Cuentos de una Princesa y su Gato

Día 11: Chat Blanc

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Marichat May 2020

Día 11

Chat Blanc

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Ahí estaba de nuevo frente a él, con su mirada lunática teñida de color celeste y traje tan blanco como la nieve.

¿Es que acaso la lucha contra Chat Blanc era algo que tenía que pasar sí o sí? ¿Por qué tenía que volver a pasar por lo mismo? ¿Cuántas veces tendría que pelear contra la persona que amaba?

—Ven aquí, princesita, déjame darte otro abrazo —le dijo, soltando una risa completamente desquiciada.

Marinette sentía que se iba a volver loca huyendo de Chat Blanc y esquivando los escombros de un París en ruinas azotado por su paso. Y como si no pudiera ponerse peor, el akumatizado había conseguido uno de sus aretes, por lo que ya no podía convertirse en Ladybug.

Con las fuerzas que aún quedaban en ella, intentó correr con dirección a su casa, con la esperanza de llegar a su cuarto, tomar otro miraculous de la caja y así poder derrotarlo. Ese era el plan. ¡Un brillante plan!

Pese a las lágrimas de desesperación que sentía correr por sus mejillas y dificultarle la vista, esquivó cada uno de los objetos que Chat Blanc seguía lanzándole, con una agilidad que hasta ella misma le sorprendió.

Finalmente llegó a la panadería, encontrando a sus padres ocultos en un rincón y quienes al verla la llamaron con total exasperación, pero fueron ignorados. Subió hasta el departamento y cuando llegó a su habitación, el baúl, donde escondía la caja de Miraculous, estaba abierto.

—¿Qué pasó aquí? —de repente, el techo de su habitación explotó sobre su cabeza, ocultándose rápidamente bajo el escritorio para salvarse.

—¿Buscas esto, princesa? —preguntó con burla. Al oír esto, la muchacha salió de su escondite y observó con pavor como Chat Blanc tenía la caja Miraculous en su mano.

—No —susurró, llevándose las manos a sus labios—. Chat, por favor...

—Lo siento... —mencionó de forma monótona, apuntando su supercataclismo hacia la caja—. Es hora de la última escena...

—¡¡No!! —gritó Marinette... despertándose de golpe y sentándose en su cama para finalmente romperse a llorar de tal forma que Tikki no podía contenerla.

Marinette manoteó su cama hasta que encontró su teléfono. Con la voz casi en un hilo y las lágrimas cubriendo todo su rostro, se pegó el aparato al rostro.

—¿Marinette? —la voz sonó patosa del otro lado, pero, al escucharla sollozar, se tornó en alerta— ¿Estás llorando?

—Te necesito —alcanzó a pronunciar.

—En menos de un minuto estoy allá —escuchó, dejando el teléfono de lado para abrazarse a sus piernas y seguir llorando, botando toda la pena que cargaba dentro.

No pasó mucho para que su tragaluz sonara; se puso de pie con rapidez y salió a recibir al superhéroe, abrazándolo tan fuerte, que éste trastabillo, cayendo sentado al piso, con Marinette llorando aferrada a su cuello.

—Tranquila, amor —le susurró Chat, acariciándole la espalda con el afán de reconfortarla—. Solo fue una pesadilla...

—Pero es que... —dijo, con la voz apagada—... tú estabas...

No necesitó terminar de hablar para saber cuál era el problema: Chat Blanc

Chat Noir, se acomodó en el suelo, acomodando a Marinette sobre sus piernas para abrazarla mejor, apoyando su mentón en el hombro de ésta, mientras ella lloraba oculta contra su cuello.

—Yo estoy aquí, tan negro como la noche y con mi corazón lleno de amor por ti —le recordó, mientras seguía deslizando su mano por la espalda femenina. Marinette se aferró más a él, quien dejó el movimiento de su mano para abrazarla también— No tengas miedo, Chat Blanc solo vive en tus pesadillas, de ahí no saldrá. ¿De acuerdo? Nunca podría hacerte daño. Marinette... eres lo que más amo en esta vida y lo único que me da tranquilidad y felicidad —ella respiró profundamente y se separó un poco de él, juntando sus frentes para poder verse a los ojos—. Eso cariño, no temas...

—Mi príncipe —dijo Marinette, volviéndose a ocultar en el cuello de Chat.

—My lady... —susurró Chat, abrazándola nuevamente con una sonrisa—... todo estará bien, te lo prometo.

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El Rinconcito de la que escribe:

¿Qué tal el capítulo? ¿Se sintieron en los zapatos de Marinette?

En el mes Adrinette toqué mucho el tema de Chat Blanc y como eso para Marinette era un peso en su relación con Adrien, y aunque estaba bien, era imposible que todo se lo quitara de golpe, ¿no cree?

Este capitulo tiene una continuación, al final de este especial 😉

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Palabras: 687

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Día 12: Intercambio de Miraculous

Continuación, del capitulo 10 😊

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¡Muchas gracias por leer!

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Aquatic~

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11 de Mayo 2020