Avengers Y... ¡¿Crepúsculo?! | Edward Cullen

16: Respuestas

Edward: Yo... quería decirte lo mucho que te amo, lo mucho que te extraño cuando sales a alguna misión. Es por eso que quiero que me prometas -no me gustaban mucho sus palabras, que digamos- Que me prometas cualquier cosa que pase, si algo sale mal... tu seguirás con o sin mi, tu eres mi vida y quiero que sepas haré cualquier cosa para protegerte. Hasta daría mi vida por ti.

Acaricie su mejilla cuidadosamente.

Yo: Te amo, y yo también haría lo mismo. Edward, sé que esto te aterra y de alguna forma a mi también pero tengo la fe que todo saldrá bien y ambos iremos a casa juntos a tomar una larga ducha... -él soltó una risita.

Edward: Ven irás a dormir -tiró de mi brazo y me llevó hasta mi habitación. Rodé los ojos.

Yo: Ok, ¿Te quedaras a cantarme no? -asintió como si fuera mi padre. Amaba todo de él.

Me recosté y puse las mantas sobre mi cuerpo, Edward se colocó a lado mío, recargue mi cabeza en su pecho, claramente sin escuchar nada de su corazón pero si su respiración fingida.

Edward: Duerme Romina -empezó a tararear una canción mientras acariciaba mi cabello.

Poco a poco fui cerrando los ojos y el conocimiento, hundiéndome en un profundo sueño.

...

-Ok solo dispara a tu oponente rápido pero con calma, dejará inconsciente a cualquiera...

Pietro: Si, si ya entendí -reí rodando los ojos.

Edward estaba con su familia cazando mientras Pietro y yo practicábamos las formas para defendernos, al menos el lo requería pero la cara del platinado cambió de la nada.

Pietro: ¿Por que tu reactor está parpadeando? - señaló con la mirada mi reactor en el pecho.

Este reactor es muy similar al de Tony, sin embargo no tenía nada que ver con mi corazón o algo, solamente contenía las nanopartículas  para el traje. Mi hermano nunca había trabajado con eso pero yo si y luego que Tony regresara de su secuestro, años más tarde me cree uno porque me negaba a dejar todo a mi hermano mayor... 

Miré mi pecho, lo que decía era verdad. El reactor no dejaba de parpadear con ese azul intenso que lo caracterizaba.

Yo: ¿Qué esta pasando? -y luego un aura azul me rodeó, algo que no me lo esperaba.

Mi vista se dirigió a mis manos...

Antes de decir algo más, un circulo dorado con shispitas apareció frente nuestro.

Pietro: Oh no, otro brujo más a la colección... -miré al de ojos azules frente a nosotros.

Yo: Strange.

Stephen: Stark -nombró mirándome, detrás de el llegaron los Cullen y Edward no tenía una sonrisa que digamos- Tengo las preguntas que tenías en mente.

Yo: ¿El por que el cielo es azul y no verde como el pasto? o... ¿Cómo hacer para que Pietro deje de poner granos de café al triturador? -rodó los ojos fastidiado.

Stephen: Sé que eres...

Yo: Lo haces sonar como si no fuera humana -murmuré.

Stephen: Eres humana, tu magia no -le miré esperando que continuara- Hace millones de años.

Emmet: ¿Antes o después de Cristo? -Pietro soltó una risa por lo bajo.

Stephen: No lo sé, ¿Quieres que te haga viajar en el tiempo para ver que año era? -su tono era irritado, el musculoso negó- Hace mucho tiempo existieron el linaje de las Místicas, una raza muy poderosa pero luego tuvieron una guerra con Lyneos otra raza poderosa, lucharon y fue allí donde comenzaron a extinguirse ambas razas su poder era tan fuerte pero luego al ver como caían... se unieron y pusieron en una persona algún un tipo de contención hasta que alguien digno lo llevara en su manos pero... nunca leí que tan fuerte era ese poder o de donde llegaba tanto. Solo que era fuerte, y hasta ahora eres la persona mas poderosa y peligrosa en la tierra.

Yo: ¿Dices que usaron mi cuerpo como un recipiente barato? -pregunté ofendida.

Stephen: Si lo dices de esa forma... Sí -Edward se puso junto a mi, me puse a pensar sobre todo eso- Si quieres más información, creo que podrías comenzar por buscar a Ellen Brysht, fue la que escribió el libro que yo leí. Esa persona debe saberlo...

Jasper: ¿Y si ya murió?

¿Dices que puedes mantener tu juventud con el pasar de los años, no? Por eso aparentas ser una adolescente a pesar de ser una mujer mayor. -asentí una mueca.

Yo: Si... eso podría significar que también puede estar viva.

Stephen: Bien... eso es todo, espero el cheque hasta la otra semana. Se acepta tarjeta también, adiós Stark -antes de decir algo más se fue.

Pietro: Doble trabajo, además de pelear con vampiritos recién nacidos buscaremos a una mujer anciana con cuerpo de mujer adulta... si es que sigue con vida, claro -suspiré.

Edward: ¿Te encuentras bien? -asentí frunciendo los labios.

Yo: Si, fuera de todo. Lo estoy -sonreí a mi vampiro.

Edward: Ten en claro que no te dejaré sola en todo lo que hagas. No lo haré -le abracé con fuerzas ¿como podía soportar tanto conflicto por mi?- Lo hago porque te amo.

Yo. ¡Eh! No leas mi mente -soltó una carcajada, yo le seguí contagiándome- Bajé la guardia, no es justo.

Esto parece el año en que Romina Stark tiene más problemas que dinero... 

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