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A pesar de que era muy tarde en la noche pero muy temprano en la mañana, se quedaron hablando, platicando algunas anécdotas de cuando estuvieron en grabaciones de sus trabajos respectivamente.
Al rededor de las 10:00 am, el castaño dejó de contestar los mensajes. Olivia supuso que tenía cosas que hacer. Preparar maletas, preparar pasaporte, todo para su viaje por lo cual no le dio gran importancia. Aprovechó dicho tiempo para prepararse algo sencillo de desayunar. O al menos algo que sabía que no iba a arruinar.
Salió de su habitación bajando las escaleras dirigiéndose a su cocina con su mascota pisándole los talones.
Una vez en la cocina la rubia se preparó hotcakes, no tardo mucho, era poco de lo que sabía prepararse, usualmente era Hardin el que se encargaba de cocinar. Tampoco era muy bueno, pero en definitiva mejor que ella.
Cuando hubo limpiado la cocina subió y reviso la hora. Estaban por dar las 11:00 am lo cual solo le dejaba una hora para arreglarse y que Tom pasara a recogerla.
Se dio una ducha rápida y al salir se puso algo sencillo: jeans, camiseta blanca, chamarra de mezclilla y joyería para que no luciera tan simple. Quería tener un aspecto natural por lo que sólo se puso un poco de rímel en las pestañas, finalmente cepillando su cabello. Su pequeño bolso channel color negro estaba sobre su tocador el cual tomó antes de bajar a la sala a esperar al muchacho, ya se acercaba la hora.
Mirando "Euphoria" que casualmente se encontraba en la programación de la televisión se quedó mirando esperando. Si bien una parte de ella odiaba a Jacob por todo lo que había hecho y seguía haciendo, había otra la cual simplemente lo extrañaba. Tal vez se trataba de simple cotidianidad, cada tercer fin de semana el australiano viajaba a verla a Inglaterra y se quedaban juntos. Salían a pasear y después regresaban a casa mayormente esperando que Hardin no estuviera... por supuesto no era el caso. Siempre que Jacob venia, Hardin siempre tenía tiempo libre para estar en casa.
Verlo actuar como Nate Jacobs por un instante le recordó a cómo estaba actuando en aquel momento. Muy posesivo y violento. E incluso con aquellas horribles cualidades había una parte de ella que aún lo quería. A pesar de tales circunstancias.
No se dio cuenta que tan rápido había pasado volando el tiempo, sino, hasta que el timbre llamando su atención.
Apagó el televisor poniéndose de pie con su bolso en la mano abrió la puerta encontrándose a un joven de baja estatura, sonrisa resplandeciente, completamente arreglado y con un ramo de flores.
—¿Esas son?
—Peonias—dijo con una enorme sonrisa.
—¿Como sabias que...?—las palabras quedaron al aire.
—Zendaya—dijeron al mismo tiempo riendo.
—Bueno, ¿estas lista?
—¿Cómo me veo?
—Hermosa.
—¡No! Debías responder lista—rió y tomó la mano del muchacho—. Vamos—dijo tomando con su mano libre las llaves de su casa y salió con él—. ¿El parque?
—Si, estaba pensando llevarte al "parque Holland". Me gusta mucho caminar por ahí. Es realmente hermoso. Lo prometo. Si no te gusta podemos ir a otro lugar.
—No te preocupes por ello, esta perfecto. Vamos.
Comenzaron a caminar, sin soltar sus manos, delimitaron a jugar con los dedos del otro riendo sin tener que hablar. Estaban cómodos. Era de aquellos silencios que podían relamen no decir nada pero te hacían sentir cómoda.
Cuando llegaron al parque, Olivia vio la gran cantidad de flores que había, así como fuentes. Cuando Tom dijo que era un hermoso lugar, no mintió. Era impresionante.
—¿Quieres que hablemos o prefieres que nos quedemos así?
—Honestamente, como tú quieras. Estoy incluso cómodo contigo en los silencios.
—¿Medio poeta?—bromeó la rubia.
—Ya casi saco el título—siguió la broma—. Entonces...—arrastró las palabras haciendo que la chica se detuviera y lo mirara—. Ya sé que se supone que ya somos algo así como novio y novia porque lo dije. Y tú lo dijiste también. Pero... no nos conocemos fuera de... lo que vemos en las noticias, redes sociales y todo eso. Pero yo realmente quiero esto. Quiero decir, me gustas, mucho. Incluso cuando salías con el pie grande.
—Hey—dijo la rubia riendo.
—Lo que quiero decir—dijo riendo también—, es que quiwro hacer las cosas bien. Tardé en conseguir que Zendaya me dijera tus flores. Por alguna razón no sé quería meter en "nuestro noviazgo", pero lo hice porque realmente quería darte algo bonito. Te traje aquí, a mi parque favorito, no solo por compartir nombre con él—dijo causando una sonrisa dulce en la rubia—, sino porque realmente quería sacar algo cursi sobre belleza de flores y sobre ti pero honestamente soy muy malo con improvisaciones románticas. ¿Sabes? Me hacen... bueno, me ponerme un poco nervioso. Tu me pones nervioso. ¡En el buen sentido! Y pues todo eso de los programas de las mariposas en el estómago y...—Olivia no le dejó terminar y junto sus labios con los de él silenciándolo por completo.
No había hecho aquello como parte del juego, simple te el escucharlo hablar y decir todas esas cosas le habían hecho reaccionar así. Sus manos a los costados de la cara del chico acariciaban con su pulgar. Fue un beso corto, pero que Olivia sintió con más emociones que cualquier otro que tuvo incluso en los dos años de relación con Jacob.
—Me adelantare todo lo demás—sonrió—. ¿Quieres ser mi novia oficial?
—Creo que ya lo éramos—dijo con una sonrisa separándose volviendo a unir sus manos caminando por el hermoso parque.
—¿Te gustaría ir a mi casa? No vivo lejos de aquí. Más tarde te regresaré a la tuya. Lo prometo—la rubia asintió.
