º·AMOR DE LUNA LLENA·º (Wyatt y tú)

°• CAP 6: SECRETOS•°

- Ok, la verdad no sé si tomarme eso como un piropo o como un insulto- Dije- Pero gracias, no estoy acostumbrada a que me digan linda- Dije bastante feliz.

- ¿Y eso? ¿No sabia que mentir para los humanos era bueno?- Aquello me hizo querer reír a más no poder, pero volvió el dolor de cabeza.

- Ahh!!- Grité sosteniendo mi cabeza.

- ¡Mik!- Gritó Wyatt preocupado, vi su cara de preocupación cuando grité, pero algo cambió, sus ojos se iluminaron al ver mi pelo completamente blanco, pude oír como aulló antes de que me desmallara.

WYATT

Cuando aullé la manada no tardó en llegar, a la mayoría se le iluminaron los ojos al ver en mis brazos a una chica con el pelo completamente blanco.

- ¿Qué ha ocurrido?- Preguntó Wynter.

- Lo mismo que ocurrió cuando la vimos por primera vez, dolor de cabeza y pelo blanco, solo que antes se le volvía a poner negro- Dije entre preocupado y emocionado.

- Hay que llevarla a la cueva, Warda sabrá que hacer- Dijo Willa.

Tal como dijo, cargué a Mikaela en mis brazos y fuimos a la cueva, si alguien sabía que ocurría esa era Warda.

MIKAELA

Estaba en un sitio oscuro pero agradable, la verdad es que no me importaba estar ahí, pero una luz azul tenue se hizo presente y por instinto la seguí.

Cuando abrí los ojos estaba en un lugar completamente desconocido para mi, lo que me hizo no gritar fue ver a la manada de Willa a mi alrededor con sus collares prendidos.

- ¿D... Donde estoy?- Dije a duras penas.

- Estás en la cueva de la manada- Dijo una mujer de avanzada edad.

- ¿Qué hago aquí?- Pregunté intentando incorporarme, ya que me encontraba tumbada en una gran mesa de piedra en el centro de una gran habitación de la cueva.

- Te desmayaste en medio del bosque y te trajimos aquí.

- ¿Y por qué no me llevaron a mi casa?- Pregunté.

- Por esto- Dijo entregándome un espejo, mi pelo estaba completamente blanco.

- ¿Que... Que demonios?- Dijo atónita.

- ¿Puedes enseñarnos tu collar?- Preguntó la mujer señalando a las cuerdas de cuero que asomaban por mi cuello.

- Cla... claro-

(PERDÓN SI LA FOTO NO SE VE BIEN PERO LA CÁMARA DE MI MÓVIL NO DA PARA MÁS) (QUE CONSTE QUE SÍ ES UNA PIEDRA DE LUNA AUTÉNTICA, NO UN PEDAZO DE PLÁSTICO COMO DICEN ALGUNOS)

- Es ¿Una piedra de luna?- Preguntó un lobo.

- ¿Desde hace cuando tienes esto?- Preguntó Warda.

- No lo recuerdo, siempre lo he tenido, además mis padres no me permitían quitármelo.

- ¿Crees que puede ser....?- Preguntó Willa.

- Hasta la luna llena no lo sabremos- Dijo Warda.

- ¿Alguien puede explicarme que diablos pasa?- Pregunté un poco confusa y enfadada.

- Lo siento querida, pero si es lo que creemos, no podemos contártelo aún, tú solo ve a casa- Dijo la anciana acariciando mi cabeza- Verás que todo se soluciona- Ok, debo reconocer que no entendí muy bien el qué quiso decir con eso, pero no le discutí, me incorporé y pregunté donde era la salida.

- Iré contigo, no queremos que te vuelvas a desmayar y menos en medio del bosque- Dijo Wyatt con una gran sonrisa.

El camino fue agradable, aunque ambos estuviéramos en silencio, hasta que él quiso romperlo.

- ¿Has pensado que le dirás a tus padres?- Ostias, se me había olvidado por completo ese pequeño detalle.

- Gracias por ponerme más nerviosa de lo que estoy- Dije sin tapujos.

- ¿Por qué estás nerviosa?- Dijo acercándose a mí.

- Para empezar por tu cercanía, en serio, espacio personal- Dije dándole un leve empuje, él solo rió.

- Ok ok, está claro que no se te pueden gastar bromas, siempre le quitas la diversión.

- ¿Te refieres a lo del "lobito" o tu intento que casi hace que en un futuro te quedes sin hijos-Él por un momento rió, hasta que entendió a lo que me refería y paró el andar.

- Te agradecería que no, gracias- Esta vez fui yo la que reí.

- Ok, esta es mi casa- Dije mientras me dirigía a la parte trasera.

- ¿No vas a entrar?- Preguntó.

- Claro que sí, solo que no por la puerta- Dije mientras empezaba a escalar el árbol con gran agilidad.

- Increíble- Dijo en susurro, aún así logré escucharlo.

- ¿No sabes escalar?- Pregunté.

- Niña curiosa, soy el mejor escalador de la manada, pero está claro que tú me ganas- Aquello me hizo reír, entré por la ventana y me asomé para despedirme.

- Ok será mejor que te vallas ya porque como mis padres vean a un lobo en su casa les va a dar algo- Ambos reímos por mi comentario- Adiós lobito- Cerré la ventana y me acosté en mi cama- Espero que este pelo no me dure mucho- Pensé- Aunque tampoco me queda mal- Reí por lo bajo al verme en el espejo hasta caer en los dulces brazos de Morfeo.

WYATT 

- ¿Lobito?- Pensé- Me gusta- Dije en susurro antes de ir de vuelta con la manada.

Cuando llegué vi que Willa y Warda estaban hablando algo precupadas.

- ¿Qué ocurre?- Pregunté, lobo curioso.

- ¿Recuerdas el collar de Mikaela?- Yo asentí- Creemos que puede ser real.

- Eso... no puede ser, si fuera real se transformaría en lobo- Reproché.

- Eso solo si fuera la Gran Alpha, no estamos seguros aún- Yo le di una mirada de "¿Estás de broma?"

- Ok chicos ya está bien, Wyatt aún no es del todo seguro, y tu Willa, deberíamos esperar a comprobarlo, ella mismo dijo que sus padres no le permitían quitárselo; sabes perfectamente que los lobos no pueden vivir más de unos días sin la piedra- Dijo mirándonos a los dos con la típica mirada con la cual una madre regañaba a sus hijos- Además, ¿Recordáis el metal que sostenía la piedra?- Ambos la miramos sin entender- Era plata, pero una modificada ya que cuando la toqué solo sentí un leve ardor- Cuando oí eso Willa y yo recordamos algo que nos dijeron cuando éramos cachorros.

- La plata anula los "poderes" de la piedra lunar- Dijimos ambos a la vez.

- Entonces si le pusiéramos a Mikaela el collar destinado a la Gran Alpha, y ella lo fuera ¿Se transformaría en lobo?- Pregunté.

- Si ella fuera la Gran Alpha, sí.

Aquello me emocionó, si ella era la Gran Alpha para empezar encontraríamos a la Gran Alpha y lograríamos salvar a la manada, y lo segundo... la verdad es que no lo sé, pero el saber que podré pasar más tiempo con ella me hacía sentir mejor.