Nunca será amor (Jori)

Volverte a amar.

Faltan 10 minutos para que sean las 6, es la séptima vez que veo mi reloj en los últimos 3 minutos. Acomodo la rosa que le traje a Clarke en la mesa y aliso mi ropa. Siento mi corazón latiendo bastante rápido y sé que si no logro calmarme pronto va a ser bastante difícil hacerlo después. Vuelvo a mirar el reloj y mi corazón da otro brinco, sólo quedan 3 minutos para que sean las 6. Justo en ese momento veo que Clarke entra al local luciendo un vestido negro y unas botas, su cabello lleva unas trenzas, pero está suelto. Ella se da cuenta de que yo ya la estoy esperando y se acerca a la mesa.

— Buenas tardes, Lexa.

— Hola Clarke, te ves preciosa, había olvidado lo hermosa que eres. -Observo como un bello sonrojo aparece en el rostro de Clarke. Me levanto y le entrego la rosa, ella parece sorprendida, pero la acepta sin hacer ningún comentario. Nos sentamos y la observo por un momento, realmente los años la han hecho verse más imponente, preciosa e inteligente. Ella está concentrada jugando con la rosa y por fin me percato de que ella también se encuentra nerviosa.

— ¿Cuándo te decidiste por obstetricia? -Ella me mira y sonríe por mi intento de comenzar una conversación.

— Fue en un viaje que hice con Octavia, ella estaba embarazada y cuando estábamos en medio de la nada, entró en labor de parto. Me tuve que orillar y ayudarla a tenerlo ahí mismo. Agradezco tanto haber tenido los conocimientos necesarios para que Nyko naciera en perfectas condiciones. Y ahí lo decidí, quería ser cirujana con especialidad en obstetricia.

— Vaya, no sabía que Octavia y Lincoln habían tenido un hijo.

— Lo tuvieron hace 5 años, dos meses después de que nos separamos, ella anunció que estaba embarazada. Y como Nyko el mejor amigo de Lincoln en el ARMY falleció en combate por salvarle la vida a su escuadrón, incluido Lincoln, lo nombraron en su honor. De hecho, Octavia está esperando su segundo bebé. Tiene cita dentro de dos semanas para saber el sexo.

— La pequeña Octavia va a ser mamá de nuevo y yo ni siquiera sabía del pequeño.

— Bueno, teniendo en cuenta que luego de nuestra ruptura tú desapareciste no es una sorpresa que no tuvieras ni idea. -Ella comienza a leer el menú y yo no puedo contradecirla, es verdad que me fui, no soportaba hablar con nuestros amigos y que el tema de conversación siempre me trajera de regreso a Clarke.

— Tienes razón. Sólo espero poder conocer a esos pequeños, soy bastante buena con los niños.

— ¿Tú buena con los niños?

— Digamos que aprendí a la mala que soy buena con ellos. -Por mi mente pasa el pequeño Aden y como lo tuve que adoptar luego de la muerte de sus padres.

— ¿En qué aspecto? -Clarke se ve bastante confundida.

— Tengo un hijo, se llama Aden y tiene 6 años, sus padres murieron en un robo a un banco en el que Alex y yo fuimos las primeras en llegar. Él tenía 2 años en ese entonces, yo tuve que llevarlo al hospital para que lo revisaran, y al hablar con servicios infantiles nos enteramos que sus padres no tenían familiares a los cuales contactar. Se iba a ir a un orfanato, y yo no pude soportarlo, ese niño se había robado mi corazón desde el primer momento que lo tuve entre mis brazos. Por lo que comencé con los trámites de adopción, y con ayuda de Lexa y Sam en unos meses legalmente ya era mi hijo. Antes de él yo estaba totalmente en el campo, pero luego decidí que quería verlo crecer y pasar más tiempo en su vida, también el hecho de que no sería justo que se quedará sin su madre. -Clarke se ve muy sorprendida por mi confesión. En eso la mesera se acerca para tomar nuestra orden. Cuando la chica se retira, Clarke todavía se ve tensa.

— ¿Entonces tienes un hijo y se llama Aden? -Veo que no espera que responda, sólo está asimilando toda la información.

— Sé que es algo bastante grande, y que no puedo pedir una oportunidad sin que tú sepas toda la verdad, por eso te lo hago saber.