Desde el imperio Min, el gran rey del infierno, el gran juego entre la vida y la muerte, los tres reyes se alzarán ¿podrás luchar contra esto? ¿Descubrirás la verdad? ¿Dejaras salir tu verdadero ser?
Mi corazón latía sin parar, toda la noche tuve esa imagen de aquel hombre que me tenía tan mal. No entiendo ni como fue que pasó todo pero lo único que me interesa es que el estuvo ahí conmigo, el me dejó oler ese aroma tan delicioso que desprendía era la definición de perfección ellos juntos.
Me levante con la frente sudada, necesitaba contarle a jimin, jeon debe estar dormido, esa era la rutina del menor últimamente.
Solté un suspiro mientras mi celular timbraba- ¿amor? - sonreí ante ese hermoso apodo.
-minie, ¿como estas pequeño? - un pequeño suspiro sono.
-tae, ayer salí con hobi hyun y... Lo extrañaba demasiado pero no se... Ademas saldré con el amigo de hyun mañana- no quería tocar el tema de hoseok tan rápido, no cuando el abunda en mi mente.
-¿vas a salir con el? ¿Por qué? - me impresionaba el que jimin saliera con alguien que no seamos jeon y yo, jimin era tan inocente que tuvimos que protegerlo de muchas personas.
-si, bueno el habló conmigo por teléfono y dijo algo... Necesito verlo ademas hyun se fue temprano dijo algo de ir a sentir el aire- asentí lentamente algo no se sentía bien.
-y es que que te dijo - dije seca mente, donde me enterara que esta siendo obligado yo mismo iba a cortarle los huevos a ese amigo de hoseok.
-uh, unas cosas amor... Sabes ya me tengo que ir a dormir, mañana saldré temprano con el y no quiero trasnochar, te amo - colgó, por primera vez jimin me evita un tema y tiene las agallas de colgarme dejándome con la palabra en la boca.
Yo jamás dudaría de jimin, el siempre fue honesto con lo que sentía a comparación mía que nunca he podido ser honesto con él y mucho menos ahora que siento que por fin encontré a mi destinando, aun que también estoy confundió mi lobo dice que es nuestro pero aún me falta algo como si el tuviera un secreto mayor.
Olí por tercera vez en la noche mi ropa, su aroma seguía impregnada en mi ropa relajando mi lobo, sigo pensando en lo ocurrido hace poco desde ver un enorme lobo hasta ver a un hermoso hombre con unos ojos muy claros, con una marca en su cuello y un enorme fénix y cuervo en ambos brazos.
El solo imaginar el como pude visualizar de lejos ese cuerpo, parecía de mentiras desde sus músculos donde bajaban pequeñas gotas de sudor perladas, su manzana de adán que se veía apetitosa, sus labios húmedos y perfectos, sus piernas y trasero bien definidas hasta aquel miembro que pude ver, fantasíar con el encima mío haciéndome suyo, mordiendo mi piel, sentir el ardor y el placer, tener los ojos en el en ese momento es lo único que podía pensar mi lobo.
Necesitaba sentir lo, mi lobo lo llamaba y lo exigía a él, queríamos que nos hiciera suyo. Me levante de golpe al sentir la oleada de calor, mi cama esta húmeda por culpa de mi exitacion, mi entrada lubricaba lo suficiente para manchar toda la cama, que vergüenza.
Saque la sábanas y tome un supresor, me cambié de pijama para estar más cómodo al terminar no pude evitar acercarme a la ventana y mirar a la luna tan hermosa como ella misma.
-Diosa Luna, permite que se enamore de mi, cumple me ese deseo- dije con un tono desesperado mirando la luna, el desespero que siento no lo entiendo pues bien apenas y lo vi.
Pero mi lobo lo aclama desesperadamente, me da una sensación de que esta feliz pero también está sufriendo mucho, no mentiría que casi me siento morir, mi pecho se hundió mucho cuando olí que su aroma tenía mezclado el de un omega así que cambie de hombro llegando a él punto de la unión y el cuello donde solo se encontraba su aroma.
Mi lobo recuerda pequeñas cosas, he tenido una pequeña conexión con el pero más que decir que en sus vidas pasadas sufrió por no ser amado quería que esta vez fuera la excepción porque yo también amaba al que yo se y considero mi alfa, no soportaría que el me rechazará.
-solo te pido esto luna, por favor- solté un pequeño sollozo que no sentí mio, inmediatamente entendí que quien estaba llorando era mi lobo, esta muy herido y yo solo quiero hacer lo sentir bien, mi lobi seguía llorando como si algo muy malo le pasara como si nos hubieran rechazado.
El no sería capaz, lo sé.
.. . . . . . . . . . . . Se alazaran cuatro herederos Llegará aquel usurpador. . . . . . . . .
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