La Uchiha Perdida - Tobirama Senju

14. Platicas incomodas

Faltaban pocas horas para que anocheciera y nos fuéramos a casa de los Senju, teníamos ya todo perfectamente listo, gracias al obsesivo de Madara.

No tenía muchas ganas de ir, bueno, más bien no quiero ver a Tobirama, me siento un poco mal por el golpe que le di, pero creo que él se lo busco.

Una parte de mí quería pedirle perdón, pero mi orgullo de Uchiha no me lo permite.

-¿En que tanto piensas, Hana-chan?- preguntó Madara.

-Nada.

-Sabes que puedes contármelo.

Si, contárselo y que se vuelva loco y comience a darme uno de sus sermones.

-No, olvídalo.

-Vamos Hana, ¿acaso no confías en mi?

-Bueno, solo te haré una pregunta- Madara asintió -Si tú estás algo arrepentido por algo que hiciste, ¿pedirías perdón? Sabiendo que eres muy orgulloso.

-Pues... si, si realmente estuviera muy arrepentido y esa persona es muy cercana a mi, si lo haría.

-¿Ya lo has hecho?- asintió -¿con quien?- sonrío.

-Con Hashirama, pasaron muchas cosas durante la guerra, de las cuales estaba muy arrepentido, además, Hashirama es alguien muy cercano e importante para mi, así que no dude en hacerlo.

Genial, creo que esto me ha confundido. Quiero hacerlo, pero a la vez no, no sé cómo reaccionará Tobirama.

-¿Por qué preguntas esto? ¿Qué fue lo que hiciste?

Mierda, no quería dar explicaciones.

-Solo... olvídalo ¿si?- hable con molestia.

-Vamos Hana, cuéntamelo, nadie más podrá ayudarte con esto- carajo, es verdad -yo no sé mucho, pero quiero ayudarte.

Quizá no sea tan malo decirle.

-Pues... yo... ayer discutí un poco con Tobirama.

-¿Que hacías con Tobirama?- interrumpió Madara.

Creo que después de todo si fue malo decirle.

-Haber, déjame terminar- asintió resignado-Bueno, el punto es que yo lo golpeé muy fuerte y pues le dejé un poco -demasiado, a decir verdad- morado la mejilla y el ojo derecho, creo que no debí hacer eso y estoy arrepentida de hacerle eso, quisiera pedirle perdón, pero mi orgullo no me lo permite y no sé qué hacer- hable rápido, un poco desesperada.

-Bueno, primero dime, ¿qué hacías con el?

-Agh, pues yo estaba entrenando con Kiba, después él llegó y me dijo que nos enfrentáramos, yo no quise hacerlo, pero él insistió, me desespere y lo golpee.

-Y... ¿por qué no quisiste hacerlo?

Vaya, de haber sabido que me haría todo un cuestionario, no hubiera dicho nada.

-Pues porque no.

-¿Y por eso lo golpeaste?- cuestionó.

-Es que no sabes lo desesperante que puede ser.

-¿Tobirama? No lo creo, el no es esa clase de personas.

-¿Entonces que clase de persona es?

Tener este tipo de pláticas con Madara es... raro.

-Bueno, es lo opuesto a Hashirama, casi como yo, incluso podría ser peor que yo- vaya, como si no lo hubiera notado antes -Bueno, aquí el punto es que, a ti te interesa Tobirama ¿no es así?