Me dirigía a mi antigua casa después de haberle contado a la directora mi situación, por suerte se compadeció de mí y me permitió faltar unos días, cuando llegué aporreé la puerta como si tratara de echarla abajo.
- ¡Ya voy!- Oí al otro lado- Hola querida ¿Qué te trae por aquí?- Me preguntó la mujer.
- Sabe perfectamente qué hago- Dije mientras entraba- Y tanto usted como su marido me van a contar que coño pasa aquí.
- ¡Ese vocabulario no es aceptado en esta casa!- Dijo la mujer, a lo que yo le lancé una mirada asesina, pude ver en un espejo que había que mis ojos se habían vuelto amarillos.
- Lo siento- Cerré los ojos y respiré hondo, para cuando los abrí los volvía atener marrones.
- Bien querida, siéntate- Me indicó la mujer, ella fue a la cocina y cuando regresó e tendió un vaso de agua- Cuando te fuiste con la manada, tus padres nos vendieron la casa, nos dijeron que se iban a ir con tus abuelos a Cansas-
- No lo entiendo, ¿no se tardan meses en vender una casa?
- Tus padres ya nos habían propuesto esto desde que aparecieron esos lobos- Dijo la mujer, aquella información no me encajaba.
- ¿Cómo sabe usted, o ellos que me iba a ir con la manada?- Pregunté.
- Porque ellos ya sabían de todo esto- Dijo tendiéndome un sobre- Será mejor que lo leas con tu manada- Dijo con una agradable sonrisa.
- Gracias- Dije tomando el sobre.
Por el camino no podía parar de pensar en el contenido del sobre, ¿Por qué quería que lo leyera junto a mi manada?
Cuando llegué muchos lobos empezaron a darme el pésamen, me sorprende lo unidos que están entre sí, aunque no compartan sangre sí que son una familia.
- ¡Mik! ¿Estás mejor?- Me preguntaron Willa y Wynter al unísono, yo solo saqué la carta de mi bolsillo- ¿Y eso?- Preguntó Willa.
- La señora que vive ahora en mi antigua casa me la dio, me dijo que la leyera con la manada- Dije.
Willa y Wynter reunieron a la manada en círculo en una caverna que jamás había visto, la verdad es que era enorme.
- Bien lobos, como ya sabrán mis padres han muerto en un accidente de auto, pero siendo sincera no me lo creo, hoy he ido a mi antigua casa y me han dado este sobre, la mujer me dijo que lo leyera con la manada delante así que...- Dije sacando la carta del sobre.
"Querida Mikaela, siento mucho todo esto, pero deberás ser fuerte, si estás leyendo esta carta significa que tu padre y yo ya no estamos, por lo que deberás estar atenta, sé que tu manada te ayudará, por cierto, hay algo que debo contarte, puede que sea un poco difícil de asumir, pero intentaré que quede claro, hace 16 años tu padre y yo recibimos la peor noticia del mundo, tu padre era estéril así que no podíamos tener hijos, aquello nos afectó mucho pero la tristeza no nos duró mucho, un día recibimos la visita de una mujer, su pelo era blanco y sedoso, y al igual que tú o tu manada era una loba, al principio nos alarmamos pero ella nos tranquilizó, nos contó que estaba en peligro de muerte y al tener una hija no sabía que hacer, entonces supimos que ella estaba al tanto de nuestra situación con el tema de formar una familia, así que nos pidió que cuidáramos a su hija hasta que esta encontrara a la manada, entonces ella ya estaría a salvo, esa niña eres tú, mi preciosa Mikaela, cuando tu madre te dejó a nuestro cargo, supimos que nosotros también estaríamos en peligro, pero no nos importó, tal como le prometimos a tu madre te cuidamos como si fueras nuestra, y quiero pedirte perdón por las veces que no fuimos agradables contigo, pero debo reconocer que fuiste una niña bastante difícil, cuando cumpliste los cinco años, recordamos algo que nos dijo tu madre, si empezabas a toser de manera descontrolada, te daban ataques de ira muy fuertes o empezabas a tener hambre a todas horas significaba que estabas empezando a desarrollar tus cualidades, unas cualidades que tu madre nos hizo prometer ocultar, gracias al collar que usabas podías controlar tus instintos y a la vez no morirías por no usar piedra de luna, sé que estarás confundida, pero yo ya no puedo responder a nada más, pero hay alguien que sí, hay un collar en el sobre, cuando halla luna llena asegúrate que su luz la cubra entera, entonces todas tus dudas se responderán, te quiero mi niña, no lo olvides"
Tras leer esto muchos lobos se sorprendieron, mientras que otros se compadecieron de mi, seguí mirando la carta durante un rato, hasta que pude notar como una lágrima caía por mi mejilla.
- Mik mira- Ese era Wyatt, había cojido el sobre y me había mostrado una foto.
- Esa... ¿Es mi madre?- Pregunté secando mis ojos.
- Así es- Dijo Warda, quien acababa de coger la foto para verla- Fue nuestra última Alpha, hace más de medio siglo que desapareció.
- ¿Pero ustedes cuantos años tienen?- Pregunté sorprendida.
- Yo casi 500, pero para los humanos serían unos 62- Dijo Warda.
- ¿Y tú?- Pregunté a Wyatt con curiosidad.
- 187- Dijo tranquilo.
- ¿¡Cuantos!?- Aquello hizo que muchos lobos rieran ante mi respuesta.
- Tranquila, para los humanos tendría 17-
- Ok- Di un suspiro de alivio.
- ¿Sabes? Te pareces muchísimo a ella- Dijo Willa con una sonrisa, la verdad es que era una gran amiga.
- Pásame el sobre un momento- Le pedí a Wyatt que tenía el sobre, cuando me lo dió saqué una cadena de acero enrollada a una piedra lunar, pero esta era diferente, tenía un brillo amarillo en vez de azul, de pronto, toda la habitación se iluminó cegándonos a todos unos segundos, cuando volvimos a ver en el centro de la habitación había una especie de holograma.
- Hola cariño- Dijo el holograma, pude ver perfectamente como todos los lobos se arrodillaban, ahí fue cuando vi que la chica que representaba el holograma era...
- Ma... Mamá- Fue lo único que dije.
- Es increíble cuanto has crecido- Dijo con una sonrisa nostálgica.
- ¿Cómo...
- Tranquila, al ser el Alpha nuestro espíritu puede verse por medio de nuestra piedra lunar, es bastante práctico cuando quieres conocer a tus bisnietos- Dijo mientras reía.
- Hay tantas cosas que quiero preguntarte- Dije, reí un poco por la emoción, a la vez que las lágrimas caían por mis mejillas.
- Todo a su tiempo cariño, por ahora solo debes pedir tu deseo.
- ¿Deseo?- Pregunté.
- Toda Alpha puede pedir un deseo a sus ancestros, por muy loco que sea.
- ....- No sabía que pedir la verdad, pediría que encontráramos la piedra lunar, pero si ya teníamos una idea de donde puede estar, sería como malgastar un deseo- ¿Te importa si lo pienso?- Ella asintió.
- Cuando lo sepas, solo llámame y apareceré, te quiero mi niña, no lo olvides....
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º·AMOR DE LUNA LLENA·º (Wyatt y tú)
Kurt AdamHISTORIA INSPIRADA EN ZOMBIES 2 En un mundo en el que los humanos conviven con criaturas extrañas, humanos fusionados siglos atrás con animales, la mayoría no representan amenaza alguna, pero a los humanos, quienes recientemente aprenden a convivir...