Padre De Un Asesino

Capítulo 4.

Era mi jefe, y detras de el venian Patrick Dimitri y Carlos. Traían cerveza, más comida y regalos para Dante.

Luego de que se acomodaran cerre la puerta con llave,
-Hola pequeño, soy Dimitri, soy un buen amigo de tu padre, mucho gusto en conocerte- le dijo Dimitri acercandose mucho, por la cara que Dante había puesto estoy seguro que se habia sorprendido y asustado a la vez. Dimitri era una persona gigantesca , alguien con quien no querrías pelearte en un bar de las afueras de la ciudad, aunque lo haya conocido de buen humor todavía tenía una aura amenazante, en si, es alguien bastante misterioso, solo sabemos que tiene 29 años, tiene una hija y vive en uno de los barrios donde los rusos dominan las calles.
Dante lo saludó, de manera nerviosa, pero lo hizo.
-Oye Dimitri, aléjate un poco del niño, no ves que verte tan cerca asusta!?- dijo Carlos en tono burlón.
-Hola pequeño, soy Carlos, un compañero de trabajo de tu padre-, con el se lo vio más calmado, a comparación con Dimitri, Carlos no asustaba en absoluto. -Que tal si comemos?- Sugirió el jefe.
Era una noche distinta a las demás. La casa estaba limpia, se escuchaban carcajadas y se veía movimiento. Quien diría que esas pequeñeces podrían hacer feliz a un hombre solitario.
Después de una cena bastante entretenida Dante subió a dormir, el jefe y los demás se quedaron bebiendo conmigo.
-Bien caballeros, yo debo irme ya, fue un gusto conocer a tu hijo, mantenlo alejado de tu trabajo, no quieres que algo le pase- sugirió el jefe,
-Es cierto amigo, mis hijos no tienen idea de que trabajo- Acoto Carlos.
-Lo complicado de tener una segunda vida es mantenerla alejada de la primera- dijo al aire Dimitri mientras daba una calada a su cigarrillo.
-Hare lo que pueda para que no sepa quién soy realmente-. Era diferente ahora, tenía algo que perder, volvía a tener a alguien que me esperara después del trabajo.
-Bien señoritas, ya que nos divertimos y el jefe se fue es hora de ayudar al primerizo con la educación de su hijo- Dijo Patrick. -Toma imbecil, te ayudaremos a llenarla, solamente pregunta lo que no entiendas-.
En ese momento me había entregado una fotocopia de inscripción a la secundaria "Ragnarok". Una de las instituciones de élite de la zona, al graduarte de ahí conseguiría una oferta de trabajo básicamente por hora.
-El director es amigo mío, y le pedí de favor que si podría inscribir a tu hijo y accedió a cambio de un favor.-
No pregunte cuál era ese favor, simplemente le agradecí por lo que había hecho.
-Mañana nuestras mujeres compraran lo que tu hijo necesite para la secundaria- comento Carlos.
-Y mi hijo dijo que lo ayudara con lo que no entienda, pero si tu hijo intenta  algo con ella, ambos están muertos- Acoto Dimitri.
-Muchas gracias a todos, esto de ser padre es interesante, pero bastante difícil..- Conteste desviando la vista hacia un rincón del cuarto.
-Oye, no te preocupes, todos fuimos novatos alguna vez- dijo Patrick poniendo su mano en mi hombro.
No entendía como personas que rompían huesos, quemaban cadáveres y asesinaban personas podían ser tan diferentes al hablar de sus hijos. No parecían las personas que conocía.  Ni siquiera yo parecía la misma persona..