Habían pasado ya el resto de febrero y había comenzado a correr marzo desde que Olivia había llegado, exactamente 22 días de marzo. Nikki, la madre de Tom había sido la más dulce de entre todos, no diciendo exactamente que los demás fueran groseros, no lo eran, en lo absoluto. Sin embargo, pareció que Nikki estaba especialmente contenta por tener a otra mujer en casa. Tener siete hombres viviendo en su casa debía ser agotador, cualquiera podría impaginarlo, ella no sufría tanto aquel impacto con Hardin, tal vez por el hecho de que su hermano dejaba que le hiciera lo que ella quisiera desde que tiene memoria.
La compañía de Nikki era como el de una madre propia, sin llegar precisamente a serlo, ella poco sabía de su madre o la de Hardin, ella amaba a su padre, pero conocía su reputación a la perfección, uno de los playboys más conocidos de todo Hollywood. «Tal vez por eso quiero a Jacob, siempre buscas que tu pareja se parezca a tu padre», pensó y en la cantidad de veces que incluso había visto tiktoks, aunque en estos se referían exactamente en aspecto físico.
Había escuchado mucho cotilleo sobre su padre incluso en los estudios en los que ella estaba grabando, era una falta de respeto, por supuesto. ¿A la gente le importaba? Por supuesto que no, sólo la observaban y de vez en cuando trataban de esconder una sonrisa burlóna; Olivia cuando veía aquello se enfrentaba y defendía a su padre. No solo por ser su padre y querer que la reputación, en casos de ambos, fuese dejada intacta, sino, que lo hacía porque no conocían a su padre. Tal vez era el playboy del que hablaban los medios, que tenía dos hijos posiblemente de distintas mujeres, pero lo que no contaban o sabían era que Felix Falcone siempre estuvo a la altura de ser un padre excepcional sin ayuda de nadie. A Hardin y a ella nunca les falto amor, apoyo o alimento, además de que sabían que contaban con él para cualquier cosa que ellos desearán, no por nada su hermano mayor había logrado ser quien era y ella estaba construyendo, poco a poco, su camino a la cima.
Conocía a una potencia extrema el amor de un padre, pero el materno no lo conocía. Cuando era pequeña siempre se imagino en los brazos de una hermosa mujer siendo abrazada mientras le decía "Mamá" o jugando con ella al té, que en aquellos tiempos Hardin se había encargado de suplantar. Ella no culpaba a su madre, que no conocía, ni siquiera pensaba mal de ella, la amaba a pesar de nunca haberla visto. Olivia sabía que hay veces que se tienen que hacer sacrificios, y no le importaba en lo absoluto lo que había ocurrido y el que ella terminara sola con su padre y hermanos, por bien del destino, había terminado en una buena familia.
Sabía que el aprecio de Nikki, no llegaría a tal extremo, pero todo lo que la mujer emanaba era maternal y fue casi una aventura para Olivia ir descubriéndolo de a poco. Había momentos en los que la mujer decía "Es una lástima que no podamos salir, porque verdaderamente me encantaría ir de compras contigo", Tom de vez en cuando que escuchaba que su madre decía cosas por el estilo abrazaba a la rubia y decía que no permitiría que se la robara, su madre por supuesto reía y se alejaba dejando a "los tórtolos", como ella solía llamarlos, solos con una sonrisa dulce.
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ADORE YOU|| T.H
Fanfiction"Voy a ganar, solo observen". SOCIAL MEDIA ft REAL LIFE. Olivia Falcone x Tom Holland.