Esta es la prestigiada Universidad Fairy Tail, ¿linda, no?
Aunque el nombre suene raro, es una de las Universidades con mayor demanda en el continente asiático, ¿y por qué no también mundialmente reconocida? Pese al renombre que se le da no es una...
— Y eso dijo... — Susurra con voz perdida tirado en su cama boca arriba con el cuello fuera de la cama mientras sus ojos observan el techo totalmente carentes de brillo, incluso se dio cuenta que hay una mancha de pintura celeste en su techo. ¿Llegó allí el día que estaba lanzando las latas de aerosol?
Cuando no obtuvo ninguna respuesta volteó su cabeza al que se supone es su mejor amigo, la persona que le acompañó desde que ambos andaban en pañales, aquel con quien aprendió a decir groserías, con quien fue a la escuela primaria, secundaria y preparatoria siendo su compañero todos esos años incluso de pupitre, quien se peleó con unos niños porque cuando estaban en sexto grado era incluso tan bajo como las chicas de su salón, el que le enseñó a tocar el bajo, la persona con quien descubrió el significado de pornografía, también quien lo apoyó en su primera decepción amorosa, es la misma persona que está ignorándolo por completo con los audífonos puestos y escribiendo algo en su cuaderno.
— ¡No me ignores afeminado!
La cabeza de Natsu da un efecto rebote cuando Gray decide lanzarle un borrador en la frente. Este grita adolorido y se quita los audífonos quejándose por el dolor producido de la ira bruta de Gray. — ¡¿Qué quieres que te diga?! ¡¿Tú crees que yo no estoy jodido?! ¡¿Me ves quejándome?! ¡No! ¡Yo acepto mi maldito destino con los brazos abiertos para llorar en mi almohada lo que queda del semestre!
Gray abre sus ojos ante las palabras de Natsu. Se sienta de manera correcta en su cama para observar a su amigo de la infancia. — ¿Qué sucedió? — Cuestiona con una ceja alzada.
Natsu comienza a llorar volviéndose pequeño recordando lo que sucedió en su última clase de las dos hasta las cinco de la tarde. Natsu se había mentalizado a que Gray lo iba a abandonar porque su clase terminaba casi a las cuatro y tenía que ir a ver al gerente del Museo Nacional de Tokio (lo suficientemente importante como para no enojarse con Gray por obligarlo a subirse al bus y casi morir en el intento pasando pena). Durante esa clase de composición, el rector Hwang entró a su salón interrumpiendo la clase, lo señaló sin descaro alguno diciendo su nombre completo con una frase que marcaría el inicio de su purgatorio de nuevo: "Nijimura Natsu-kun, estas seleccionado para el nuevo grupo proyecto. Nos vemos el lunes." Natsu sabe lo jodido que está en este momento, ¿lo escucharon quejándose?
¡NO!
¡El asumió su papel como un macho! O bueno, eso hasta que comenzó a contarle sus desgracias a Gray. — Sabía que estaban planeando como ganar dinero a base de nuestras expensas. — Murmura Gray volviéndose a acostar en su cama.
— ¿Tendrás tiempo de ir el viernes, sábado y domingo a ensayo? — Cuestiona Natsu quitando por completo su aura deprimente.
— Sí... mis pasantías solo ocupan cuatro horas durante tres días de mi vida. Sigo teniendo los domingos totalmente libre para ensayar y dedicarme a mis tareas. No te preocupes.
Natsu asiente con la cabeza y se acerca a Gray extendiéndole los audífonos. — Romeo me pasó la pista con su parte y la de Gajeel, he agregado algunas letras nuevas. Sólo faltaría que tú y yo pusiésemos nuestras partes. Quiero presentar esta canción en el festival de primavera de la universidad.
— Tú siempre quieres destacar, ¿no? — Sonríe con un toque de arrogancia Gray mientras se coloca los audífonos. Natsu le da al botoncito de inicio de la canción mientras le pasa el cuaderno de rallones y tachones a Gray, pero después de tanto tiempo conociéndose él sabe lo que dice y puede entenderlo a la perfección.
El sonido de la batería llama la atención de Gray y finalmente es totalmente enganchado con solo tres segundos de canción.
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