Lobo.

Dia 3 (Luna Creciente)

Sábado por la mañana, Logan está vez desperto temprano, cerca de las 7 a.m. tenia intención de preparar el desayuno para todos.

Acababa de ducharse y ponerse la ropa limpia que Charles le había lavado, vio a dicho hombre en su silla de ruedas yendo hacia la puerta trasera.

--¿Charles? Buenos días.

El castaño giró por su hombro para verlo sonriente. --Logan, hola...

--¿Adonde vas?

--Oh, iba al lago detrás de la casa. ¿Quieres venir?

El pelinegro se encogió de hombros, asintiendo. Ambos salen de casa, caminan un par de metros y ahí está el famoso lago en donde Peter lo ayudo.

--Aqui fue donde Peter me encontró medio muerto.-Confeso.

--¿De verdad?.-Xavier lo miró. --Peter realmente me sorprendió cuando te llevo a casa, sobretodo porque eras un hombre desnudo en su cama.-Ambos ríen recordando ese momento con pena. --Fue casi un milagro que él te encontrara ahí.

--Si.-Suspiro. --Su hijo fue de gran ayuda.-Lo miró agradecido.

--¿Me ayudas? Quiero bajar de la silla.

Logan asintió y lo tomó en brazos para dejarlo en el suelo a la orilla del lago.

--Gracias.-Se apoyó con sus manos en el suelo para acomodarse. --El invierno llegará muy pronto. Quiero aprovechar estos días no tan fríos para esto.

El hombre al lado suyo ve como se eleva el pantalón pants hasta las rodillas, se quita sus sandalias y empieza a introducir los pies con cuidado en el agua.

--¿No crees que es muy fría?

--Por supuesto, mis manos la sienten.-Dice con un leve humor negro, ante eso Logan desvia la mirada apenado de haber preguntado tal cosa. --Tal vez así sienta algo en mis piernas.

Logan queda callado, tratando de no sentir lástima, lo ve apenado.

--Fue un accidente de auto.-Frunce los labios.

--No tenías que contarme.

--Esta bien.-Charles lo acepta. Encogió los hombros, bajando la mirada. Masajea sus muslos, presionando a puño sus músculos.

--¿Cuantas veces haces esto?

--Un par de veces por semana.

Logan se sienta en la silla de ruedas. --¿Te ha funcionado?

--La verdad no. Nunca logro sentir nada.

El sol golpeaba los rostros de ambos, los árboles apenas lograban cubrir los rayos, pero aún así no daba suficiente calor, solo estaba fresca la mañana.

--¿Como te has sentido aquí, Logan?.-Usando la fuerza en sus brazos, saca una pierna y se recorre hacia atrás dejando solo su pie derecho en el agua.

Respira hondo el aire fresco del bosque, madera, pasto seco, todo entra en sus pulmones con gusto. Jadea. --La verdad, dude mucho si quedarme. Peter insistió porque dice que los lobos son peligrosos en el invierno.

--Oh si. Cada invierno están aquí. Parece más casa suya que de nosotros.-Sonrie. --¿No te dijo Peter que le teme a los lobos?

Logan queda nuevamente callado y niega con la cabeza. Charles le mira volviendo a afirmar lo que habia dicho.

--Si. No le digas que te conté pero... el invierno pasado, un lobo lo atacó. Lo mordió y le dejó una enorme cicatriz en su brazo izquierdo. En esta parte.-Señalo su propio brazo, la zona entre el codo y la muñeca en el interior del brazo.