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Nota: *Este capítulo está escrito de hace mucho así que la nota de más abajo está editada jaja, oigan se que pausé el fanfic porque estuve enfocada en otras cosas pero ahora pienso terminarlo para ya no tener que abandonarlo, si estas leyendo esto y aun no te has ido, (si eres de esos 10 votantes) en serio gracias por la paciencia y espero te siga gustando la historia❤️

¡Gracias por esos 500 votosssss!

Se acerca el final uwu*

Antes de empezar el cap os quiero agradecer por los 3k de lecturas y los 500 votos!! La verdad es que estoy muy sorprendida, cuando empecé a escribir el fanfic no creía que llegaría ni a los 100 leídas ahora peor 100 o 500 votos!!😂
Sois maravillosos/as gente🥰

¡Gracias!

( Psdt: intentaré actualizar más seguido.)

Ahora si, a leer 👁👄👁🍿🥤

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* Narrador omnisciente *

—¿Estas bien? —había preguntado Bia entendiéndole una mano a la castaña. Ella acepto con poca desconfianza y se levantó mirándolos con fastidio.

—Si —respondió secamente.

—¿Porque huías? —preguntó Manuel sin importarle poca cosa las palabras de Mara. Ella maldijo en su fuero interno buscando alguna mentirilla para engañarlos.

—Bueno, prácticamente no estaba huyendo, solo.. Iba a mi casa —mintió, tratando de sonar lo más natural posible.

—Bien.. —interrumpió Bia tratando de calmar el ambiente ya que, su novio al lado estaba con expresión de enfado. —, Mara, ¿crees que tengas tiempo?

—¿Para que? —preguntó algo molesta, suspirando acepto —Bien, si, huía, pero no de ustedes si es lo que pensáis.

—¿Y entonces de quien? —preguntó el muchacho cruzándose de brazos y enarcando una ceja.

—No es de su incumbencia—contraatacó Mara.

La brisa de la ciudad empezaba a ser más fuerte haciendo que los tres se abrazasen a si mismos y el cabello os levantase dejándolos despeinados. Las chicas, más que nada, tuvieron que quitárselo de la cara.

—Bueno, se de algo que si es de nuestra incumbencia —Manuel empezaba a perder la paciencia, Bia suspiro a su lado.

—Vale ya, vamos a hablar tranquilos, por favor —dijo mirando a Manuel algo fastidiada.

—Pues que hable ya. —le contestó el.

Los tres fueron hacia unas banquillas en la cual sólo Mara se sentó.

—Y bueno — comenzó Manuel haciendo un gesto con su mano cediéndole el puesto para hablar a su novia.

—No pienso retrasarme, Mara ¿Tu enviaste esas fotos y cartas a nuestros padres informándoles sobre nuestra relación? —preguntó la chica.

«mierda» pensó Mara — No —contestó lo más tranquila que podía sonar.

—¿Como que no? Eres la única que podría haberlo hecho —acusó Manuel.

—¡Que no lo hice!

—¿Y como estaría yo tan seguro de eso? ¿O de que no estás mintiendo?

—Porque no lo hago, yo solo ayude.. —se calló de inmediato.

—¿Ayudaste a que? —preguntó Bia.

—Nada, ya les dije, yo no fui y es la verdad.

—Mientes.

Mara sabía que ella tenía algo que ver con eso, pero joder, no podía decirlo, ella no quería perder a sus amigos, por mas que sentía ciertos sentimientos hacia Manuel, ella los retenía solo para no perder a su amigo. — Lo siento, no puedo deciros—dijo bajando la mirada.

—¿¡Como que no!? Entonces si fuiste.

—No, claro que no solo... Hice una promesa y.. no quiero romp-perla —terminó diciendo a la vez que se escuchaba un trueno y el rayo parpadeó en el cielo alumbrando por completo con su luz violeta.

—Mierda —murmuró Manuel al sentir las gotas de lluvia caer.

—Mara.. yo.. quiero creerte pero si no nos dices quien fue no tenemos otra elección —dijo suavemente Bia.

Mara lo pensó un momento y luego asintió con la cabeza lentamente temiendo de lo que pudiera suceder.

—Es bien, os diré.

Los tres chicos caminaros hasta quedar completamente a salvo de la lluvia y ofreciéndole el único asiento seco a Mara.

—Puedes hablar ya.

—Bueno verán. Un día estaba tan.. celosa de tu y tu relación con Bia porque si, quizás me gustabas un poco y.. Tenía miedo a perder tu amistad y aunque con esto la regué. Pido perdón, y si tuve algo que ver pero no lo tomen a mal. Estaba tan mal que hablé sin pensar.

>> Me tope con tu madre a la salida del centro comercial y me ofreció tomar un café, obviamente acepte y así los pusimos a conversar. Ella toco el tema tuyo y que creía que yo era lo mejor para ti, lo que tú necesitabas, entonces nombre a Bia y ella dijo que no le agradaba su relación, que sentía mala vibra de ella, entonces empecé a hablar más y tú mamá con curiosidad me preguntó algunas cosas las cuales por claramente tristeza mencione.

>>Ella al saber dijo que necesitaba irse, su cambio de humor fue tan rápido pero luego me llamo, después de unos días, para decir que necesitaba mi ayuda. Ella quería que les sacara unas fotos a ustedes dos juntos. Y que escribiera una nota, dos de hecho, y pues no sabía lo que planeaba así que las hice, luego me enteré sobre lo de sus padres y de verdad estoy muy arrepentida en el fondo se que hacen buena pareja y no era mi intención lastimarlos.

Bia y Manuel apenas y podían procesar lo que la castaña les contaba. Lo que si pasó fue los sentimientos de Manuel revolviéndose por completo. Al final todo tenía conexión, su madre los quería separar.

"¿Por qué lo hizo?" - Se preguntó el castaño.

Pestañeó rápidamente sintiendo que sus lágrimas saldrían pero no podía, o al menos no ahí, para el no valía la pena. O eso quería hacerse creer.

—Yo.. me tengo que ir. ¿Crees que podría ir tu sola a casa? —se dirigió a su novia.

Bia asintió con una no sonrisa feliz y luego, acto seguido, el castaño salió —casi corrió— de ahí hasta su casa.

El no podía creer lo de su madre, y eso literalmente, le había roto el corazón.

Do you still love me? [binuel] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora