Habían pasado ya un día desde la discusión de Jack con Yusei, y aunque ellos compartieran una habitación no se hablaron en ningún momento, aunque no estaba tan claro quién estaba ignorando a quien, pero parecía que eso no iba a cambiar por el momento, y el trabajo seguía igual, aunque la Emperatriz había estado descansando tanto en el spa como en la piscina del hotel cosa que agradecieron todos sus acompañantes.
-Mmm... ¿Jack sigues dormido? – preguntó extrañado el pelinegro cuando se adentró a la habitación, aunque no se hablaran le había estado parecieron muy raro que el hombre no se hubiera aparecido toda la mañana, siendo él muy disciplinado con su horario y los niños.
No hubo una respuesta, cosa que no sorprendió al moreno, quien conocía a la perfección la terquedad de su pareja y si él estaba aún molesto seguiría ignorándolo sin importarle nada, por lo cual decidió enfrentarse y acabar con todo, ya que, estaba bastante cansado con su actitud, pero cuando se acercó a su cama se percató que había algo raro, Jack estaba vestido como si ya se hubiera preparado, pero a su vez estaba totalmente dormido.
- ¿Jack? ¿Estás bien? – preguntó nervioso, para percatarse de lo pálido que estaba su rostro - ¡Jack! – se alertó para tocarlo sintiendo lo helado de su piel, le movió buscando despertarlo consiguiendo que poco a poco reaccionara.
-¿Q-Que pasó...? – se sentía muy mareado, no lograba enfocar a Yusei solo para ver como se reflejaba la preocupación en su rostro.
-Posiblemente Se te bajo la tensión – atinó a adivinar, no era la primera vez que eso sucedía, Jack no sufría mucho de ese problema debido a su estilo de vida sano, pero muy de vez en cuando ocurría, debido al no dormía bien, mesclado de un estrés poco habitual, aunque cuando esto sucediera usualmente tomaba algún dulce para aliviarse.
-Ah ya... - respondió para recibir un vaso de agua del contrario, para repentinamente regresar a un silencio incómodo, Jack solo buscó mantenerse estable tomando unos cuantos caramelos de su bolsillo, el medico nunca le había recetado una medicina fuerte para su problema, ya que, mientras se mantuviera sano no debería ser algo que le afectaba, claro... él jamás se imaginó que...
Una pelea con su pareja podría hacerle tanto daño
- Jack, puedes dejar esto... Se que sigues enojado, pero no puedes dejar de hablarme – le pidió con severidad, sabía que estaba siendo cruel en iniciar esta discusión cuando el hombre seguía un poco desvanecido, pero quizás era una oportunidad para que las cosas no pudieran alterarse más.
- ¿Yo? No... tu eres él que me está ignorando, siempre lo haces cuando algo te incomoda o te molesta – respondió mordiendo su caramelo molesto sorprendiendo por completo, al contrario, quien no esperaba esa contestación de su pareja.
-Yo nunca hago eso, si lo hiciera no estaría hablando contigo ahora – gruño Yusei, en particular siempre había preferido la conversación sana a que se ignoraran entre ellos, no tenía ningún recuerdo de haberlo ignorado.
-¿En serio? Porque yo me acuerdo de un hombre bastante cortante y esquivo – respondió con una sonrisa burlona mientras comenzaba a hacerle recordar de las veces que lo había ignorado, aunque una sola fue la que los hizo viajar el camino de la nostalgia.
- Varios años atrás -
Después de la recuperación de Yusei, la relación con Jack se tensó, el pelinegro siempre había sido muy reservado con su cuerpo y el descubrir todo lo que había pasado provocó que se alejara de él, esquivaba su mirada, la comunicación era mínima y la motivación de enfrentarse desapareció, cosa que no comprendió Jack quien consideraba que no había sido nada serio, ambos eran hombres y además de amigos, para el rubio el pelinegro estaba actuando muy extraño.
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Rompiendo la historia.
FanfictionMuchas historias podían pasar al mismo tiempo, solo se debía ver con una lupa para descubrirlas Durante mucho tiempo Yami había sido socio y amigo de Seto Kaiba, y lo había visto conseguir al amor de su vida, aunque el hombre tardó 10 años en descub...