Demasiado Tarde // Julright 🌸

Cap. 3|| ¿Estaremos Juntos?

Miro hacia el plató, hay muchísima gente y realmente no se si lograré cantar delante de ellos yo sola.

Una suave caricia en mi hombro hace que deje de prestar atención al barullo de gente que nos espera allí. Alba me sonríe, esa sonrisa suya tan genuina y sincera.

- Tranquila, todo saldrá bien.

- No se, hay mucha gente... Estoy segura de que me olvidaré hasta de mi nombre ahí arriba.

Alba me coge por los hombros y me obliga a mirarla, vuelve a sonreirme y me acaricia los hombros ligeramente.

- Respira hondo. - la hago caso e inhalo y exhalo varias veces. - Muy bien. Ahora, ten por seguro de que vas a hacer un numerazo y de que vas a entrar.

Varios minutos después, Roberto va presentando a los concursantes para que se vayan sentando en los sofás. Cuando es mi turno, vuelvo a respirar hondo y salgo, sonriente y con una confianza que ni yo misma me creo. Roberto me hace las típicas preguntas y luego pasa al siguiente.

Cuando ya estamos los dieciocho seleccionados, van poniendo vídeos de los castings de cada uno antes de que cantemos.

Cuando llega mi turno, me coloco en medio del escenario, cierro los ojos por unos segundos e instantes después comienzo a cantar como suelo hacerlo. No me fijo en el público, ni en el jurado, ni en mis compañeros. Tan sólo presto atención a la música y me concentro en hacerlo bien.

Al terminar vuelvo al sofá, y le veo. Tiene la misma sonrisa de aquella noche, aunque esta vez debido a una pregunta que le ha hecho Roberto, es el turno de Carlos.

De actuación en actuación, la gala va llegando a su fin. Ya están dentro del concurso Alba, Natalia, un chico llamado Famous y Miki. Me giro la pulsera que llevo puesta en la muñeca con nerviosismo hasta que Manuel Martos me pide que me levante. Lo hago sin rechistar y le miro atentamente. Me dice unas palabras muy bonitas y tras ellas que estoy dentro del concurso.

Cruzo hacia donde están todos mis compañeros que han pasado y abrazo a Natalia y Alba. Poco a poco van llegando uno a uno, hasta que finalmente quedan tres en duda. Rodrigo, Luis y... Carlos.

No he hablado casi con él estos días, pero realmente me gusta muchísimo la vibra que transmite y me siento muy cómoda a su lado, sinceramente espero que entre él.

Cuando vamos a la academia Noe nos cuenta que en breves podremos saber quién es el último clasificado para entrar pero que antes nos quiere enseñar la academia.

Es todo muy surrealista, estoy aquí, en OT. Si dios quiere durante tres meses, haciendo lo que más me gusta y con algunas personas que me caen muy bien y otras con las que sé que forjaré grandes lazos.

Mi mente vuelve a esos tres de allí fuera, me llevo bien con todos pero sin duda alguna me gustaría que entrase Carlos.

Me transmite muy buenas cosas y me gustaría llevarme con él, llevo queriendo hacerlo desde aquella noche en el bar.

Noe nos dice que vayamos a la entrada de la academia y que esperemos allí al último concursante. Cruzo los dedos y ruego a lo que sea que hay ahí arriba para que el que entre por esa puerta sea Carlos.

La puerta se abre lentamente hasta dejar ver la cara del concursante. Y realmente tengo que reprimir un chillido de emoción al ver que es Carlos. Todos corremos a abrazarle y le damos la enhorabuena.

Tras unos minutos hablando con Noemí entre todos sobre lo que haremos mañana, la directora nos indica que el 24 horas se ha apagado y que intentemos dormirnos pronto ya que mañana y los próximos meses serán difíciles.

Todos nos ponemos el pijama y nos quitamos el maquillaje que llevamos. Poco a poco, vamos entrando al cuarto y eligiendo litera. Cojo una que está casi al final, pero no es la última. Me tumbo en ella y comienzo a divagar en mis pensamientos.

Paso tanto tiempo así que no me doy cuenta de que todos están dormidos ya. Miro con cuidado el móvil y veo que son las tres y media de la madrugada. No puedo dormir.

Salgo de la habitación en puntillas y con cuidado de no despertar a nadie. Al salir cierro la puerta y voy a la zona de los armarios. Cojo mi guitarra y voy al salón, ya sin tanto cuidado, pero intentando no hacer ruido.

Me siento justo en medio del gran sofá y dejo que mis manos se muevan solas sobre las cuerdas.

Sale una melodia muy bonita y se que pronto le pondré letra. Contenta con mi nueva adquisición musical sonrío mientras apunto los acordes en la libretita que tengo para ello.

- Bonita melodía, leona.

Doy un pequeño gritito y miro hacia un lado, me relajo un poco al ver quien es.

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