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Dedos golpeando el teclado.
El ruido ocasional que hacía el micrófono, cuando una voz grababa ciertas melodías, las guardaba en la máquina y luego las mezclaba por completo.
Un bolígrafo, que hace algunos ruidos mientras escribe letras en una hoja de papel, y luego raspa ocasionalmente mientras borra algunas letras o palabras de las ideas.
Jeon Soyeon se recuesta, estirando sus músculos adoloridos mientras suspira, su dedo avanza poco a poco hacia una sola tecla en su teclado, lista para tocar la melodía y la guía de canciones por la que ha estado preocupada desde esta mañana.
Su dedo se detuvo sobre las teclas, revoloteando mientras escuchaba una serie de pitidos, lo que indicaba que se estaba abriendo el teclado de la puerta, levantó la ceja y se dio la vuelta, preguntándose quién sería el visitante no anunciado.
Soyeon abrió mucho los ojos y sonrió al ver los ojos familiares de la persona que entraba, reconociendo de inmediato a la persona a pesar de que tenía la boca cubierta por una mascarilla y un gorro sobre la cabeza, ya que tenía algunos plásticos de comida en las manos.
─¡Unnie!─ Soyeon gritó felizmente, mientras tomaba los plásticos de comida de la mayor, quien se rió y le dio unas palmaditas en la cabeza, luego se sentó en el sofá, se quitó el gorro y lo puso a su lado, secándose un poco de sudor con un pañuelo que Soyeon le dio.
─Traje algo de comida para la trabajadora productora de mi equipo, Capitán. La dama en el área de recepción dijo que ni siquiera te había visto salir de tu estudio desde que llegaste aquí esta mañana. ─ Dijo Cho Miyeon, la famosa artista de Xion Entertainment, también donde Soyeon trabaja como productora, a cargo de producir nuevas canciones para que las cante Miyeon.
Las dos habían estado trabajando juntas desde la escuela secundaria, con Miyeon siempre presente en las mezclas de Soyeon, que también es la razón por la que las dos trabajan en la misma compañía.
Miyeon se rió entre dientes mientras observaba a su mejor amiga comer como una chica, limpiando ocasionalmente el desastre que había hecho con un poco de salsa tteokbokki, riéndose mientras Soyeon a veces respiraba con dificultad debido al picante.
─Entonces… ─ comenzó Soyeon, mientras Miyeon se giraba para mirarla, riéndose de que la chica ya había terminado la comida, mientras levantaba una ceja, esperando lo que diría. ─Mi hermana mayor está de regreso en la ciudad─. Dijo Soyeon, mientras Miyeon se desconcertaba por un momento, pero decidió reírse, reclinándose, relajada.
─¿Y entonces?─ preguntó Miyeon, mientras Soyeon suspiraba, rascándose la nuca con nerviosismo, temerosa de ver la reacción de Miyeon.
