No dudé ni un segundo sobre lo que debía hacer. Sabía que Malia había estado con Stiles, así que ella ya había tenido relaciones. Era a mí a quien buscaban, no ella. Conseguiré que me cambien por ella. Conseguiré que la sustituyan por mí.
No volví a juntarme con la manada de Scott desde hacía dos días, pero en ese tiempo conseguí encontrar el modo de contactar con los jinetes. Tenía que abrir un portal hasta su dimensión, y eso fue lo que hice. Ya lo tenía todo listo, solo faltaba encenderlo.
Ya era hora.
Puse todo en marcha y el portal se abrió con éxito. Me encontraba delante de lo que parecía una estación de tren abandonada. Pude diferenciar tres sombras que se acercaban desde el otro lado del portal, y finalmente me di cuenta de que eran tres jinetes fantasmas.
-Sé que tenéis a mi amiga, pero os merece más la pena tenerme a mí. Sé que buscáis a las personas más puras, y yo soy más pura que ella; ni siquiera he dado mi primer beso. Cambiadme por ella, no intentaré escapar, lo prometo, pero por favor, dejad que se vaya...
Comenzaron a hablar entre ellos, y uno de ellos, el que parecía ser el líder, asintió, y seguidamente vino otro de ellos a caballo cargando a Malia. La dejaron en el suelo a mi lado del portal, y no tuve más remedio que entrar al suyo. Malia estaba inconsciente, pero seguía viva, y eso era lo que importaba.
Al pasar al otro sitio, la estación, me hicieron subir a uno de los caballos, y me llevaron a lo que parecía un laboratorio. Allí me ataron de manos y pies, me elevaron hasta que no pude tocar el suelo con los pies, y comenzaron a hacerme cortes por todo el cuerpo, como si estuvieran haciendo pruebas científicas extrañas conmigo.
Grité, aunque sabía que nadie iba a escucharme, y menos venir a ayudarme, pero así estaba bien, era así como debía haber sido. Cuando parecía que habían terminado y estaban a punto de salir de la habitación, les pedí un favor:
-¿Cómo se que Malia ha llegado a salvo, podéis demostrármelo?
Se miraron entre ellos y me pusieron enfrente una pantalla. En ella aparecía Malia, estaba bien, caminaba por el bosque, sabía hacia dónde se dirigía, la clínica. Los jinetes salieron pero dejaron la televisión en el sitio, y aún encendida.
Finalmente entró a la sala, donde se encontraban todos alrededor de la camilla de acero, como la primera vez. Al ver a Malia todos fueron corriendo hacia ella, el primero de ellos Peter. "Estoy feliz..." pensé.
-¡Malia!, ¿Cómo has logrado escapar de ahí?-Preguntó Peter muy confundido.
Sonreí, sabía que ella no podía saberlo, estaba inconsciente cuando la dejaron. Poco después me di cuenta de que Malia tenía cortes también, habían experimentado con ella al igual que conmigo.
Estaba a punto de desmayarme cuando escuché:
-Ha sido Noa, ella me ha salvado-no me podía creer lo que estaba escuchando-. Les dijo a los jinetes que me cambiaran por ella, que no iba a resistirse, pero que me dejaran irme sana y salva. Ellos pensaban que estaba inconsciente, pero pude escucharlo todo... Noa consiguió hacer un portal para contactar con ellos, lo hizo para poder salvarme.
Pude ver la cara de asombro de todos al escuchar eso, pero no esperaba que hiciesen nada, no después de casi hacer que matasen a una de la manada...
-¡Tenemos que ir a por ella!-dijo Peter sobresaltado- ¡No podemos dejar que le hagan daño!
-No es tan sencillo Peter...-dijo Scott apenado.
Sabía que tenía razón, era demasiado peligroso venir a por mí, yo hubiese hecho lo mismo, total, era nueva en la manada, ni que fuesen a arriesgar sus vidas por mí...
-Me da igual-respondió Peter con evidente enfado-. Si no queréis venir, iré sólo. Aún tengo que pedirle perdón por portarme como un gilipollas...
-Peter tiene razón, no pienso dejar que mi amiga muera en vano, ¡yo también voy!-dijo Lydia.
-Contad conmigo-dijo Derek.
-Lo mismo puedo decir-continuó Stiles.
-Me ha salvado la vida, yo también voy-afirmó Malia.
-Está bien, iremos todos, ¿de acuerdo?-dijo Scott finalmente.
-¡Sí!-dijeron todos al unísono.
Antes de poder escuchar algo más, me desmayé por el dolor y por la pérdida de sangre que me causaron las heridas
ESTÁS LEYENDO
Peter y Noa
RomanceÉsta es la historia de amor entre Peter Hale y Noa Miller, una mujer loba carismática y un hombre lobo sarcástico. Juntos vivirán una serie de sucesos divertidos que los juntará hasta quererse a más no poder.