Capítulo 21

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Lauren Pov.

Cerré la puerta con seguro y cargué a Camila, caminando por toda la habitación en dirección a la cama, mientras no paraba de besarla y tocar su cuerpo.

Justo cuando la iba a acostar en el colchón ella se bajó de mi y nos separó un poco.

Camila: Se te olvidó que te tenía una sorpresa?- sonrió coqueta- espera- mordió mi labio- justo- bajó su mano a mi pene dándole un apretón- aquí- se alejó dejándome paralizada en mi lugar.

Tomó una silla que estaba en una esquina de la habitación, y camino hacía mí, arrastrando la silla tras ella.

Se puso frente a mí y colocó la silla a un lado de.

Camila: Siéntate- ordenó, estaba a punto de obedecer, cuando me detuvo tomando mi brazo suavemente con su mano, me atrajo a su cuerpo y susurró a mi oído pasando su dedo por todo mi pecho y abdomen- primero quítate la ropa, solo quédate en bóxer- lo hice lo más rápido que pude, dejando mi ya muy erecto pene bajo la tela de mis bóxers- muy bien- sonrió- ahora siéntate, y disfruta lo que tengo para tí- casi me caigo al querer sentarme de prisa, ella sonrió negando.

Se alejó una vez más y tomó su celular en manos, comenzó a buscar algo y cuando lo soltó poniéndolo en la mesita de noche junto a mí, una canción de la más sensual comenzó a sonar.

Comenzó a moverse ligeramente, y entonces supe muy bien lo que iba hacer, me vio directo a los ojos y se quitó su blusa muy lentamente, torturando me, y dejando a mi vista un sostén negro muy sensual, empecé a masturbarme por encima del boxer y cuando ella lo vió caminó hacía mí para quitar mi mano de ahí.

Camila: No tienes permitido tocarte, solo yo lo haré, si lo vuelves hacer no seguiré- me vió muy seria, asentí y ella sonrió dejando un beso en mis labio para volver a separarse de mí.

La música seguía sonando, ella continuaba moviéndose lento y sensualmente, desabotonó sus jeans y después bajo la cremallera, dejándome ver el inicio de una linda lencería color negro, creí morir en el instante en que se dió la vuelta dejándome ver su trasero y comenzó a bajar lentamente sus jeans, deslizando los por sus morenas y esbeltas piernas cubiertas por unas medias transparentes color negro, que hacen conjunto con el resto de su lencería, yo veía cada paso que ella hacia, me tenía al borde de la locura, cuando terminó de bajarlos, quitó sus zapatos para poder quitarse también sus jeans, se dió la vuelta y comenzó a caminar en dirección a mí.

La música seguía sonando, ella continuaba moviéndose lento y sensualmente, desabotonó sus jeans y después bajo la cremallera, dejándome ver el inicio de una linda lencería color negro, creí morir en el instante en que se dió la vuelta dejándome ve...

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Se colocó frente a mí y separó un poco mis piernas, se inclinó un poco para besarme colocando suavemente sus manos en mis piernas.

Terminó el beso y se dió la vuelta sentándose en mi entrepierna, comenzó a mover su delicioso cuerpo al ritmo de la música, restregando su trasero por toda mi erección, coloqué mis manos en su cintura incitándola a qué se moviera más, bajé mi mano izquierda pasándola lentamente por la piel de su pierna, acariciando un poco para volverla a su anterior lugar, ella levantó un poco su trasero, casi poniéndolo a la altura de mi rostro, rápido pose una mano en el antes de que ella volviera a bajarlo y sentirse en mi, para continuar sus maravillosos y sensuales movimientos.

Se paró dándose la vuelta para mirarme fijamente, pasó su mano por mi cabello y se volvió a sentar sobre mí, cara a cara esta vez, reanudó sus movimientos sin parar de besarme, la silla se movía un poco junto con nuestros cuerpos, se separó del beso y habló.

Camila: Te gusta?

-Ahh me encanta- le sonreí y coloqué mis manos en su trasero para poder estrujarlo a mi gusto.

Camila: Mmm- gimió- ¿Ahh q-que haces?- la sujeté bien y me levanté de la silla con ella encima, me di la vuelta y me senté de nuevo, teniendo la a ella entre la silla y mi cuerpo, comencé a besarla de manera casi desesperada, mientras movía mi cadera como si la estuviera penetrando, rozando mi dura polla con su coño, bajé mis besos a su cuello, lamiendo, mordiendo y succionando para dejar pequeñas marcas- ahhh, ya hazme el amor por favor, no creo soportar más.

