"Alyx... no..."

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El metal chirriante despertó a Gordon, se dio cuenta de que estaba en los restos del tren donde había huido de la ciudad. Todo estaba destrozado y abollado. Fuera del tren se veían árboles y rocas, parecía estar en una zona rural.

Se levantó y se dio cuenta de cuatro cosas cosas: 1. Alyx no estaba, 2. No tenía armas, 3. No tenía traje de protección y 4. Tenía una barra de hierro atravesandole el estomago.

Se arrancó la barra de hierro y se curó con el humo rosado. Empezó a llamar por Alyx a gritos sin obtener respuesta.

_ ¡¡Alyx!!

_ ¿¡Gordon!? ¡¡Gordon!!

La puerta trasera del tren salió disparada y vio a Alyx, con la ropa algo rasgada y algo sucia. Llevaba en sus manos el arma antigravitatoria y una bolsa a la espalda.

_ ¡Por fin te he encontrado!

Gordon se lanzó a los brazos de Alyx dándose un abrazo.

_ ¿¡E--Estás bien!? ¿Estás herida?

_ No, salí ilesa... por suerte... aunque - Miró a su alrededor - Íbamos en el mismo vagón... y de repente...

Gordon sonrió.

_ Todo un misterio.

_ ¡Oh! ¡Mira! - Dejó la bolsa en el suelo y se agachó para abrirla - La encontré cerca de mí... ¡tiene tu traje dentro!

Gordon se agachó y fue colocando las piezas de su traje en orden.

_ Ya lo echaba de menos. - Agarró las manos de Alyx - Sobre... lo que pasó... antes de la explosión--

Una honda muy fuente hizo que los objetos menos pesados, incluido ellos, flotaran durante unos segundos.

_ ¿Qué ha sido eso?

_ Ni idea...

Los dos empezaron a caminar por allí intentando encontrar Ciudad-17.

_ Dios mio...

_ La ciudadela...

_ ¿Pero qué está pasando?

A lo lejos se veía la ciudad completamente destruida. De esta salía una enorme torre de lu azul que daba en el cielo, justo en la rasgadura, haciendo que se hiciera más grande.

Otra honda hizo que el puente detrás de ellos se derrumbar haciéndoles imposible volver.

_ Menos mal que hemos salido de allí...

_ Es como en el Comienzo otra vez... espero que no haya más...

_ Lo mismo digo...

_ ¿Por dónde vamos ahora?

A Gordon le empezó a salir un humo gris.

 _ Sígueme.

Se metieron en unas minas abandonadas.

_ No me extrañaría que fuera un refugio rebelde...

El lugar cambió repentinamente cuando vieron muchos cuerpos de zombis y hormigas leon muertas.

_ Vaya... esto no parece seguro.

_ Solo parece...

Atravesaron las minas y llegaron a unas casetas de metal en las que entraron viendo un gran monitor antiguo junto a un generador eléctrico muy grande junto a otras cosas.

_ Bien, un centro de comunicación. Veamos si puedo hablar con papá - Se acercó al monitor - El doctor Kleiner y papá están en un viejo silo de misiles.

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