Cuentos de una Princesa y su Gato

Día 14: Chocolates

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Marichat May 2020

Día 14

Chocolates

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Marinette nunca había visto a Chat Noir actuar como un gato sin estar bajo los efectos de un akumatizado, pero ahora, el chico que estaba sentado de forma extraña frente a ella, con el cinturón moviéndose de un lado a otro como si fuera una cola, la tenía realmente sorprendida ¡El cinturón tenía vida propia!

Ejem, ese no era el punto.

Chat Noir estaba frente a ella, mirándola expectante, como si estuviera en primera fila esperando a que ella abriera el paquete que dejó en medio de ambos.

Sin quitar su vista del superhéroe, Marinette extendió su mano para tomar el decorado paquete y acercarlo a ella, notando como el cinturón se movía con más rapidez que antes.

—¿Estás bien? —consultó con preocupación, pero Chat solo afirmó.

—¡Quiero ver tu reacción! —dijo el muchacho notablemente emocionado. Marinette quitó la cinta que envolvía la caja, luego la tapa y se encontró dentro un papel que cubría diversas formas que, por el olor, eran chocolates.

—¡Yo los hice! —exclamó con una sonrisa, pero cuando observó la mirada de Marinette se desanimó por completo, haciendo que su cola caiga y sus orejas se pegaran a sus cabellos— ¡No te gusto! —lamentó con la voz quebrada.

—Espera, ¿qué? —dijo Marinette, sobresaltada— No dije que no me gustaban.

—Pero tu mirada lo dijo todo... —mencionó, formando un puchero en sus labios.

—¡No puedes negar que se ven raros! —se sinceró, para luego arrepentirse y apretar los dientes al notar como lo había arruinado aún más.

—Has roto el corazón de este gato —dijo melancólico, colocando dramáticamente ambas manos en su pecho.

—¡Vamos Chat! —insistió—. Mira, voy a probarlos para que veas que no miento cuando digo que me gustó el detalle.

Desconfiado, Chat le dio la espalda, pero mantuvo su mirada por encima del hombro para observar cómo Marinette tomaba uno de los dulces -que se suponía era un rectángulo con forma extraña- aspiraba profundamente su aroma y se lo llevaba a la boca. La muchacha dejó que el chocolate danzara entre su paladar y su lengua, el sabor suave hizo que cerrara sus ojos para disfrutar de la dulzura del mismo.

Chat se terminó por acercar a ella, expectante de su reacción.

—¿Te gustaron? —pregunto nervioso y Marinette afirmó, abriendo sus ojos para mirarlo con una enorme sonrisa.

—¡Son los chocolates más deliciosos que probé en mi vida! —exclamó, totalmente encantada.

—¿Lo dices en serio? —consultó.

—Vivo con una maestra chocolatera —le recordó que Sabine se dedicaba a preparar chocolates—. Se reconocer un buen chocolate —le aseguró con orgullo. Sus palabras solo hicieron que Chat se emocionara tanto que la abrazó de golpe.

—¡Me alegra tanto! —dijo emocionado—. No soy bueno para hacer cosas hechas a mano, pero quería regalarte algo hecho por mí mismo.

—Y me encantó —dijo, correspondiendo a su abrazo—. Gracias...

—Gracias a ti, por estar en mi vida.

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El Rinconcito de la que escribe:

¿Saben que comía mientras escribía este capítulo? ¡Sí! Chocolate relleno de mouse de chocolate y almendras... ¡Cosa más deliciosa!

En fin, Chat no puede ser todo perfecto... xD

Gran lección, no siempre la apariencia lo es todo... xD

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Palabras: 496

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Día 15: Amistad

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¡Muchas gracias por leer!

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Aquatic~

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14 de Mayo 2020