Lily y James a través de los tiempos

Los Potter

-Lily te he dicho que no deberías preocuparte, son adorables- James había repetido esas mismas palabras un mínimo de diez veces.

-James siguen siendo mis suegros, no puedo evitar estar nerviosa, ¿no lo entiendes?

-Pero si ya te conocen, llevo hablándoles de ti desde nuestro primer año.

-¿James en serio?

-Completamente.

-Tu madre me va a odiar, ¿sabe las veces que te rechacé?

-Todas y cada una de ellas- James asintió a sus palabras -Pero no te odia Lily, ella fue igual de dura con mi padre- Esas palabras tranquilizaban una parte de mi, pero la otra gran parte seguía igual de inquieta.

Su mano tomó la mía entrelazando nuestros dedos. Ambos salimos de la sala común bajo de la mirada de aquellos que aun no asimilaban que por fin, Lily Evans, o sea yo, había aceptado a James como novio.

-Cornamenta, Lily- Sirius nos saludó con una de sus mejores sonrisas interponiéndose en nuestro camino.

-Es verdad Lil's, Sirius vendrá con nosotros. Siempre pasa las vacaciones con mi familia, es como mi hermano ya sabes- Sonreí levemente mirando a ambos. La idea de que Sirius también estuviera con nosotros me tranquilizaba aun más.

-Me muero de ganas de volver a comer esa tarta que hace siempre Dorea- Sirius llevó sus manos a su estómago sonriendo.

-Siempre piensas en lo mismo canuto.

-Siimpri piinsis in li mismi ciniti. Voy a buscar a lunático, el comprende mi hambre.

-Él te soporta más- James recibió un pequeño golpe en su hombro por Sirius y ambos rieron.

Tras la ida de Sirius, ambos salimos del castillo dispuestos a dar una última vuelta por los grandes jardines. Sabíamos que en unas horas nos iríamos para siempre.

-Es muy raro, ¿no crees?

-¿El qué?- James frunció el ceño sin soltar mi mano.

-Irnos de Hogwarts. Lo echaré de menos.

-Ahora vamos a empezar una etapa mucho mejor además te tendré para mí más tiempo y...-El discurso de James se vio completamente interrumpido por Severus.

-Lily, ¿es verdad?

Tanto James como yo nos giramos un tanto sobresaltados ante su voz y su pregunta.

-¿El qué Sev?- Solté la mano de James para acercarme a él.

-Que irás a casa de los Potter.

-Sí, solo serán unos días para conocerlos...luego James vendrá a mi casa- Sonreí de medio lado esperando una buena reacción que realmente nunca llegó.

-¿¡Cómo has podido caer tan bajo Lily!?, ¿con el necio de Potter?

-¡Oye Quejicus...!- Posé mi mano sobre el brazo de James evitando que continuase hablando y de que avanzara hacia él.

-Sev, es mi novio...Soy feliz con él, deberías entenderlo eres mi mejor amigo.

-¡Te creía más lista!

-¡Severus por favor no puedes enfadarte por esto!, siempre hemos sido amigos y...-Había avanzado hacia él tratando de tranquilizarle. Mi mano se posó en su brazo con suavidad pero enseguida la apartó con fuerza.

-¡Nunca sería amigo de una sangre sucia!

Sus palabras habían sido completamente dañinas. Estaba acostumbrada a oír ese insulto pero nunca imaginé que él fuera capaz de decírmelo.