A veces te odio (EdwardxJacob)

El día de la reconciliación

"Acabo de recordar que lo amo demasiado"

Jacob Black era un idiota, Jacob Black era un maldito infeliz, Jacob Black era un marica, Jacob Black era un traidor. 

Tuve que sostener mis manos juntas detrás de mi espalda y apretar los dientes cuando todas esas y más maldiciones escurrieron de la boca de Isabella, el dolor en sus ojos brillaba tan claro como el sol y no estaba llorando, pero si ella fuera un grado menos inteligente me hubiera golpeado en la cara por lo que paso.

—No lo amas, no realmente Edward. No se que clase de magia hizo él, pero no lo amas como me amas a mi—El error de mi silencio había provocad esto, pero realmente no quería quedarme a afrontar las consecuencias ¿Estaba mal que mientras la escuchaba quisiera más que nada correr de vuelta para asegurarme que Jacob estaba bien? —Lo que nosotros sentimos, lo que pasamos no fue solo de mi parte tu también estas enamorado de mi y eso que sientes sigue allí—Ella toco mi pecho con su dedo índice sobre mi corazón

Aleje sus manos lo más gentil que pude manteniéndola a distancia. Lamentaba profundamente haberla herido y haberla dejado en el medio de este desastre, pero más lamentaba que ahora que ella sabía sobre mi relación con Jacob me diera cuenta de lo mucho que me equivoque al elegir guardarle el secreto.

—No lo amaba—Dije sinceramente—No estaba enamorado de él, es más, estaba furioso con su terquedad y su decisión de que el destino decidió por ambos al ponernos en la misma pagina que la imprimación—Explique tranquilamente—pero te diré lo que le dije a él cuando tu y yo rompimos. Esa decisión no fue por su causa o por el lazo que él y yo podríamos llegar a compartir no importa si Jacob realmente piensa que es así. —Bella estaba negándose a escucharme, sacudía la cabeza y repetía una letanía de "no, no" agotadora. —Escúchame—Pedí.

—Tu no me diste elección—Ella casi grito—Te fuiste y me dejaste como si esa fuera la solución y cuando regresas terminas conmigo y meses después ¿Me entero de que estas en una relación con mi mejor amigo? —Si, nosotros sonábamos como los bastardos sin corazón que ella parecía pensar que éramos.

—Jacob me rogo decirte, él sabía mejor que yo y debí escucharlo—Bella se rio de mi, de nosotros, de algo inexplicable que le lastimaba y que no le daba muchas alternativas para reaccionar.

—¿Desde hace cuanto están juntos? —Ella pregunto.

—Poco antes de que nos encontraras en ese restaurante—Confesé—Jacob y yo pasamos tiempo juntos y nos volvimos cercanos. Un día me di cuenta de que él tenía razón y estaba negándome a lo inevitable por miedo a lo desconocido—Bella soltó mis manos caminando a la cama y acomodándose penosamente en el colchón—no había estado nunca con un hombre, jamás me lo había planteado siquiera, pero Jacob no es solo un hombre o un lobo él es... —Pensé en sus ojos brillando por alguna travesura, sus labios arruinados por los besos, el sonido de su corazón, el gesto que hacia cuando leía o se concentraba demasiado en su trabajo, sus manos siempre listas para sujetar las mías o la facilidad en que podía hacer que el mundo se viera dos veces más grande y hermoso. —Jacob lo es todo. —Era una verdad absoluta e irrevocable.

Estaba tan enamorado de ese joven lobo que a veces el sentimiento era aterrador. Odiaba lo necesitado que sonaba o lo suave que me volvía en su abrazo, detestaba la forma en que podía hacerme perder el sentido con ingeniosas maneras de besarme y odiaba por completo lo cursi que sonaba suspirando por su nombre cuando estábamos separados. Decir que lo odiaba era más fácil que decir que estaba enamorado más allá de toda explicación.

—Jamás hablaste así de mi—Bella dijo con la voz triste—Jamás tuviste esa expresión para mi incluso cuando me juraste amarme. Él es tu enemigo Edward ¿Cómo puedes decir que lo amas?, ¿Cómo puedes saber que es real y que no es alguna cosa mágica jugando en tu contra? —La desesperación de aferrarse a algo, lo que fuera, era clara.