imagina, ambas son unas completas locas y psicópatas asesinas, aunque Lauren intenta controlarse porque no le gusta mucho, pero cuando se trata de Camila no duda en matar a quien se le ponga enfrente.
Por otro lado, Camila, lo disfruta, disfruta el...
Seguíamos platicando cuando la chica del otro día nos vino a dejar los helados.
Ariana: Hola chicas aquí están sus helados- fue repartiendo los helados uno por uno con una sonrisa hasta que llegó a mí, yo le regalé una sonrisa burlona.
Ariana: Tú- creo que me lo dijo con, no, definitivamente me lo dijo con odio y desprecio, yo mantenía mi sonrisa de burla hacía ella.
-Si, soy yo, algún problema linda.
Ariana: Que mierda haces aquí?- uhh! Definitivamente si está enojada.
-Como un helado con mis amigas, que no es obvio, acaso el golpe te dejó mal de la cabeza linda?- me gusta, no, no me gusta, me encanta tentar y enojar a las personas a tal punto que llegan a explotar, y es justo lo que estoy intentando con ella en este momento.
Ariana: Ahh- soltó un suspiro de frustración- eres una completa perra- y ahí estaba, la chica explotó, pero antes de irse tomo mi helado y me lo huntó en toda mi blusa, no me enojé tanto ya que yo la había tentado y para mí suerte la gerente se mantenía al tanto nuestra pequeña conversación, sonreí victoriosa.
Xx: Ariana!-se escucho el regaño casi grito de la gerente- a mi oficina ahora mismo!.
Ariana bufó enojada y se alejó de la mesa, antes de que ella entrara volví a hablarle.
-Suerte linda-le sonreí de nuevo. Mi plan había funcionado, era obvio que iban a despedirla, me limpie mi blusa con una servilleta y un poco de agua, pedí otro helado y seguí conversando con mis amigas que me veían entre diversión y asombro.
Ariana salió 15 minutos después y fue directo a la salida, no la perdí de vista para saber porque camino iba y tener una idea de dónde más o menos vivía, en otro rato tendría tiempo para seguirla.
Lauren Pov
Dejé a mi hermanita en su habitación y fui a alistarme también, quite mi ropa, y me dirigí al baño de mi habitación, salí 30 minutos después, hubiera salido antes si el pensamiento del cuerpo desnudo de Camila no me hubiera venido a la mente, tuve que ocuparme de la no tan pequeña erección que había tenido en ese momento, al salir me dirigí a mi armario a buscar que ponerme, me puse un boxer y top deportivo clavin Klein color blanco, una remera color purpura, un pantalón negro de mezclilla rasgado y mis vans negros, aparte tomé una sudadera negra para ponerme la después por si hací frío más tarde, tomé mis lentes de sol y los enganche en mi camisa.
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Tomé mi mochila Jansport negra y guardé ahí mis unos guantes negros, un pañuelo negro con unas figuras blancas, un pantalón, camisa y zapatos viejos, una botellita de cloroformo que había comprado en línea, otro pañuelo en color blanco, mis dos navajas mariposa y mi Magnum calibre 44, la había comprado para tenerla en caso de alguna emergencia, obviamente solo yo sabía de la pistola.
