era toda blanca, mi cabello rojo liso se volvió negro rizado, mis ojos grises eran rojo sangre. El estilo me gustaba bastante, era muy propio de mi estilo. Mis labios ahora eran negros y mis uñas largas y también de color negro. Ahora el cabello me llegaba por abajo de la cintura.

Fui hacia mi cama me senté ahí y comencé a pensar en todo lo que había vivido. En los abusos de mis tíos y en el sufrimiento de todo. Esto se termina hoy.

Bajé las escaleras y fui hacia la cocina en donde mis tíos tomaban el desayuno. Ni siquiera se percataron de mi presencia. Tomé el machete de adorno de mi tío. Comencé a reír como una psicópata, provocando que mis tíos me miraran mal.

Comencé por un cambio de estilo, los ate a una silla y les corté los brazos, luego los pies. Sentía un poder increíble dentro de mí. Logré meterme en la mente de mis tíos y torturarlos con sus mayores miedos, mientras cantaba:

—Rosas en el prado, Rojas como la sangre son, ellas te ayudarán, a tus miedos superar —canté varias veces con una voz muy suave y hermosa.

Cuando mis tíos ya no podían más del dolor, decidí clavarles el machete en el corazón. Vi mi vestido todo manchado de sangre.

—Let me Help you —espeté mientras les dejaba una rosa roja en la mesa.

Salí por la ventana de la cocina y me refugié en el bosque con los demás creepypastas. Comencé a trabajar con Jeff the Killer y me familiarice mucho con Laughing Jack.

-Espero que mi historia te haya gustado joven y recuerda que si vez rosas rojas en el bosque, será mejor que corras-

EN LA ACTUALIDAD:

Coloque todas las cosas en su lugar. Trataba de experimentar, no esperaba invocar a nadie y tenía insomnio. Me hice un corte en la palma de la mano y deje que la sangre goteara en mi precioso conejo de felpa. Cerré los ojos y dije "No puedo dormir, Ayúdame a dormir" en ese momento escuche una risa en una voz hermosa. Abrí los ojos y me espante.

—Hola, soy Ginger Grey The Killer, más conocida como Grey The Killer, me has invocado y es la primera vez, solo respondo a tres preguntas.

—Okey… —yo estaba en la paranoia—. ¿Conoces a Jeff? ¿O a L. Jack?

— ¡Tienes algo con ellos! —me gritó, histérica—.. Te mataré si quieres algo con ellos, son míos y de nadie más.

—Solo preguntaba…

—Te quedan dos preguntas úsalas bien- me dijo enojada.

— ¿Cuál es tu historia? —ahí me contó toda su historia—. Una pregunta.

— ¿Quién fue tu primera víctima?

—Angeline Rouse. —Me tensé y me miró—. La conocías, vivía al lado de tu casa de Carilo, te caía mal, siempre observé tu casa pero me di cuenta de que podía matar a alguien más sin que opusiera resistencia.

—No hicieron reportes de eso —susurré, asustada, si conocía a esa chica y me caía mal, sabía que me estaba leyendo los pensamientos, trataba de entrar en mí, rápidamente puse la mente en blanco, ya me dolía la cabeza.

—No querían hacer reportes porque sería una catástrofe para todos, hubo un funeral a la media noche, la enterraron en el patio, yo personalmente fui y le deje una rosa, la ayude a ser mejor persona y es hora de que te ayude a ti —tomó aire y empezó a cantar—: Rosas del prado, Rojas son… 

Me estaba dando sueño pero me tape los oídos, cerré y empecé a cantar Into a Fantasy ( la primera canción que se me ocurrió) Luego no escuche nada, abrí los ojos y ella ya no estaba y mi muñeco tampoco, había una nota que decía "You Help Me" rápidamente la queme y deshice todo

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¡HOLAAAAS! Primero que nada, gracias por ver el libro :3

Segundo, no se molesten en buscar imágenes, la historia, etc. Etc. de esta chica, porque no es conocida. Yo intentaré la invocación un día en que mi hermano se quede en la casa de su amigo, para probar si es real.

Eso es todo.

No se olviden de comentar, votar y suscribirse :3. No sean malotes D:

Bye-bye~~