Mi marimacho ♡Jeriban Au♡

Casi es Navidad

Los días pasaron entre risas y faltaban pocos para que llegará Navidad, el día estaba algo frío a ser el atardecer pero eso no impedía que todos se bañaran en la playa o que Jericho caminara por la orilla junto a avaricia.

Guila noto ese extraño comportamiento, le tiro agua a ban quien le miro contento listo para atacar.
-Ban, Jericho. -Apuntó a la chica.

- Si ¿Qué pasa con ella?

-Juega con ella, parece deprimida. Si algo sale mal o ves que necesita apoyo has me señales, te estaré viendo.

-Ok...? - Ban salió del agua sin entender el porque le enviaban a él, pero guila lo había hecho conociendo los sentimientos de ambos. El peliblanco tomo una toalla, se secó y luego corrió para alcanzar a la mujer que caminaba algo lento conpardo a avaricia.-¿Jericho?

-¿Hu? ¿Qué pasa? -La chica le miro y luego miro la arena donde caminaba otra ves. Ban se ubicó a la derecha de ella y vio a avaricia correr hacía unas gaviotas.

Ella se veía extraña mente deprimida, estaban en vacaciones, no debería estar así.

-¿Qué te sucede? ¿Te sientes mal?

-Físicamente no. -No le miro, sólo miraba sus pies caminar en la arena junto al atardecer.

-¿Qué tan lejos de nosotros piensas ir?

-No mucho.

-... ¿Es gustaf? -Jericho apartó la vista de la arena y miro a atardecer- Y eso es un si; no te pongas así, tu hermano es un buen tipo que cuido de ti a pesar de ser tan insoportable.

Trato de hacerla reír y funcionó, un golpecito en su codo y una pequeña risa fue soltada por ella.

-Eres un Tonto consolando a alguien. No es por eso que estoy así...

-¿Entonces?

-... Vamos a un clima nevado, en ese clima me crié con gustaf y pues... es muy nostálgico. Él había dicho que me enseñaria a patinar bajo hielo de verdad la próxima ves que fuéramos... supongo que no se podrá. -La chica paró para ver el atardecer.- ¿Porque tiene que ser así? -y soltó una lágrima con una sonrisa.

Ella estaba muy melancólica, a ban sólo se le ocurrió decir aquéllo.

-Bueno, El dolor y el placer se entremezclan, y No hay razón por que. Eso me lo enseñó gustaf.

-Es verdad, supongo que sólo tengo que aguantarlo.

-O hacerlo placentero. -Puso una mano en su cabeza para revólver los cabellos de la chica- Trata de disfrutarlo, aunque duela.

-Es verdad... -Sus ojos brillaron al ver el hermoso atardecer. Miro a ban quien hacía lo mismo- Ban...

-¿hu? -Le miro el pecado.

-¿Puedo abrazarte...? -Dijo mirando a otro lado con un gran sonrojo.

-¡Claro que Si! -Los pecados miraron al lugar buscando a sus amigos y se encantaron con una bonita escena de Ban abrazando con fuerza a Jericho mientras está hacía de tsundere.

Por la noche todos se reunieron para charlar.

-Sate, sate, sate. pecados, estamos aquí reunidos para casar a ban con Jericho -Bromeó melodías.

-¿eh? -Jericho estaba roja.

-Jaja a lo que vinimos capitán -Dijo ban con un ligero sonrojo.

-Ya puedes besar a la novia -Seguio burlando el rubio.

-¡En ningún momento dije que aceptó! -Dijeron los burlados a la ves.

-¡Ya aceptaron! ¡empiecen con la luna de miel! -Burló Merlín.

Después de terminar de burlarlos se decidieron a hablar del otro tema.

-Bien pecados, he estado pensado que sería buena idea hacer regalos de Navidad a todos jugando amigo secreto.

-Claro, ¿porque no? -Dijo king quien ahora tenia el tobillo menos hinchado.

-Bien, también pensé que después de año nuevo podríamos ir al clima nevado que la otra mitad propuso.

-¡Me gusta la idea! -Dijo Verónica.- Quiero tirarle bolas de nieve a todos.

-Wey no -Gil se acordó de cuando Verónica metía bolas de nieve en sus pantalones cuando eran niños. Se abrazó temblando y Verónica se rió sádicamente.

-Bien entonces, empezamos con la preparación de papeles. -Dijo tomando una bolsa con papeles que tenían sus nombres- Margaret.

La chica sacó un papel de la bolsa.

-Diane -Miro a la chica y se sonrieron.

Siguieron por turnos y a Jericho le tocó Verónica.

-Yo supongo que entre marimachas se entenderán y se regalaran lo mismo -Dijo ban haciendo molestar a Jericho.

-Si digo, mira como se sientan. -Apoyo Guila mirando a Verónica que estaba con ambas piernas arriba de la silla mostrando toda la licra debajo de su falda.

Y Jericho no se escapaba, ella tenia un short pero tenía las piernas tan abiertas.

-Callense los dos, yo me siento como me de la gana -Respondió Verónica.

-Eso -Apoyo Jericho quien había tirado a ban de la silla.

-Tonta marimacho. -Dijo en el piso.

-¿Porque ahora me dices así?

-Porque eso eres y nos agradaba mucho así -Dijo levantándose y los demás le apoyaron.

Esta sería su primera Navidad sin gustaf pero parecería que no estaría completamente sola después de todo. Sonrió muy feliz.

-¿¡Quién quiere cantar karaoke!?

-¡Yo!

Continuará.