1- Vcienta: Un cuento, no tan cuento. 『KookV』

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✧┇Sensaciones que son del color del cielo 2

TAEHYUNG

En el camino al Palacio me quedé pensando en dos cosas.

1-El Palacio está realmente cerca.
2-¿Cómo es posible que Jungkook sea insaciable?

Nos deteniamos cada 5 minutos para besarnos.

Al llegar al Palacio nos detuvimos. Kook me hizo una señal de guardar silencio y seguirlo.

Así lo hice, llegamos a una pequeña puerta por la cual afortunadamente pasamos. Lo seguí hasta llegar a lo que supuse es el área donde viven los trabajadores, subimos unas escaleras hasta deternos en algo como el cuarto piso. Ya no podía más, por suerte Kook siguió derecho hasta llegar a otra puerta, la cual abrió y pasamos.

─Fue toda una travesía llegar hasta acá ─comento riendo. Dejo de verlo para mirar a mi alrededor─. Wow.

¿De verdad estoy vivo? Este cuarto, insignificante cuarto para los demás en el Palacio, es la gloria. Es demasiado enorme, sería un piso completo de mi casa, tiene una enorme ventana y balcón, la cama se veía suave y con esas cortinas se veía perfecta; en el piso (casi) se veía mi reflejo, el tocador y armario son grandes y relucientes de un color caoba.

Todo digno de un Palacio.

─Hay otras cosas que te pueden impresionar.

Miro a Jungkook confundido y río.

─No lo creo. Este cuarto es lo mejor que haya visto, excepto cuando fuimos a Jabena. ¿El cuarto es tuyo?

─Sí, el cuarto se ve bien, pero hay mejores vistas, y sí, es mi cuarto.

Me sonrojo por su mirada que me recuerda al día que nos conocimos.

─Tae ─me habla y lo vuelvo a mirar, Kook se acerca y me toma de las mejillas, jugando conmigo─tengo ganas de besarte y otras cosas, pero necesito tu consentimiento.

Me sonrojo aún más, pero aun así lo abracé por su cintura y lo besé.

─Cuando no quiera hacer algo te lo haré saber ─le digo.

─No quiero dañarte, así que asegúrate de hacerlo. ─Asiento y lo vuelvo a besar.

No tardamos mucho en agarrar ritmo haciendo que nuestro agarre se intensifique, haciéndonos casi uno. Sus manos empezaron a bajar por mi cuerpo llegando a mi cintura, para estar cómodo rodeé con mis brazos su cuello, sus manos siguieron bajando hasta hacerme brincar y rodear con mis piernas su cintura, como en el bosque.

Jungkook baja sus besos hasta mi cuello al mismo tiempo que camina hasta llegar a su cama y dejarme recostado. Empieza a quitarse su camisa, me sonríe socarrón al ver cómo lo miro.

Pero no hay excusa, su pecho definitivamente me dejo loco queriendo tocar sus pectorales y su marcado abdomen. ¿La ropa cubría todo esto?

─Tocame, Kim, si es lo que quieres hacer.

Lo miro y no pienso mucho, vuelvo a besarlo para alivianar mis nervios y por fin tocarlo. Definitivamente la realidad supera la ficción.

Kook volvió a mi cuello dejando besos húmedos y, si mi poca teoría no me falla, chupetones igual.

─Quítate la camisa ─su voz sonaba más grave y su aliento chocó en mi cuello, no evité gemir por eso. Con dificultad quite mi camisa. Tan rápido como mi pecho quedó descubierto, Kook bajó y empezó a lamer mi pezón izquierdo.