Horacio, Los Santos - Volkacio -

3》

Le doy un puñetazo en el pómulo derecho, Gustabo por la sorpresa y el golpe se hecha para atrás, pero acto seguido me lo devuelve, empezamos a pegarnos en la puerta de comisaría, salen dos comisario y otros dos agentes para separarnos.

Los dos comisarios son Volkov y Greco, Volkov ya sabe quienes somos, y lo que hacemos. Volkov avisa por radio al Intendente y él sale corriendo de su despacho ya que llega en pocos segundo. Los agentes y comisarios detuvieron la pelea, pero aún así pudimos hacernos daño. Gustabo tiene el pómulo rojo, ya puedo ver que se le está hinchando, y muy probablemente se le ponga morado, y el ojo lo tiene rojo. Yo tengo el labio partido, y una brecha en la frente ya que Gustabo me hizo tropezar y me di con la pared.

-¡Gilipollas, subnormales, mariconettis!- Dice, como no, el Intendente. -¡Llevenlos a mi despacho!

Volkov me agarra por el brazo y me va empujando hasta llegar al despacho, por otra parte quien lleva a Gustabo es Greco.

-¿Pero qué cojones hacéis? ¡gilipollas!

-¡Él me insultó!, veníamos a traerle más información y me ha empezado a insultar.

-¡Es que eres un blando!, tienes que cambiar.

-¡No pienso cambiar, que te hayas vuelto loco no es culpa mía! si aquí hay alguien que debe cambiar eres tu.

-¡¿Qué has dicho!?- Gustabo se levanta de la silla.

-¡Que estás loco!- me levanto yo también.

Gustabo me da un puñetazo, y como ya me lo esperaba mi acto reflejo fue darle otro aún más fuerte que el de la primera vez. Volkov nos separa y el Intendente nos vuelve a gritar

-¡Mariconettis!, venid conmigo.

El Intendente se levanta de la silla y junto a Volkov y Greco subimos al parking donde están las patrullas.

-¡Subid gilipollas!

Gustabo y yo subimos, Greco y Volkov empiezan a preguntar donde nos van a llevar, supongo que, conociendo ellos al Intendente sabrían lo que nos haría, supongo que lo que ellos piensan es que lo que nos haría sería mucho solo por una pelea.

-¡Conway no se los lleve! ¡¿Qué va a hacer?!- grita Greco pero el Intendente solo acelera ignorando a Greco.

El intendente nos lleva por carreteras muy largas y raras, llenas de baches. Llevamos varios minutos en este coche, calculo que uno cuarenta. Por mi cabeza sólo rondan las preguntas ¿a dónde nos lleva? ¿qué nos va a hacer?

Llegamos por fin al sitio que nos quería llevar Conway, era un descampado, y había como una especie de Granero. Bajamos del coche los tres y entramos en esa especie de granero.

- A ver gilipollas, ¿que han descubierto?

-¿todo esto es para decirle la información?- pregunta Gustabo.

-¡Claro capullo!¿qué querías, qué lo dijéramos delante de las cámaras?

- No se, pensé que nos iba a arrestar o algo así, nos asustó.- digo esta vez yo.

-Bueno, pues le dijimos a Segismundo que iríamos a atracar el banco con ellos, Segismundo confió en nosotros y nos contó todo el plan, con todos los detalles.

-¿Vais a robar el banco más importante de Los Santos?-pregunta Conway

-A ver, nuestro plan es dejarlos colgados, pero si usted nos dice lo contrario lo hacemos.-responde Gustabo.

- Si, infiltrense. Díganme el día y hora.

-Seria el jueves a las 20.00, ya estaremos dentro.

-Vale, recordad las reglas y pónganse una máscara.