El tercer hijo de Goku [Goku x Bulma]

Capítulo 6: ¿Cita?

—¿Hola? ¿Bulma?—contesté rápidamente tras oír su voz.

—¿Goku?—habló ella sorprendida—. No esperaba tu llamado a estas horas de la noche.

—¡Ah si!, lo siento Bulma—reí nervioso ya que en un inicio no tenía intenciones de llamarla—. Solo presioné una parte donde decía emergencia y te llamé por equivocación.

—Es decir... ¡¿que me llamas a estas horas de la noche solo porque te equivocaste?!—respondió con molestia—. ¡Tienes idea de la hora que es!.

—P-Perdona Bulma—tartamudeé inquieto ya que se había comenzado a enfadar conmigo—. Ni siquiera me dijiste como se utilizaba, solo presioné lo primero que apareció.

Bulma dejó de hablar un momento.

—¿Hola?—dije nuevamente revisando la pantalla del celular para ver si no había vuelto a presionar otra cosa por error.

—Tienes razón—afirmó ella con seguridad—. Todo ocurrió tan rápido que no tuve tiempo de enseñarte como se utilizaba.

—Lamento haberte llamado tan tarde—confesé con cierto de grado de culpabilidad.

—¿Cómo están las cosas con Milk?—dudó ella sorprendiéndome—. Parecía muy molesta cuando se fue.

Tras recordar las cosas que me dijo estando realmente enojada, me tensé y sobé mi cabeza sin con una sonrisa forzada.

—Bueno...

Antes de que pudiera continuar, Bulma intervino nuevamente.

—¡Ya sé!—exclamó con energía lo cual llamó mi atención—. ¿Te parece si nos encontramos en una parte del lago en las montañas?

—¿Eh?—rasqué mi cabeza confundido—. ¿Ahora?.

—¡Claro!—exclamó con motivación—. Así puedo explicarte como utilizar un teléfono celular.

Distancié el celular de mis oídos para pensar. Milk me había dicho que tenía prohibido ver a Bulma, si aceptaba se enojaría muchísimo. ¿Qué podía hacer?.

Observé el suelo golpeteándolo con la punta de mis botas una y otra vez ansioso mientras meditaba. Siempre obedecía a Milk en lo que me pidiera, supongo que no había nada de malo en escabullirme si ella no se lograba dar cuenta. Además, aprender a usar este aparato me ayudaría para ir a entrenar.

—¿Estás ahí Goku?—dijo Bulma una vez más a través del celular.

—¡De acuerdo Bulma!—contesté enérgico y con determinación—. En cuanto llegues me teletrasportaré a ese lugar.

—¡Genial!—habló de buen ánimo, parecía feliz con la idea de ayudarme—. Nos vemos dentro de una hora.

—¡De acuerdo!—grité no muy fuerte para que Milk no me oyera, de lo contrario era Saiyajin muerto— . E-Eh... Bulma.

—Dime, ¿qué ocurre?.

—¿Podrías tu finalizar la llamada?—toqué mi nuca y reí levemente—. No se como se hace eso.

—Nunca cambiarás Goku—rió ella para finalizar la conversación y la llamada.

Al percatarme de que la voz de Bulma no se oyó más por medio del aparato, animado y sonriente me levanté de un salto del sofá.

Para asegurarme de no tener problemas con Milk, de puntillas y en silencio me acerqué hasta la puerta de la habitación para verificar si es que estaba dormida. Abrí despacio y vi como dormía profundamente. Me devolví a la zona donde se encontraba el sofá y con impaciencia caminé de un lado al otro hasta que pudiera percibir la presencia de Bulma.