Corea del Sur es el hogar de más de 51 millones de personas según la última prueba estadística del Banco Mundial, convirtiéndose así en un país por demás de poblado, no encabezando las listas mundiales, pero sigue representando un pequeño gran porcentaje de la población total del mundo.
En Seúl los rayos del sol era algo que no se podía apreciar muy a menudo, por lo regular la estrella más grande del sistema solar era cubierta por el tumulto de nubes grises que eran creadas por la contaminación. Casi nunca llovía, y cuando pasaba, las gotas de lluvia eran gruesas y calientes, para nada algo que quisieras presenciar al aire libre sin protección alguna.
—¿Huevo vegano? ¿Es en serio? —habló Mark sin poder despegar los ojos de la carta menú del restaurante.
—No pensé que este mundo fuera tan amplio —siguió Sicheng.
—Ser vegano es lo mejor del mundo —contestó Hyuck con una sonrisa.
—Donghyuck, tampoco es como que conozcamos otro estilo de vida —dijo el mayor de la mesa riendo—. Quiero una sartén vegana.
—Y yo un wrap de ensalada —siguió el hermano menor.
Mark y Sicheng se voltearon a ver con una mirada incrédula que hizo reír a los otros dos. La mesera que los atendía levantó la orden de los jóvenes, retirándose y regresando un tanto después.
La conversación de aquel almuerzo se basó principalmente en saber qué harían aquel día, Mark insistía en recorrer la ciudad en sus puntos más famosos y turísticos, logrando que los Moon conocieran lo que alguna vez llegaron a ver solo en fotografías antiguas por la red o el libros de historia, pero Sicheng no lograba acceder del todo. El hecho de saber que esa no era la principal razón por la que estaban allí con ellos, le hacía no estar tranquilo con la idea, quería que Yuta hiciera lo suyo y regresara a su época, pero para nada porque no le quisiera allí, más bien entendía perfectamente que los dos hermanos tenían un serio problema que resolver en el futuro. Sicheng ya se imaginaba lo mal que sería recibido en el laboratorio 127F.
Tenía miedo de no poder volver nunca más al futuro y tener que olvidarse de los Moon.
Yuta idealizó un nuevo plan, pidiendo ayuda y opiniones, aún sabiendo que quizá el único que podría ayudarlo en serio era el chino, pero aún así escuchó cada idea descabellada por parte de los dos menores.
El rubio de mechones azulados necesitaba adentrarse en un laboratio de pruebas patológicas, hacerse de una en específico y volver a su propio laboratorio.
—Cáncer —dijo—, quiero una prueba de cáncer, cualquier tipo puede ayudarme.
—No sé porqué pensé que irías a algo más allá —dijo Sicheng un tanto sorprendido—. Digo ¿qué no las enfermedades son totalmente curables ya?
—El cáncer sigue siendo un dolor de cabeza incluso en nuestra época —fue ahora Donghyuck el que adquirió un semblante serio.
—El desarrollo humano en laboratorios ayudó a que la tasa de muertes por enfermedades crónico degenerativas se reduciera significativamente, pasando de un 63% de las muertes totales a un simple 5% —continuó el mayor—. Aunque no sé si la palabra simple sea la correcta para este caso.
Mark decidió que jamás quería dedicarse al trabajo en el área de la salud, de la química farmacéutica o algo que le semejara. Yuta seguía explicando a grandes rasgos el porqué era mejor nacer desde un tubo de ensayo y cámaras frigoríficas a un útero calentito y con maduración completa.
Arrancar el problema desde raíz siempre ha sido la manera más eficaz de resolver cualquier situación, pero no siempre la más simple o posible. El desarrollo humano en laboratorios fue una investigación que empezó como algo imposible de realizar, con muy pocas expectativas o fondos gubernamentales para que su proceso fuera más rápido y eficaz, o incluso seguro. Pero después de décadas enteras dedicadas por diferentes laboratorios alrededor del mundo a este proceso, se pudo lograr el primer desarrollo con una gestación química exitosa. Aunque al principio la población no tenía confianza en esta nueva rama de la ciencia, al ver que los bebés procedentes de laboratorios resultaban con mejor salud y desempeño tanto educativo como laboral, las personas poco a poco iban viendo la verdadera ventaja del avance científico.
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Piso Catorce. ((yuwin))
Fanfiction-Sicheng ¿dónde has estado? -En el piso 14. -¿De qué hablas? Nuestro edificio solo tiene trece pisos. -Exactamente. Ambos hermanos se miraron, ninguno podía decir qué acababa de pasar. Sicheng sube al elevador de su edificio y sin querer viaja más d...