❦ Between Our Lips ❦ Yoonmin「Finalizada」

CHAPTER 7

Dos semanas después.

Con el pasar de los días Jimin se había hecho muy cercano a Yoongi gracias a las variantes profesiones que el mayor ejercía a diario. Ya se había acostumbrado a verlo en cualquier lado al que fuese, si el abogado estaba en audiencia, encontraría al otro barriendo los pasillos del juzgado.

Si el menor iba por un helado al parque, el payaso gruñón que regalaba los globos allí era Yoongi. Desde lejos se pensaría que el mayor actuaba como un acosador loco tras el chico de cabellos rojos. Jimin había pensado eso en un principio pero ahora había cambiado de parecer.

Cada vez que le veía era como una especie de salvación, saber que él estaría allí cuidando su espalda y dándole una salida nueva a su rutina. Como el día que tenía la cita con Jeong Yeon y escapó junto a él a su apartamento, liberándole de la chica que no amaba.

El día de hoy ambos se encontraban nuevamente en aquel sótano que más bien era la verdadera casa de Yoongi en lugar que el desordenado exterior. Estaban tomando soda de mora y hablando cosas sin relevancia aunque había un curioso mosquito interno que molestaba a Jimin.

Y era el tema del asesinato de Young Suk.

No había decidido preguntárselo por miedo a que él le alejara y pensara que lo veía como un asesino. Pero el pequeño pelirrojo no se aguantó y su curiosidad lo hizo abrir la boca— Yoongi Hyung... ¿A usted le molestaría hablar sobre la muerte de su padre?

Yoongi se tornó serio, pasó saliva y suspiró. Se le había hecho extraño que el chico no le hubiera preguntado antes. —Realmente si, pero no quisiera dejarte con dudas sobre mí, no tengo nada que esconder.

Jimin asintió algo nervioso. Disimuladamente encendió su teléfono para ver la hora un momento y retomó la conversación— El día del cumpleaños de tu padre...¿Qué fue lo que en realidad sucedió?

El mayor apartó el cabello molesto de sus ojos y plantó su vista en el suelo, recordando lo que no quería recordar.— Él me había invitado a celebrar su cumpleaños ya que estaba solo porque al parecer tu madre tenía una audiencia o algo por el estilo y sólo iría hasta la noche.

>> La relación con mi padre jamás fue buena, realmente me importaba un bledo su cumpleaños y su vida pero de todos modos fui por simple ocio.

>> Llegué allí neutral, le felicité por su cumpleaños número cuarenta y le canté esa canción cursi y parlanchina del "Cumpleaños Feliz" pero todo se fue al mismísimo diablo cuando llegó la hora de partir el pastel.

>> Primero me ofreció un trago de whisky el cual solo lo tomé en mis manos pero lo dejé en la mesa al lado del pastel. Me dio un pedazo del postre ese pero no quise comerlo porque desconfiaba de él y de su falsa amabilidad que tenía ese día.

— Perdón por interrumpirte pero...¿Por qué desconfiabas de él? ¿Por qué su relación no era buena?—preguntó Jimin dando un sorbo a su soda de mora la cuál estaba burbujeante.

— Él era un idiota, era un adicto al juego y al alcohol, yo podría haber vivido con eso pero no era lo único —describió brevemente —Cuando era niño solía golpear a mamá cada vez que llegaba borracho a casa, ya sabes, lo típico en estos días en algunas familias.

>> Pero la normalidad se fue el día que la mató, la descuartizó y la quemó en la chimenea justo el día del cumpleaños de ella el cual es el mismo día que yo cumplo años. Fue horrendo ver eso con solo trece años. Era un niño Jimin, y él arruinó todo.

—Y las cosas no terminaban ahí, a partir de ese día, ese tipo...—Yoongi hizo una pausa sintiendo como sus lágrimas ya venían en camino.— Ese hombre al que yo le decía "Padre" por respeto, empezó a abusar de mí.

>>Era horrible, sentir sus manos sucias por mi piel...Sentir todo el asco que una persona puede sentir, todos los días, un verdadero martirio, saber que no puedes hacer nada, no puedes gritar porque nadie va a oírte y si te oyen no van a creerte.

Yoongi sintió como lágrimas saladas salían por sus ojos pero prefirió continuar, mostrarle al menor sus miedos, que conociera parte de su historia como persona, que supiera que no era una piedra andante y una mala persona como su madre fiscal lo tachaba. Porque estaba seguro que la mujer le había dicho algo por el estilo a Jimin.

>>Pero retomando al día del cumpleaños de Young Suk...Después de que notó que no me iba a comer el pastel, se tomó el trago que me había ofrecido antes confundiéndose con el suyo e intentó violarme, tomé el florero y lo golpeé en la cabeza para que me soltara.

>> Él empezó a tambalear y cayó por el balcón. Claramente sabía que la policía llegaría por mi en cuanto pudiese y me encerrarían sin darme la opción de hablar antes así que...Solo me fui.

— Oh Yoongi...—dijo Jimin cuando el mayor terminó de contar los hechos. Se abalanzó inmediatamente sobre el chico y lo fundió entre sus brazos en un gran abrazo cálido, lleno de tristeza. Y quizás...Amor.

Yoongi al sentir el tacto del otro por primera vez volvió a abrir el grifo en sus ojos y comenzó a llorar nuevamente sobre el hombro del pelirrojo. Este empezó a sobar su espalda y también a acariciar su cabello justamente como lo haría una madre cuidando de su hijo el cual habían herido.

Y bastante.

El abrazo se deshizo después de varios minutos, Jimin limpió con sus deditos cuidadosamente la zona bajo los ojos de Yoongi que se encontraba húmeda gracias a las lágrimas. Él no le veía en absoluto como una víctima, sino como un superviviente. Tanto tiempo aguantando todo eso completamente solo era digno de toda la admiración por parte del menor.

— No te vayas...—suplicó Yoongi al ver la avanzada hora y que lo más probable es que Jihyo no lo tardara en llamar a casa.

Jimin no le responde y ambos suben a la sala donde pasan de largo hacia la puerta de la habitación de Yoongi. La fiscal estaba empezando a llamar y el pelirrojo se dio cuenta.

—No—negó el más bajo mirando la pantalla del teléfono con la foto de su progenitora. Colgó la llamada y apagó el dispositivo. Observó a Yoongi fijamente—No voy a irme esta vez.

Se supone que este capítulo lo iba a subir mañana pero no me aguanté ¿Me perdonan? Los amo, cjau.