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─¡Yah, no me dijiste que tenías un ex novio!─ Miyeon dijo, mientras se preparaban para salir, Soyeon convocó una reunión antes de eso y cambió el plan, las demás aceptaron la repentina misión de rescate.
─Estabas ocupada con capacitaciones de otras agencias y la escuela, así que no me molesté en decírtelo, unnie. Además, las otras personas solo nos veían como amigos muy cercanos.
─¿No tienes que bajar y prepararte con Minnie y Hoetaek?─ Yuqi dijo, Miyeon sonrió y asintió, saliendo del dormitorio y entrando a la sala de estar, Yuqi suspiró y le dio palmaditas en la cabeza, sonriendo.
─¿Por qué?─ preguntó Soyeon, Yuqi se rió entre dientes, sacudiendo la cabeza y acostándose, mientras Soyeon sonreía y se iba a su lado.
─Es una buena elección que Minnie salga mañana en lugar de ti, Soyeon. Si perdemos una líder, sería difícil para nosotras organizarnos─. Yuqi dijo mientras Soyeon asentía, sonriéndole.
─Si no te importa, descansaré primero─. Dijo Soyeon, besando la mejilla de la chica, volteándose hacia el otro lado y tratando de conciliar el sueño.
Mientras tanto, Chan estaba en la azotea, mirando el cielo nocturno, sonriendo mientras las lágrimas caían de sus ojos, las venas comenzaban a ennegrecerse desde su cuello hacia arriba, la sangre salpicaba sus labios mientras tosía, su visión lentamente se volvía borrosa por las lágrimas y todas las cosas que le estaban pasando.
Solo quería ver la sonrisa de su mentora por última vez, ver su rostro, estar con ella mientras este mundo se acababa, y quería dejar este mundo con la seguridad de que ella estaba a salvo.
Después de todo, su Song Yuqi siempre fue la que lo salvó, cada vez que arruinaba ciertas cosas, y ahora lo había hecho.
La salvó de morir, aunque ella no lo sepa.
Había puesto un poco de su sangre y la sangre de Seo In-guk en un recipiente en la habitación que ella había reclamado para su uso médico, con la esperanza de poder verla cuando descubriera que su estudiante había fallecido a causa de la pandemia.
Suspiró mientras se subía una de las perneras del pantalón, revelando una herida por mordedura que había sido ocultada por vendajes y mucha cinta médica, una herida que recibió en el centro de convenciones dos días antes, después de haber arrastrado a otro no-muerto lejos de Yuqi que acabó mordiéndolo. Se le acabó el tiempo, tratando de encubrir su muerte inminente, tomando una sobredosis de antibióticos hasta que su cuerpo ya había desarrollado una inmunidad contra la droga, haciéndolo incapaz de resistir los efectos del virus dentro de su cuerpo.
A medida que sus ojos se volvían blancos lentamente, encontró una sonrisa en su rostro mientras miraba las estrellas de la noche, su rostro se ennegrecía lentamente con venas que estallaban debajo de su piel, hasta que tomó su último aliento, sus últimos fragmentos de vida goteando, mientras cerraba los ojos, desapareciendo bajo el pacífico cielo nocturno. En paz.
Chan abrió los ojos de nuevo, sus ojos completamente blancos con un tinte rojo por la sangre, mientras comenzaba a mostrar sus dientes, rechinando y gimiendo mientras sus ojos buscaban sangre, carne.
Chan se había ido y un monstruo lo reemplazó.
졸브
─Yah, ¿dónde está ese niño que Yuqi trajo aquí con ella?─ Hoetaek preguntó, sin tener idea de dónde estaba el menor, habiendo desaparecido de su vista desde que la segunda reunión repentina terminó antes.
─No sé. Las chicas están todas dormidas, ¿verdad? Entonces, ¿dónde podría estar?─ preguntó Minnie, levantando una ceja.
─Revisa el garaje Minnie; Revisaré la azotea. Grita si necesitas ayuda, ¿de acuerdo?─ Hoetaek dijo, trayendo una pistola por si acaso, mientras él y Minnie se separaban, tratando de averiguar a dónde había ido Chan.
Hoetaek suspiró mientras se arrastraba por las escaleras, temiendo por qué había elegido subir. Suspiró al abrir lentamente la puerta, asomándose para ver si el chico estaba afuera. Abrió mucho los ojos al verlo, pero no se sintió aliviado, en absoluto.
Observó los ojos inyectados en sangre del chico, la sangre cubría sus labios mientras gruñía y rechinaba los dientes cuando vio a Hoetaek, corriendo hacia él.
Hoetaek cerró la puerta a toda prisa, estampándose en la puerta mientras el chico se golpeaba y golpeaba contra la puerta, tratando de entrar.
─¡MINNIE! ¡MINNIE, VEN AQUÍ, RÁPIDO!─ Hoetaek gritó a todo pulmón, apretando los dientes, empujando completamente la puerta y bloqueándola solo con su cuerpo, manteniendo al chico afuera en la azotea.
Soyeon estaba teniendo una buena noche de sueño cuando escuchó el fuerte grito, despertándola inmediatamente mientras levantaba una ceja, preguntándose de dónde había venido el ruido. Se levantó, quitando lentamente el brazo de Yuqi sobre ella, reemplazándose con una almohada mientras se recogía el cabello y salía de sus dormitorios.
Se subió y, al ver el rostro angustiado de Hoetaek, abrió mucho los ojos.
─¡Soyeon, llama a tu hermana! ¡Yo… necesito algo de ayuda aquí, probablemente esté en el primer piso!─ Hoetaek gritó, frenético, ya que tenía dificultades para continuar atrancando la puerta, mientras Soyeon escuchaba arañazos y golpes al otro lado, como si algo quisiera entrar.
─¿Qué pasó, Hui? ¿Hay alguno de los muertos que haya subido?─ preguntó Soyeon, Hoetaek sacudió la cabeza.
─Es Chan… se convirtió.
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