Las Consecuencias Del Gimnasio | NoNosCortes | YAOI Yeisaúl

Capitulo 19

Yeisson se posicionó. «Plop»... de nuevo la puntita estaba adentro, pero no estaba tan apretado como la primera vez. Saúl se mantuvo en silencio aferrándose al asiento.

—Relájate putita —le dijo Yeisson mientras con la mano sobre la cabeza de Saúl lo mantenía quieto contra el asiento—, ya perdimos mucho tempo con tus pendejadas, ahora vas a tener que reponerlo.

—Te dije que no me digas así— quiso protestar pero de nuevo fue sometido.

—Ah no. No me importa. Ora te callas el pinche hocico.

— No... relájate... aaah —pero no le quedó más remedio porque Yeisson comenzó a ahogarlo en el colchón del asiento.

Yeisson estaba sudando como nunca. Le metió la verga de golpe y gruñía como una bestia. Los huevos chocaban contra los de Saúl una y otra vez.

—Eso es... ¡eres y serás mi putita para siempre! —le gritaba Yeisson mientras se quitaba el sudor de la frente y con las manos lo embarraba en la cara de Saúl— te voy a preñar todas las veces que yo quiera, ¿me oíste?

—Aaah... Yeisson... aaah... mmm... no mames, es muy grande... aaah.

El ritmo de Yeisson comenzó a acelerar y sonaba como un rápido aplauso. «Plop, plop, plop, plop», sin cesar. Las embestidas eran potentes y Saúl tuvo que agarrase bien para que su cara no chocara contra la puerta del carro. Pero luego pasó del dolor al placer y quiso disfrutar también de aquel momento, así que comenzó a moverse hacia adelante y atrás, recordando la voz de Yeisson contando las repeticiones. Yeisson se dio cuenta y detuvo sus embestidas para dejar que Saúl se la metiera solito.

—Siii... aaah... así me gusta... ya aprendiste —le decía mientras le daba nalgadas—, mmm... vas a hacer que me venga... ¿quieres que te preñe putita?

—Aaah... siii, préñame.

—¿Vas a querer que te eche mis hijos?

—Soy tu putita... siii... quiero un hijo tuyo.

Yeisson escuchó aquello y no pudo evitar venirse dentro de Saúl: —Aaah... hijo de puta... aaah... —y los chorros de leche caliente inundaron sus intestinos. Saúl sintió que incluso le había llegado al estómago, fueron cinco chorros abundantes hasta que Yeisson acabó y se dejó caer sobre Saúl totalmente exhausto.

Luego Saúl se movió un poco para dejar que Yeisson se recueste a su lado. Y mientras se besaban, Yeisson comenzó a jálale la verga que estaba a punto de reventar.

—Saca tu leche bebé, dáselo a papi —Saúl eyaculó sobre su mano y lo embarró en la cara de Yeisson. Luego se besaron y compartieron sus fluidos. Yeisson escupía en la boca de Saúl y viceversa. Luego Yeisson abrió una de las ventanas porque casi perdían el conocimiento sin oxígeno. Se volvió hacia su primo y se dieron un beso largo y apasionado. Yeisson acariciaba los pezones de Saúl mientras jugaban a los espadazos con sus vergas.

—¿Vas a querer recalentado? —le preguntó Yeisson y su verga comenzó a ganar poder otra vez.

—¿Tan rápido?

—No sabes en lo que te metiste —le amenazó su primo— por algo cambio de novia muy seguido, porque no aguantan.

—¿Y yo?, ¿crees que aguante?

—Tenemos que probar

Saúl se puso en cuatro y Yeisson cerró la ventana.

Volvieron a la acción.

Era ya el medio día, y una señora se dio cuenta: un carro con las ventanillas cerradas junto a la vieja fábrica. Se decía que había fantasmas por el lugar. Y cuando el carro comenzó a moverse con fuerza, la señora se persignó y siguió su camino en silencio. Fin.

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Mis historias YAOI, están causando mucho revuelo, en la mente, vida, sueños, inocencia e ingenuidad de muchas personas. Dicen que son muy perturbadoras. Pásate a leerlos.

Sé, que te van a encantar. 

Te ha escrito Franky, y te deseo, una larga vida en el YAOI.