Capítulo 4 (JIMIN POV)

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Tras mi pequeña aventura en eldespacho del jefe había vuelto a mi mesa alborotado como un adolescente y me había pasado un par de horas ligeramente más distraído de lo normal pensando en cada gesto, cada palabra que habíamos intercambiado.

-Voy a tomar algo caliente, tengo las manos congeladas-dije levantándome y cerrando la carpeta en la que estaba trabajando en el proceso. Tae se levantó detrás de mi e imitó mi gesto.

-Mañana es viernes por fin-dijo apoyándose con desgana en la máquina de café mientras los dos mirábamos caer atentamente el líquido marrón en el vaso.

-Si, menuda primera semanita eh-susurré para que nadie me escuchase.

-Y que lo digas, deberíamos salir a celebrar, me ha dicho que han abierto un nuevo pub en el centro de Itaewon que deberíamos probar-sugirió él.

-Uff, Itaewon, demasiada gente ¿no crees? -conteste cansinamente mientras sacaba mi vaso de té humeante

-Vamos Jimin, es el mejor lugar para desconectar, gente de todo tipo y hombres guapos por todas partes-dijo señalando el aire como si lo visualizase.

Hice una mueca de incredulidad ante lo intenso que podía ser a veces mi mejor amigo, pero reí con él.

-Ya veremos-dije con la idea de persuadirlo para salir a un sitio más tranquilo.

Al día siguiente sobre la una de la madrugada del sábado Tae y yo pululábamos por Itaewon buscando el pub al que mi amigo quería ir.

-Estás seguro de que no quieres ir a otro sitio-pregunté en la puerta cuando estábamos a punto de entrar. Él me miró frunciendo el ceño. -Perdón-murmuré evitando reír por su expresión.

Cuando conseguimos cruzar la puerta y acceder al local un sin fin de luces de neón nos cegó y la música atronadora nos dejó sordos.

-Vamos a la barra-grito mi amigo dándose la vuelta para buscarme. Yo solo asentí y nos abrimos paso a codazos entre la gente que bailaba.

A los costados de la pista había un montón de mesas y la gente se apelotonaba por conseguir una.

-Que vais a tomar-preguntó el camarero un minuto después de que Tae y yo consiguiésemos tomar un sitio en la barra.

-Un Mojito por favor-pedí.

-Que sofisticado-dijo mi amigo burlonamente a mi lado.

-Gracias-contesté en el mismo tono. - ¿Tu que vas a tomar? -pregunté.

-Lo de siempre-rió -Tom Collins por favor-pidió volviéndose hacia el camarero que se marchó para preparar nuestros cócteles.

Nos pasamos un rato charlando y bebiendo en la barra y en un momento Tae se levantó de repente y se fue al baño dejándome allí plantado esperando a mi segunda bebida.

Divisé todo mi alrededor inspeccionando el lugar con interés hasta que un par de ojos puestos en mí desde el final de la barra me hicieron parar de mirar y centrarme en lo que estaba viendo. Increíble.

No había sitios en la ciudad, en el país y en el mundo que tenía que encontrármelo allí. Justo allí. Al principio Yoongi pareció tan sorprendido como yo de vernos allí pero luego se mordió el labio y levantó su copa como si brindase conmigo con una sonrisa que haría trizas al más beato.

-Joder-pensé en alto-Joder, joder, joder.

Maldije un par de veces y me giré tan rápido que me llevé por delante a Taehyung que estaba detrás mío. Ambos nos salpicamos con su bebida.

- ¿Estás bien? -gritó por encima de la música. Le acerqué un par de servilletas de un servilletero que encontré en la barra para secar su camisa salpicada por el líquido.

Bullets //YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora