𝙴𝚕 𝚟𝚒𝚊𝚓𝚎 𝚎𝚜𝚙𝚒𝚛𝚒𝚝𝚞𝚊𝚕.

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Llevaba dos noches sin dormir bien, apunta de café negro en la mesa, al otro lado estaba Lesly, en la misma situación que yo.

Benditas tareas!

No se en que momento mis trabajos se acumularon, pero, una vez más estaba apurada haciéndolos.

-ABRIL! NECESITO DORMIR!.

-Lesly lo sé, pero, si no terminamos ahora no terminaremos nunca.

Lesly también tenía muchas más tareas que yo y las dos sabíamos cuál era la razón, Lesly era distraída y olvidadiza y siempre prefería salir que sentarse a terminar sus tareas.

La mayoría eran investigaciones, exposiciones y cuestionarios que llenar, ya que se acercaban las semanas de exámenes.

-Cuéntame algo, el café no está funcionando.

-Mm es raro, pero, extraño la relación rara que tenía con Jordan, pero, creo que lo que hice esta bien.

-Yo sigo pensando que eres una tonta, tú les gustas y el te gusta, cuál es el problema?.

-El problema es "Tiene novia".

-Buen punto, pero, si le pides que la deje, seguro y la deja para estar contigo.

-No, nunca haría eso.

-Yo creo que sí deberías, mi madre siempre me dice "Pelea por lo que quieres". 

Después de tres horas, terminé mis tareas, pero, Lesly me pidió ayuda para terminar con las suyas, aunque mi mano dolía, no me negué y serví más café a mi taza.

Era sábado, siete de la mañana, a esta hora todos dormían, descansaban muy felices en sus camas, mientras nosotras seguíamos clavadas en la mesa con muchos cuadernos y libros a nuestro alrededor.

-Te gané!

-Lo hiciste con mi ayuda.

Había bebido tanto café que ya ni sentía cansancio o sueño, pero aún así tenía que ir a la cama y descansar.

Un celular sonó.

Lesly y yo nos miramos, sin saber cual de los dos era.

-Es el tuyo. - dijo.

Me levanté y agarre mi teléfono.

-Si, lo es.

Era un mensaje del grupo de mis nuevos amigos, adivinen cuáles? Si, la familia del decano Keller, al parecer todos nos caímos bien, tanto que crearon un grupo para charlar.

-Abril, hoy vamos de visita a la casa de la  abuela, tienes que venir, le caerás bien. - escribió Lía.

-Si, por favor. - escribió Isabella.

-Hola, como están? Bien, yo también estoy bien, bien amanecida, chicos no puedo ir, lo siento.

-Cómo que no? Tu amiga la rubia también está invitada, por cierto traigan ropa deportiva porque vamos a pescar. - escribió Cris.

-No puedo ir así por así.

-No seas tonta, todos están de acuerdo en que vengas, eres divertida y nos caes bien, pasamos por ustedes a las 9am, tomalo como un fin de semana espiritual y de encontrarse con la naturaleza.

Dicho eso, todos se desconectaron y me dejaron con mi obligaciones.

-Lesly, agarra tu ropa cómoda porque nos invitaron a la casa de la abuela de los Keller, y no acepto un no por respuesta.

Huir y vivir Donde viven las historias. Descúbrelo ahora