𝘙𝘦𝘤𝘶𝘳𝘳𝘪𝘮𝘰𝘴 𝘢 𝘶𝘯𝘢 𝘤𝘩𝘪𝘤𝘢 𝘥𝘦 𝘰𝘳𝘰

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❝Jodete, Jackson❞

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Jodete, Jackson❞
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Seafret/Oceans

— Tienes que salir, Helena... — Me rogó Malcolm — No puedes seguir así...

Pero yo no lo escuchaba, no quería escucharlo.

El mundo se había teñido de un profundo gris, como las cenizas de un hogar que había sido azotado por el fuego en pleno invierno y que lamentablemente había arrasado con todo a su paso.

Muchas veces había escuchado el término « muerta en vida » en libros y series, y siempre lo asociaba a la depresión y ese tipo de cosas tan deprimentes que te hacían apartar la mirada para no ponerte a llorar. Ahora me identificaba con ese maldito terminó.

Ahí estaba yo, tirada en mi cama con la mirada perdida, rodeada de miles de hilos que no dejaban de traerme a flote su recuerdo, pero la mente estaba centrada en miles de soluciones que me servirían solo para darme falsas esperanzas para que al final terminarán dejándome más destrozada de lo que me encontraba.

Por qué lo único que me mantenía en pie en estos momentos era la puta esperanza, a lo único a lo que podía aferrarme con uñas y dientes.

Habían pasados semanas.

Dos largas semanas de un sentimiento que atacaba tus puntos débiles en cualquier momento para hacerte llorar y gritar del dolor e impotencia.

Dos semanas en las que me había empeñado en buscarlo incansablemente hasta desmayarme en los suelos del laberinto con la probabilidad de morir ahí mismo.

Pero nunca lo encontré.

No había ni un puto rastro de sus ojos aguamarina y su sonrisa que había logrado cautivarme.

Y yo estaba a punto de quedarme seca y sin voz de tantas veces que le había llorado a su recuerdo, incluso desaparecer me resultaba más facil que la culpa que me atormentaba en las noches de haberlo dejado ahí. Mi cerebro parecía empeñado en recordarlo a cada paso y respiración que yo daba, por que entre aquellos chicos que paseaban dentro del campamento sin ninguna preocupación, siempre parecía lograr verlo a él entre todos con su deslumbrante sonrisa.

Pero nunca era él.

Era sólo mi cerebro aferrándose a lo que quedaba de Percy Jackson.

Desde que él había desaparecido mi cabaña se había vuelto mi cárcel personal por desicion propia. Las veces que salía eran contadas si no se trataba de salir en su búsqueda por milésima vez.

Habíamos bajado demasiadas veces al laberinto para mi gusto y varias veces estuvimos a punto de quedarnos ahí atrapadas. Pero eso no lograba pararme los pies.

𝑹𝒆𝒃𝒐𝒐𝒕; Percy Jackson ✔️ [#2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora