Después de los sucesos de: Word War Hulk DC; la Liga de la Justicia busca lo que le da honor a su nombre. Y una vez recuperados, se proponen a viajar al universo Marvel, en busca de juzgar a los Iluminati; grupo que fue responsable de desterrar a Hu...
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La luz de las estrellas brillaban con toda intensidad en el reino de Parus. Una noche perfecta, en donde por arriba de una plataforma; algo elevada por encima del suelo, se llevaba a cabo una interpretación artística de las aventuras del Caballero Dorado. Al frente de esta, varios de los habitantes del reino, veían el espectáculo sentados en sillas o banquitos; riendo.
—Eso no pasó exactamente así —susurró Licanod sentado al lado de su futura esposa: Luz.
—Pero es tan, gracioso —decía la ángel.
En la plataforma, un hombre disfrazado con una armadura hecha de madera; actuaba la batalla que alguna vez tuvo Licanod contra un dragón, el cual era representado en sombras. Lo que le molestaba al ya retirado caballero, era lo confiado de las frases del actor. Lo hacía ver fácil cuando esa vez casi murió.
—¿Por qué te sorprendes? Creí que eras mi ángel guardián. ¿Nunca viste ese combate?
—Los ángeles no vemos tal cual la vida de nuestras responsabilidades. Vemos, por llamarlo de una forma: fragmentos. Lo que más percibimos son emociones, como: tristeza, dolor, furia, alegría. Y a veces, algunas de esas emociones nos cuesta entenderlas. Por ejemplo, lo que ustedes sienten cuando escuchan música. Cuando leen, o ven algo que les emociona. La, "pasión", para nosotros, es algo tan complejo como el amor.
—¿Entonces, cómo sabes que te enamoraste de mí? —le preguntó Licanod.
—Porque... Es una sensación, que jamás había sentido. Es como un: hechizo; ¿sabes? Es, impresionante, como es que puedes hacerme tan "feliz"; sin nada. Los ángeles, somos avariciosos. Pero contigo, con tu abrazo, tus besos... Es como si ya no, requiriera nada más.
—Algo así es una pasión —aseguró Licanod girándose para ver la obra; sonriendo—. La gran mayoría de personas que es famosa en esto. Ninguno lo es porque así haya querido; de hecho, es todo lo contrario. Veras, cuando alguien produce música, escribe o actúa; solo para llamar la atención, nunca llegan a nada. Pero aquellas personas que no lo hacen para que los miren, sino para ellos mismos; son los que voltean a ver. Porque para ellos su arte, es como el amor. Solo necesitan eso, y lo seguirán amando incluso en los momentos más oscuros. Y aunque nadie los viera, seguirían haciéndolo. Una pasión es algo más grande que un simple dar y recibir. Es más que los aplausos, las palabras de aliento. Es algo, salido de lo más profundo de tu alma, de tu ser; algo que te defina, y tratar de plasmarlo, representarlo. La pasión es la representación de tu alma en su estado más puro.
—¿Todos tienen pasiones? —le preguntó Luz inclinando un poco la cabeza.
—No todos —respondió Licanod.
—¿Por qué?
—Muchos de ellos mueren, manchados por tabús —respondió el hombre.
