XIV

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Pasó casi toda la semana sin que los Cullen volvieran al instituto. Sí,  había estado contando los días, estaba nerviosa por volver a ver a Jasper.

Era viernes. Si os preguntáis cómo fue la tarde de la playa en la Push pues como lo describiría... aburrida, no paso nada interesante Bella y su amigo de la infancia se alejaron del grupo supongo para recordar viejos momentos mientras que yo trataba darle una paliza a Jessica en el volley. Al final del día no paraban de reprocharme con gracia lo competitiva que era.

Al aparcar la bici en frente de la puerta del insti, sentí un hormigueo invadir mi nuca. Me giré y allí estaban aquellos ojos tensos mirándome sin parpadear. No se porqué ni cómo pero me sonrojé. Sentí un abrumador calor en mi cuerpo como si me desnudara con la mirada. Mi corazón bombeaba con tal frecuencia que pensé que a mis miseros 17 años iba a darme un infarto. Ante mi comportamiento sonrió con gracia como si fuera intencionado lo que estaba provocando en mi organismo.

Afortunadamente,  nuestro contacto visual fue interrumpido  por Alice quien arrastró a Jasper hacia la entrada

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Afortunadamente,  nuestro contacto visual fue interrumpido  por Alice quien arrastró a Jasper hacia la entrada.

Suspiré con tranquilidad y comprobé mi ritmo cardiaco. Todo se normalizó. No sería divertido ir a  la enfermería por no poder controlar mis hormonas.

Excepto por lo sucedido en la mañana , mi rutina continuó igual, clase de biología, mates... en cada una veía a Bella y Edward más cercanos y acaramelados. Hoy por fin empezaría la optativa de música. No la había empezado desde el principio a causa de un problema de matriculación. Consulté mi agenda, distraída, en busca de la clase MDO1 lo que traducido en lenguaje coloquial significaba música, a la derecha, primera planta.

Subí las escaleras apresuradamente para no perder la clase. Con la prisa miraba mis pies para no caerme, idea estúpida por que aunque no me caí me choqué con lo que parecía una pared humana. Jasper, era esa pared, concretamente, su pectoral.

-¿Estas bien? ¿Por qué estas tan apresurada?

- yo.. lo siento voy a clase de música y llego tarde , por un problema al matricularme he perdido una semana y no encontraba el aula... mi guía ha estado ausente desde el primer día. 

- Yo voy a clase de música si quieres vamos juntos, no te preocupes el profesor siempre llega tarde además así cumpliré mi trabajo como guía- Dijo guiñándome el ojo

-Espera... eras tú! ¿Tú sabes cuantos regaños me he tragado por llegar tarde por tu culpa ?- hinche mis mejillas mostrando un cierto enfado

-JAJAJA pensaba que eras de esas mujeres fuertes e independientes que no necesitan un escolta.

-Lo soy pero eso no te libra de tu trabajo jeje

Entre risas llegamos a la dichosa clase donde nos encontramos una nota escrita en un post-it amarillo. La nota decía " por problemas imprevistos se ha cancelado la clase de hoy. Como deberes para la semana que viene aprender la partitura a piano de claro de luna de Debusy "

-Anda que moderno el profe de aquí a nada nos mandaran notificaciones por whatsapp, como espera que nos la sepamos si ni siquiera tengo piano.

- Bueno la clase está abierta y hay un piano dentro ¿Quieres que te enseñe? esa canción es más fácil de tocar de lo que parece,mi hermano Edward no deja de tocarla como un condenado sobretodo cuando está con Bella en nuestra casa.

-Wow no sabía que iban tan en serio.

-Sí, a la familia no se presenta a cualquiera. Además, Edward nunca se interesó antes por ninguna chica ya pensabamos que era asexual o algo. - Me reí ante su gracia,  entramos a la clase y se sentó en el piano.

-¿Tú y Alice lleváis mucho tiempo ?- al momento me arrepentí de preguntarlo pues era algo personal y tampoco nos teníamos tanta confianza temía que por algo así me quisiera echar de su presencia - Lo siento no quería...

-Tranquila. Llevamos mucho tiempo juntos, desde que me uní a los Cullen.- Extrañamente lo expresaba como si no fuera una adopción.

-Prácticamente solo has estado con ella, debéis estar muy unidos. Yo nunca he estado con nadie.  Mi hermano intimidaba demasiado a mis amigos así que aunque me gustara alguien esa persona se alejaba de mi.  ¿Entonces, nunca te ha gustado nadie más a parte de Alice? Es raro ver a una pareja hoy en día tan comprometida como vosotros .

-He visto a tu hermano no parece intimidar así que aquellos que no te correspondian por algo tan poco relevante no te merecian.  Respecto a Alice nos tenemos cariño y respeto pero ella dice que mi felicidad plena es con otra persona. Seguimos juntos hasta que eso suceda, hasta que aparezca dicha persona. - Puntualizó

- Vaya... - dije apenada por sus situación excepcional.

- El problema es que esa persona ha llegado antes de lo que esperábamos y me cuesta mantener el control . Alice me explicó que era el destino y que por mucho que trataremos de evitarlo mis sentimiento ganarían.

- Entonces ya has mantenido contacto con esa persona ?- asintió ante mi pregunta- ¿ Y qué es lo que sientes por ella?- mi corazón esperaba ser yo aquella persona. 

-No lo sé, deseo tomarla, protegerla besarla ahora mismo- miraba mis labios como si fuera yo mientras ladeaba la cabeza negando sus sentimientos- Pero no quiero hacer daño a Alice. Ella solo quiere que todos seamos felices pero en el fondo se que se siente triste.

-Pues lucha contra el destino. Alice no ve el futuro. Puedes evitarlo- Trato de anímale pero ante mi osada afirmación se ríe como si le hubiera contado el mejor chiste de su vida .

-Oh Odisea no sabes nada- agarró mi mentón acariciando mis labios con su pulgar, mi cuerpo tembló ante dicha acción imprevista, pero no quería que se detuviera. Soy egoísta, lo deseo, deseo ser aquella persona destinada a él. Deseo besar y ser consumida entre sus manos en una dulce y efímera pesadilla.   - Señorita Odisea, deberíamos proseguir con la partitura.


Eres mi atrapa Sueños-Jasper Hale Donde viven las historias. Descúbrelo ahora