Estiro su brazo lo suficiente para agarrar el trozo de cristal afilado. Lo arrastró ocultandolo debajo de la palma hasta debajo de sus pechos. Cuando la giro con una rapidez que ni ella ni se imaginaba que podría alcanzar, le incrusto el trozo en el ojo varias veces. La sangre salpico su rostro incluso la dejó ciega. El hombre la seguía golpeando por eso Aela optó por rajar le el cuello. Todo lo hizo con los ojos cerrados, no le agradaba la idea de asesinar a alguien.
Cuando el chico calló al suelo con ambas manos en la garganta. La princesa empapa de sangre se incorporó. Impactada observo como lentamente su prometido se ahogaba en su propia sangre, vio como luchaba por sobrevivir. Tanta violencia la hizo vomitar por el suelo. El olor, lo espeso que resbalaba aquel líquido por su rostro y por su barbilla. No podía soportarlo era repugnante.
Había acabado con una vida humana, había acabado con una vida humana en milésima de segundos, milésimas ¿Como podíamos morir tan rápido? No tenía tiempo para pensar tenía que huir.
Se secó los restos del vómito con la manga del vestido nuevo. Estaba la parte superior manchada, e incluso la camisa interior estaba manchada. La sangre había traspasado la ropa con la misma facilidad que un puñal traspasaba la carne humana. Se quitó el vestido con rapidez y entre lágrimas.
—Lo siento, lo siento. — no paraba de decir, ahogada en sus propias lágrimas.
Se quedó solo con la corta camisa interior y con unos pantalones hasta la rodilla. Respiro hondo mordiendose las uñas y se miró las manos temblorosas llenas de las evidencias de un criminal.
—Dios mío perdoname por lo que he hecho. Dios mío ayudame para escapar de mi castigo. — no se atrevió a entretenerse a limpiarse o buscar ropa limpia. Sobre todo por que ya no tenía tiempo.
—¡DIOS MÍO! — chillo la Criada horrorizada al ver el cadáver había entrado en la habitación.
Aela se agachó a coger otro fragmento de cristal y apuntar con el a la mujer.
—Apartate.— dijo con miedo y temblorosa.
Ella no dudo en taparse los ojos y apartarse.
La rubia con manchas rojas en el cabello decidió coger una túnica que había enganchado en un clavo e irse con la rapidez de un águila al volar. En el exterior hacia frío, tampoco podía resistir las bajas temperaturas, estaba con ropas ligeras, por no decir en ropa interior.
Corrió y corrió, cuando salió de la fortaleza las campanas sonaron, ya había corrido la voz. Sus pies desnudos se enterraban en el frío hielo, ella sintió dolor y punzadas en él. No quería mirar atrás. No quería mirar nada. Solo quería cerrar los ojos y despertar de esta pesadilla.
(FIN)
[MUY BIEN JUGADOR HAS SOBREVIVIDO AL PRIMER CAPITULO. NOS VEREMOS DE NUEVO CON ESTA CHICA ALBOROTADORA EN OTRO CAPITULO MÁS ADELANTE, UN SALUDO]
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El creador de mundos / Libro interactivo/
Dla nastolatkówEl creador de mundos es un libro interactivo, donde según las decisiones que tomes la historia de tu personaje e incluso su personalidad ira variando en cada capitulo. Contamos con 4 protagonistas que conviven en un mundo de fantasía medieval, en a...