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Un mes después...

Camila entró aún sin poder creerlo a la exacta réplica de su casa. Aquella que compartía con su difunta madre y casi olvidado padre, dejó sus maletas en el suelo y suspiró con lágrimas en sus ojos. Aquél tiempo lejos de su hogar le permitieron darse cuenta la falta que le hacía, lástima que ese no era el que ella recordaba. Casi moría cuando la directora le dijo al final de sus clases que su padre esperaba por ella. Pensó por supuesto que era una simple broma, pero al salir pudo verlo rígido frente a su vehículo de último modelo.

___ No es la de siempre pero traté de hacerla tal cual como estuvo la que compartíamos los tres desde que naciste. A tu madre no le hubiese gustado que cambiaran algo, al menos lo de la casa original pero ésta, es la réplica ___ informó. Pasó frente a ella y le indicó que podía subir hasta la que sería su habitación, Camila aún se hallaba en suma desconfianza, por ello con sumo cuidado se dirigió casi con sigilo hasta la que era su recámara.

Acarició lentamente las sábanas y se perdió en sus pensamientos, se perdió en Eloísa cayendo con cuidado en su verdadera cama mientras ella la besaba y jadeó al recordar cómo la tocaba. Tragó pesado y decidió detener la dirección de sus impuros recuerdos, dejó sus cosas allí para después bajar hasta la sala, lugar donde su padre se encontraba.

___ ¿Todo en orden hija?

Camila sonrió de lado y asintió, mintiendo. Como siempre.

___ Estaría mejor si finalmente puedes mirarme a los ojos sin odiarme, padre.

Alejandro apretó sus labios y levantó su mirada del suelo para perforar sus ojos con los suyos.

___ ¿Aún no me perdonas?

___ El pasado quedó atrás Camila. Ahora puedo disfrutar sin rencor mi presente y si te traje aquí, es porque quiero disfrutarlo con mi hija a mi lado___ aquellas palabras dejaron helada a la morena, sabía lo que venía después de aquél corto discurso y temió por dos segundos las siguientes palabras que seguramente soltaría.

Palabras que podrían marcar un antes y un después en su vida.

___ Eres toda una mujer y estoy orgulloso de todo lo que has logrado en el internado. Una de las mejores me comentó la directora, estoy feliz por ti y quisiera darte una noticia de manera personal, no por una carta como un vulgar amigo en vez de familia. Me casé hace tres meses hija___ aquello era lo que realmente temía escuchar.

___ ¿Tan rápido papá? Vaya, estoy muy feliz por ti...más aún que me sacaras de dónde estaba para compartir esto conmigo.

Quería decirle algo más, pero decidió callar. El pasado debía quedar pisado y traer a Eloísa estando ahora así con él, no era la mejor idea del mundo por más ofendida que se sintiera en esos momentos.

___ Gracias hija. Apartando todo eso, quisiera que habláramos sobre la culminación de tus estudios. Pensé que un colegio no sería adecuado debido a tu reciente encierro en un internado, por eso tuve la idea sobre la educación aquí en casa ¿te parece bien? ___ Camila lo miró como si tuviese problemas mentales y él río. ___ Se que de alguna manera el encierro no es lo tuyo Camila. Pero creo estarás más libre aquí que en el internado ¿no? Podrás salir y tus clases privadas serían solo algunos días de la semana.

Aquellas palabras la dejaron un poco más tranquila y sin poder refutar algo contra él. Decidió aceptar sin más remedio, lo que menos quería era discutir con su padre una vez más y él por venganza la enviara lejos de nuevo.

Unos tacones se acercaban de manera imponente hasta donde ambos se encontraban conversando. Camila levantó su mirada hasta la puerta que conectaba la cocina con la sala, de allí apareció una hermosa pelirroja que robó el poco aire que contenía.

___ ¡Louisa! Pensé que no estabas en casa mi amor___ su ceño no tardó en crearse cuando observó los nervios que tenía su padre mientras miraba fijamente a esa mujer que ahora estaba frente a ellos.

___ Me dijiste que irías por tu hija, no pude simplemente irme cuando desde hace semanas quería conocerla___ su voz aterciopelada, ronca, sensual y sumamente sexy la había golpeado fuertemente. Camila quedó gratamente aturdida por ella, pero trató de evitar que su padre lo notara.

___ ¡Perfecto! Amor, ella es Camila. Hija, te presento a Louisa, mi esposa___ saboreó dulcemente su nombre y tendió su mano algo temblorosa. La ojiverde la sujetó con firmeza y Camila sintió como la sangre se iba directo a sus mejillas, esa mujer logró ponerla sumamente nerviosa.

___ Un placer conocerte, Camila.

La morena asintió soltando rápidamente el agarre para no dejarse caer en las garras invisibles de ella.

___ El placer es mio. Louisa.

La puerta había sido tocada segundos después de que sus palabras habían sido completadas y la mujer fue hasta la puerta para abrirla como si tuviese años viviendo allí. Otra mujer aún más impactante había entrado en su casa y Camila se sintió desfallecer.

___ Hermana qué bueno verte. Pensé tardarías aún más en llegar, mira. ___ Louisa la dirigió a la sala y le sonrió ___Ella es Camila, la hija de Alejandro. Apenas llegó hoy.

La ojiverde sonrió hermosamente y tendió su mano hasta la morena, morena que tembló el doble al verla frente a ella.

___ Un gusto conocerte Camila, soy Lauren.

Camila creyó que aquella era una broma realmente cruel. Aquellas mujeres eran dos gotas de agua, la única diferencia era que una es pelirroja y la otra tenía el cabello negro.

___ Mucho gusto Lauren.

Sería su inminente fin si su padre notaba el gran interés que tenía por las hermanas Jauregui.

Engaños (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora