Roger sentía bajo su trasero la cama mas blanda en la que se había sentado nunca, veía las paredes mas feas que sus ojos habían tenido nunca que presenciar. Fotos de chicos vestidos de forma extravagante empapelaban toda la habitación sin contar claro la gran tela de colores sicodelicos que aquella chica tenía por cortina. Un horror en todo su esplendor.
– ¿Me explicas porque teníamos que traerle a mi casa? Ni los mejores apuntes del mundo son capaces de pagar que metas a un loco en mi habitación.
– Claro, porque era mucho mas seguro meterlo en la mía, seguro que a mi madre no le molesta para nada que me presente con un desconocido que presenta claros síntomas de paranoia y amnesia – Lizy tomó uno de sus cigarrillos mientras un suspiro de frustración se escapaba de sus labios, se estaba metiendo en un gran lío y ni si quiera sabia si iba a valer la pena.
– Sois consientes de que puedo escucharos aunque susurréis ¿verdad?
Ambas dirigieron sus miradas a Roger el cual las analizaba, con una ceja alzada y una mirada condescendiente a juego con su tono de voz; Lizy soltó el humo por su nariz analizando de igual manera al chico que se encontraba sentado en la cama de su mejor amiga, aun tenía sangre en su labio y el morado de su ojo se veía aun peor bajo luz artificial.
– Trae el botiquín, le curare el labio en lo que llega Aiden – apagó el cigarrillo y miró a Lia abandonar la habitación, arrastró la silla del escritorio y se sentó frente a el – Es una herida pequeña pero se puede infectar si no la curamos.
– Este rasguño es lo que menos me importa, no necesito que hagas nada.
– Nuestro territorio, nuestras normas así que te callas y te quedas quieto.
– Nunca mejor dicho – la mayor tomó el botiquín de las manos de su amiga y sacó el alcohol junto con unos algodones – y dinos Raúl ¿tienes algún documento de identidad o un carnet de conducir?
– Es Roger no Raúl ¿y de verdad crees que alguien como yo va enseñando su documentación a cualquier persona?
Una pequeña risa por parte de ambas chicas inundó la habitación, realmente tenían a una persona con paranoia de grandiosidad frente a ellas y Lizy como la obsesionada por la psicología que era no podía estar mas feliz. Limpió con cuidado la herida de Roger intentando no ejercer mucha presión sobre la magullada piel.
– Casi se me olvida lo mundialmente famoso que eres, perdóname - la mayor no pudo evitar sonreir ante el tono sarcástico de su amiga – creo que hasta voy a desmayarme de la emoción.
– No seas cruel Lia – los músculos de Roger se tensaron ante las burlas de la morena y no les convenía enfadarlo, no sabían como este iba a reaccionar – Ya estas listo, intenta no tocarte mucho el labio y curará antes.
Se separó de el mientras recogía lo que había utilizado y lo dejaba sobre el escritorio de la menor, dirigió su mirada a su amiga en busca de algo de apoyo que rompiera aquel silencio incomodo que se había formado en el ambiente. Y, como caído del cielo, Aiden apareció por la estrecha puerta de la habitación.
– Aunque no hablara en serio cuando dije que tenía planes, no significa que me podáis llamar cuando queráis para sacaros de problemas – el castaño apartó su mirada de Lia y la fijó en Roger – ¿Quien es el hortera? y dime por favor que Lia no es quien le ha hecho eso en la cara.
La nombrada rodó los ojos furiosa y antes de que pudiera golpear el brazo de su amigo con fuerza Lizy se interpuso, tomándole del brazo y alejándolo de la ira de Lia.
– Ha pasado algo – acorraló a su amigo contra una de las paredes, asegurándose de que Roger no podía escucharlos – el chico que hay en la cama, creo que sufre una paranoia, quizás una esquizofrenia
– Entiendo y obviamente la idea mas inteligente ha sido traerlo ¿verdad? ¡Como podéis ser tan idiotas! – tanto Lia como Roger miraron fijamente al chico – Dios de verdad que no entiendo como habéis podido entrar en la carrera.
– Relájate, no podía dejarlo tirado en el suelo, con un golpe como tiene en la cara.
– Una mierda Elizabeth, eres tu y tu complejo de psicóloga amateur, si querías ser una loquera haberte metido en esa puta carrera y no en medicina – pasó sus manos por su pelo, cerrando los ojos para intentar que su enfado se bajara un poco – ¿como se llama?
Lizy se alejó de el y tomó otro cigarrillo de su cajetilla mirando sorprendida por un momento como Roger se levantaba y le arrebata uno. Unieron sus miradas por un momento, suspirando ambos mientas encendían los cigarros.
– Se llama Roger.
– Bien – Aiden se dejó caer en la silla suspirando y miro al rubio – ¿en que año naciste?
– En mil novecientos cuarenta y nueve – soltó el humo sin apartar sus ojos de los del chico.
– Te conservas muy bien para tener sesenta y ocho años, me encantaría saber tu secreto.
– Mira capullo – apagó el cigarrillo en el primer sitio que encontró y se levanto furioso. Estaba cansado de que le trataran como un loco o como un drogadicto, se sentía perdido, rodeado de cosas que no entendía y aunque no quisiera admitirlo le daba miedo – Ya se lo dije a tus amigas, no consumo drogas, bueno si lo hago, pero no del modo que pensáis, no tengo ningún trastorno mental, vamos que no estoy puto loco. Esta mañana estaba en mi estudio de grabación, tuve una pelea con el mayor gilipollas que he conocido, me dejó inconsciente y cuando desperté estaba en ese callejón de mierda. Soy Roger Taylor, batería del grupo Queen y si no vais a ayudarme al menos dejad de tratarme como un loco.
Todos enmudecieron, el pecho de Roger subía y bajaba de la furia, su respiración estaba acelerada y la incomodidad en el aire se hizo aún mas espesa.
– Zanjemos esto de una vez por todas – ni si quiera la propia Lizy supo de donde sacó el aliento para hablar – Dices que eres famoso ¿verdad? Pues eso lo averiguamos en un momento.
Abrió el portatil de Lia y mientras los otros tres la miraban sin perder detalle, abrió el buscador e introdujo el nombre del rubio.
- Cada dia somos mas lentas, solo nos ha llevado tres horas llegar a la idea de buscarlo en internet.
Al poner el nombre miles de resultados aparecieron y si en ese momento los ojos de Lizy no se salieron de sus órbitas fue por un milagro.
– Escuchad esto – tragó saliva y empezó a leer – "Después de 65 años desaparecido, Queen sigue recordando al que fue su primer batería y uno de los fundadores del grupo, Roger Taylor. Taylor que el día que desapareció tenia tan solo 26 años fue sustituido por Carter Swan el que en esa época era el responsable de estudio puesto por la discográfica...."
Los tres pares de ojos se dirigieron a Roger el cual estaba pálido, con el ceño fruncido y mirada perdida. Una risa nerviosa por parte de Lia los sacó de su embobamiento.
– Puede aprenderse la vida de alguien y fingir que es el, no es la primera vez que un paciente de psiquiatría lo hace.
– Lia tiene razón, la mente humana es capaz de creerse cualquier cosa y mas una mente enferma.
Los ojos de Lizy volvieron a la pantalla y antes de abrir una de las fotos que adjuntaba el articulo tomó aire. Toda la razón y la cordura que le quedaba se tambaleaba en la cuerda floja mientras la foto se cargaba y por un momento la idea de que el chico tuviera razón le golpeó en la cara como un balde agua fría.
Aiden observó la foto que finalmente se había cargado y para suerte o desgracia de Lizy el chico atónito, pálido y con la mirada perdida que se encontraba de pie frente a ella, era el mismo chico que se encontraba aporreando una batería en el ordenador.
– Tiene que ser una puta broma.
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Dudas/errores que vean ya saben
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ᴛɪᴍᴇʟᴇꜱꜱ °ʀᴏɢᴇʀ ᴛᴀʏʟᴏʀ°
Fanfiction"ꜱᴏʟᴏ ꜱᴏᴍᴏꜱ ᴅᴏꜱ ʟiɴᴇᴀꜱ ᴇɴ ᴇʟ ᴛɪᴇᴍᴘᴏ qᴜᴇ ꜱᴇ ʜᴀɴ ᴄʀᴜᴢᴀᴅᴏ, ʟʟáᴍᴀʟᴏ ᴅᴇꜱᴛɪɴᴏ ᴏ ᴍᴀʟᴀ ꜱᴜᴇʀᴛᴇ ᴘᴇʀᴏ ᴛᴇ ɴᴇᴄᴇꜱɪᴛᴏ ʏ ᴀᴜɴqᴜᴇ ɴᴏ ʟᴏ ᴄʀᴇᴀꜱ ᴛᴜ ᴛᴀᴍʙɪéɴ ᴍᴇ ɴᴇᴄᴇꜱɪᴛᴀꜱ, ᴀꜱí qᴜᴇ ᴅᴇᴊᴀ ᴅᴇ ᴀᴜᴛᴏᴄᴏᴍᴘᴀᴅᴇᴄᴇʀᴛᴇ ʏ ᴀʏúᴅᴀᴍᴇ ᴀ ᴠᴏʟᴠᴇʀ ᴀ ᴄᴀꜱᴀ." Portada hecha por @xazulinax