Me levanté y la tomé para poder cargarla,ella enrolló sus piernas en mi cintura, caminé en dirección a la pared, aprisionando la contra mi cuerpo y la dura pared de la habitación, mientras la besaba e intentaba desabrochar su brasier, lo cual logré unos segundos después, lo quité delicadamente dejando a mi vista sus perfectos pechos, seguí besándola mientras movía una mano por nuestros cuerpos hasta llegar a su pecho y apretarlo con mi mano, ella gimió entre el beso.

-Espero que no hayas gastado mucho dinero por esta lencería- hablé despacio, cerca de sus labios, bajé la mano que tenía en su pecho la coloqué en el inicio de su braga, junto a mí otra mano para tomarla y comenzar a romper un poco.

Camila: P-porque lo pregun- Lauren!- gritó cuando terminé de romper el dedazo de tela que cubría su delicioso coño.

-Ups, creo que se rompió, lo siento- sonreí y volví besarla, mientras intentaba bajar mis bóxers, cuando lo logré mi erección entró en contacto con su ya muy húmedo coño, comencé a pasarlo separando sus pliegues y ella comenzó a gemir un poco más audible.

Camila: Ahh! Por favor- sabía lo que quería, y no pensaba torturar la más, le clave toda la polla de una sola estocada, viendo cómo cerraba fuertemente sus ojos y abría su boca para gemir- Ahhhhh! Muévete- y así lo hice, comencé a moverme, entrando y saliendo rápido y duro- ah, ah, ahhh, Ahh- solo eso salía de su boca, yo no paraba de ver su rostro, se veía tan hermosa con sus mejillas sonrojadas, entrecejo fruncido, ojos cerrados y su boca entreabierta liberando esos hermosos gemidos que tanto me encantan.

- Ahh te gusta así mi amor?, Te gusta como te meto la verga?- pregunté moviendo me más rápido.

Camila: Ahhh! Si, si Dios, si, me encanta como me follas Jauregui, y me encanta tu gran y deliciosa verga, más duro por favor, mmm! Mierda- joder! Me estaba excitando más que hablara así.

-Ah, como tú quieras- de inmediato empecé a embestir más duro y rápido me lancé a sus labios, comenzando a besarla torpemente ya que nuestros gemidos nos impedian hacerlo bien, la separé de la pared y la llevé a la cama sin dejar de embestirla, me senté en el colchón dejándola a ella arriba, quien comenzó a moverse de manera inmediata.

Daba pequeños brincos encima de mí, y luego se movía de adelante hacia atrás, causando una deliciosa fricción.

Camila: Ahh, recuéstate, quiero montarte bien- No tenía que pedir eso ni dos veces, rápido me acomodé en la cama, quedando contra la cabecera, ella se acomodó encima de mí, puso sus manos en mi abdomen y reanudó sus movimientos y saltitos sobre mi- mierda que rico ahhh, nunca me cansaré de montarte mmm Ahhh!- puse mis manos en cintura, ayudándole con los movimientos.

-Ven aquí- bajó un poco su cuerpo y colocó sus manos a los lados de mi cabeza, elevé un poco mis piernas, acomodándome, comencé a penetrarla rápido y duro, sin piedad alguna, todavía sujetándola de la cintura, sus pechos quedaron frente mi cara y no dude en llevarme uno a la boca.

Camila: AHHH! No, no puedo, y tú Ahhh, Sigue, sigue, Dios ahí, justo ahí amor, Ahh!- comenzó a decir incoherencias cuando encontré su punto G, dónde me concentré en comenzar a penetrar.

-Camz estoy cer-ca amor, ohh- la penetré más rápido, buscando nuestra liberación.

Camila: Mierda, yo igual, A-ahh ya casi, u-un poco m-más amor Ahhh- tres embestidas más y Camila ya se estaba viniendo junto a mí en un delicioso orgasmo- AHHH LAUREN- gritó tan fuerte que creo que todos los que estaban en el motel la escucharon.

-AHHH C-CAMILA- me vine dentro de ella, pintando su interior de mi blanca esencia.

Camila: Mmm- ronroneó- me gusta cuando te corres dentro de mí- me sonrió perezosa mente.

- Y a mi me gusta correrme dentro de tí- Cuando terminé ella se dejó caer exhausta, recostando se en mi cuerpo, como pude tomé la manta de la cama y nos tapé, nos quedamos dormidas así, en esa posición, con mi polla todavía dentro de ella, pero feliz y satisfechas.

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Perdón por la tardanza pero aquí está el otro capítulo...

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