28|La petición

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— ¿Qué demonios está haciendo ella aquí? —Pregunta mi amiga, quien no deja de caminar de un lado a otro por la habitación. Después de abrir la puerta la dejamos pasar, quien se encuentra sentada en la sala esperando por mí.

—No lo sé, no tengo ni idea de cómo llegó aquí.

— ¿Alex mencionó que regreso al país, cierto? —Asentí— Tal vez fue él quien le dio tu dirección.

— ¿Por qué haría eso? No tiene sentido, Nick no habla conmigo, ¿cuál era la necesidad de mandar esta chica hasta aquí?

—Tal vez es uno de esos millonarios retorcidos y quiere hacerte la vida imposible.

—Tiene sentido. —Le digo recordando todos los encuentros que tuve con Alex hasta ahora— No podemos dejarla sola.

—Ella quiere hablar contigo. —Alega Chloe— Ve, estaré escuchando detrás de la puerta.

Me armé de valor, si es que es posible, y salí a enfrentarla. Me sentía incomoda, todo esto era incómodo. ¿Qué hacia ella aquí? ¿Qué es lo que quiere de mí? Ella seguía sentada en uno de los sillones, sus ojos viajando por toda la sala hasta detenerse en los míos.

—Savannah, ¿no? —Pregunto al tomar asiento, ya sabía quién era ella, no había duda pero no tenía ni idea de cómo empezar la conversación.

—Si.

— ¿Quieres algo de tomar? Tengo té frio.

—Si, por favor. —se veía nerviosa, asustada, tal vez más que yo. Era obvio que ambas nos sentíamos incomodas. Me paré del asiento y fui a la cocina y serví dos vasos de té frio con hielo, al volver le entregué uno. —Gracias.

Asentí.

—No quiero parecer grosera pero, ¿qué haces aquí?

Savannah me da una sonrisa triste antes de responder. —Quería hablar contigo en persona. —La miré confundida— Acerca de Nicholas y Alexander.

—Ah.

—Sé que Alexander te contó la historia y también sé que te pidió que dejaras a Nicholas. Estuvo muy mal de su parte, le dije que no se entrometiera. La verdad es que me he estado quedando con él desde que volví, vine a escondidas de mis padres, imagino que ya sabes por qué.

—Alex me contó.

—Emma, escucha. —Savannah deja el vaso en la mesa de café y toma mi mano, me quedo pasmada sin saber cómo reaccionar— Sé que no soy quien para pedírtelo pero por favor, regrésame a Nicholas.

¿Que?

—Sé que es una petición descarada pero desde que lo conocí he estado enamorada de él y sé que él siente lo mismo, tenemos una conexión. Supe lo devastado que ha estado desde que nos separamos y realmente quiero que reconstruyamos nuestra relación.

—Yo... no entiendo. ¿Por qué vienes a mi casa a pedírmelo? ¿Alex te mandó? ¿Él te dio mi dirección?

— ¡No! Alexander no tiene nada que ver. Estuve ahí, cuando fuiste a su apartamento yo estaba ahí. Vi lo que te hizo y vine a disculparme por él, no es cierto lo que dijo, él nunca contrató a alguien para seguirte, todo este tiempo fui yo.

— ¿Fuiste tú quien tomó esa foto? —refiriéndome a la de Ben y yo.

— ¡No! Nunca haría algo tan bajo como eso. Es cierto que te seguí aquel día pero es porque quería verte otra vez, de hecho iba a hablar contigo pero me acobardé. Es que nunca imaginé desde la vez que te vi serias tú la novia de Nicholas, pensé que era demasiada casualidad.

Novia Por ContratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora