🍊 11.

276 50 35
                                    

❅❁❆❀⁂❀❆❁❅

Minhyuk y Kihyun entraron en la casa de huéspedes con el cansancio apoderándose de sus cuerpos, con los párpados pesándoles, pero con una urgencia de bañarse para quitarse todo el sudor acumulado y caer rendidos sobre la cama. 

La caminata había sido ardua y toda la información nueva que recibieron en esas horas junto a la Sra. Dodo los había puesto en un estado de sentimientos encontrados. 

Los recibió la Sra. Hyunja con cara de evidente preocupación. Los interceptó en la entrada con el celular de Minhyuk en la mano izquierda y un pedazo de papel en la derecha.

—Dejaste el celular en recepción, Minhyuk —él exclamó un leve "oh, es verdad"—. Estuvo sonando insistentemente. Decidí contestar porque supuse que sería una llamada importante. 

—¿Quién era? ¿Dejaron algún mensaje? —recibió el celular y vio en el historial de llamadas el nombre de su contacto "Bbo" y supuso el motivo de su insistencia al llamar. 

—Era una tal Bohyung —la enfermera personal de su abuelo—. Me dijo que te pasara el siguiente recado —empezó a leer lo escrito en el papelito—. "Min, tu abuelo despertó esta mañana. Tu familia necesita que regreses de inmediato junto con Kihyun". 

Los dos primos se miraron con el asombro reflejándose en sus rostros. Sabían que ese momento llegaría, pero eso no evitó que empezaran a sentirse ansiosos. Supieron que era hora de irse y el peso de esa verdad fue hiel amarga en sus vidas. 

Esa llamada fue el golpe de realidad que Kihyun se había empeñado en ignorar en esos días. Debía regresar a Seúl y eso no se podía evitar. Tendría que dejar el pueblo dentro de poco, pero cómo hacerlo con todas las experiencias nuevas por las que había pasado. 

Las siguientes horas pasaron bajo sus ojos como en un ráfaga fugaz, los minutos escurriéndose de su vida sin saber cómo actuar. Kihyun tuvo miedo. Miedo a sus propios sentimientos y lo que habían provocado en él. 

—¿Te sientes bien? —le preguntó su primo al notarlo tan ausente cuando llegaron a su cuarto—. ¿Quieres hablar conmigo? 

En eso Kihyun salió de su ensimismamiento, reaccionó tratando de controlar su expresión facial y aparentar entereza de ánimo, pero no fue del todo convincente. 

—¿De qué tendríamos que hablar más que de la compra de boletos de avión? —expresó con los labios casi apretados—. Debemos salir mañana mismo. 

Minhyuk lo observó con los ojos entrecerrados y supo qué significaba la actitud de su primo. Esa vez quiso ser prudente y no presionarlo, así que sólo relajó su semblante resoplando bajito y siguió el plan: irse ahora que ya habían resuelto el misterio del primer amor de su abuelo. 

—Bien. Le diré a Jooheon que traiga a primera hora el carro rentado. Se quedó en el taller y, como dices, probablemente tengamos que salir mañana temprano. Voy a revisar los boletos —tomó su celular y empezó la búsqueda de los horarios de salida en el aeropuerto de Jeju. 

Encontró unos que intentó comprar pero no pudo porque no se acordaba de los datos de su tarjeta, por lo que debían llegar antes con la intención, primero, pasar por su cartera al negocio de renta de carros y, con suerte, comprar dos boletos para Seúl.

Kihyun estuvo de acuerdo y decidió meterse a la regadera antes de irse a dormir, pero se tardó más de la cuenta bajo el chorro de agua y el baño no evitó que dejara de sentirse tenso. 

Mientras tanto, Hyunwoo dirigió sus pasos a la casa donde vivían su madre y su hermana menor, Wheein. Era una casa similar a la suya, con un jardín más amplio y sin establo.

.ꕥℋoy como ayerꕥ. {ShowKi} ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora