Jimin releía la citación aunque no encontraba cosas nuevas solo que esta se llevaría a cabo en dos días a partir de ese día. Pero había un problema.
¿Cómo le diría a Yoongi que podría ir a prisión si el juez lo encontraba culpable?
Recordaba todos sus momentos buenos mientras se dirigía a casa. No se creía capaz de quitarle la felicidad que presentaba el chico estos últimos días, no tenía el corazón de hacerlo. Pero al parecer Jihyo si.
Guardó el documento en el sobre nuevamente y miró hacia el frente manteniendo sus pies a un ritmo normal. Faltaba poco para llegar a su hogar, al fin. Pero de repente empezó a tener una mala sensación, alguien le estaba persiguiendo.
No tuvo tiempo de girarse cuando eso lo levantó como si fuera un saco de papas y comenzaba a correr. Jimin sintió confusión y miedo. No sabía quien era la persona ya que estaba disfrazada. Disfrazada de un adorable oso color marrón claro.
El pelirrojo estaba a punto de llorar hasta que algo sucedió y le hizo confundirse más. El sujeto le estaba llevando a la casa de Yoongi. ¿Acaso lo conocía o eran amigos? No lo sabía y solamente se dejó llevar.
El gran oso, abrió con gran dificultad la puerta debido a que su disfraz no contaba con dedos pero finalmente logró ingresar con el pequeño acompañante que llevaba sobre su hombro derecho. Caminó por la entrada y por último lo descargó sobre el sofá. Se desprendió de la cabeza de su disfraz y Jimin no hizo nada más que reírse.
La persona que estaba bajo el disfraz era Yoongi.
—¿En qué momento pasaste de entregar volantes a animar fiestas infantiles?—le preguntó Jimin de broma a lo que el mayor se tumbó al lado de él en aquel sofá.
—En el volante jamás dijeron nada de un disfraz de oso gigante y fue muy tarde para retractarme. ¿Puedes creer que tuve que usarlo todo el día? Casi muero asfixiado a medio día—se quejó Yoongi. El pelirrojo se gira hacia él y toma su cara entre sus manos.
—Estoy seguro que debiste de verte tan adorable-le aduló Jimin dándole un leve beso en los labios.
Cuando el beso termina. Yoongi se percata del sobre que Jimin llevaba en sus manos—¿Qué es eso?
Oh no, se había dado cuenta. Pensaba Jimin. Cambiando su semblante por uno más serio, abrió el sobre y le entregó el documento. Más temprano que tarde tenía que enterarse—Es una citación para una audiencia de imputación de cargos, según el documento, las huellas que encontraron en los elementos contundentes de la escena del crimen y los testimonios de vecinos son suficientes para declarar una condena.
—No te preocupes por eso Minnie—le quita la importancia al asunto y lanza el sobre a cualquier otro lugar lejos de ellos.
— Pero...¿Y si ella te encierra en prisión?
—Entonces me fugaré de allí y estaré en casa antes de la cena, sencillo—resuelve Yoongi. Jimin está por decir otra cosa pero varios truenos y relámpagos se lo impiden. La luz se corta de repente y la lluvia cayendo comienza a hacer sonidos en los techos.
Jimin no puede observar nada pero siente como Yoongi empieza a retorcerse en el sofá. El pelirrojo entonces lo recuerda.
Yoongi detestaba la lluvia.
El menor acerca al mayor y esconde su cabeza entre sus brazos, dándole calor.—Mi madre fue asesinada en una noche de lluvia, a ella le solían gustar mucho.
Jimin siente su corazón doler y abraza con más fuerte al mayor el cual acerca su cabeza a la contraria bastante cerca de rozar sus labios.—Desearía eliminar ese mal recuerdo ¿Me ayudas?
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❦ Between Our Lips ❦ Yoonmin「Finalizada」
Fanfic❝ La distancia entre sus labios debe ser mínimo de cincuenta centímetros❞ Min Yoongi, es sospechoso del asesinato de nada más y nada menos que de pareja de la fiscal Park Jihyo la cuál tomó el caso y hará hasta lo imposible por culparle y encerrarlo...