El hombre estaba tendido en el suelo lleno de moratones y lesiones por todo el cuerpo. No tuve mas remedio que ayudarle a levantarse agarrándole de la mano para absorber todo su dolor, pero mientras lo hacía, éste me clavó las uñas fuertemente en la pierna y me mordió en brazo.
No pude soportar el estar atrapando su dolor y tener que aguantar las heridas que me estaba causando, entonces sentí como mi cuerpo se apagaba poco a poco, y cuando volví a despertar, estaba siendo cargada por el hombre en cuestión.
-Por fin te has despertado preciosa...
Me estaba mirando como si fuese una carga para él, como si tuviese mejores cosas que hacer. No me podía creer lo que estaba pasando, y cuando recuperé fuerzas, le pegué en el estómago para que me soltase.
-No necesito ayuda, puedo caminar sola.
Cuando comencé a caminar, mi pierna dolorida hizo acto de presencia y caí al suelo haciendo un leve gesto de dolor.
-Sí. la verdad es que te veo perfectamente.
-¿De quién será la culpa de que esté así de bien?
Hizo un gesto extraño, como si le hubiese parecido gracioso mi comentario, seguido de una mueca de dolor, haciéndome saber que mi comentario le hubiera llegado al corazón como un cuchillo, pero de forma divertida.
-Me voy a casa...
-Conozco a alguien que puede curarte esas heridas fácilmente...
-¿A sí, quién?
Paró un momento para pensar y respondió:
-Tendrás que llevarme a cenar para eso...
Seguido de una cara de satisfacción. No hice mas que mirarlo con asco y soltar:
-Como he dicho antes, me voy a casa.
Me di media vuelta y comencé a caminar como pude, cojeando y estremeciéndome de dolor.
-Esta bien, está bien, no tendrás que llevarme a cenar, pero déjame ayudarte, ya que me has salvado la vida antes, te debo una.
-¿Cómo sé que puedo confiar en ti?
-No te queda otra guapa.
-No me llames así.
-Sólo digo lo que pienso preciosa...
Me ruboricé pero no podía seguir aguantando el dolor así que acepté su ayuda y me llevó hasta lo que parecía ser un edificio, más concretamente una clínica veterinaria.
ESTÁS LEYENDO
Peter y Noa
RomanceÉsta es la historia de amor entre Peter Hale y Noa Miller, una mujer loba carismática y un hombre lobo sarcástico. Juntos vivirán una serie de sucesos divertidos que los juntará hasta quererse a más no poder.
