04. Día uno.

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Pienso que es una ridiculez —espeto Jin, un poco enojado.

Ya, basta, Jin. No digas con eso. — reprendió Namjoon mirando su laptop, evitando que su mayor afecte aún más el ambiente desolado y alicaído.

¿Por qué no simplemente salimos? No es como si nos pudieran despedir a este punto. — propuso Jin, Jungkook le miró de reojo, pensando que su idea era descabella pero sin decirlo en voz alta. Al igual que Jin, querían mantenerse alejados de la conversación.

Yah, hyung. Si quiere puede ir al bar del hotel — Namjoon se contuvo de decirle que se callara—. O también puedes convencer a Sejin, para que te diga por cuarta vez que no.

Seokjin noto la acidez en su voz, y teniendo en cuenta lo delicado que estaban las auras del lugar, no le dio una buena mirada a su líder cuando giro por la puerta para ir a hacer lo que Seokjin tenía que hacer.

Jimin cayó con pesadez en el sofá que estaba en la habitación de Namjoon y Tae, su ánimo trabaja en levarse pero ver las caras largas de sus amigos luegos de pasar una mañana aburrida en las habitaciones le hacían muy díficil ser un rayito de sol, Hoseok no estaba en la sala, por lo menos no aún sabiendo que cruzaría la puerta en cualquier segundo al finalizar con su estiramiento matutino.

Acababan de almorzar, habían pedido platos especiales de un restaurante fino y aún así no se encontraban en el estado mental para ver televisión con energías. Jimin lo intentaba, le había hecho cosquillas a Jungkook, hablo con Taehyung diciendo lo guapo que se veía hasta complemento las nuevas letras de Namjoon que se encontraba inundado en su computadora. Soyoung les había ofrecido una partida de vídeo juegos junto con Dohyung y Bomgyun, los bailarines con quien siempre jugaban online, pero ni eso les ayudo a elevar el espíritu.

¿Deberíamos matar tiempo con un Vlive? Podemos hacer preguntas y respuestas. — sonrió Jimin haciendo su cuarto y último intento en la hora pasada.

Pero entonces Namjoon suspiró y negó con su cabeza al ver que nadie le respondió.

No creo que sea buena idea, Jimin, lo siento. — sabía que él no lo hacía por mal, pero realmente no había un aura apropiada para eso.

Jimin asintió hacía el y miro al menor con atención, esperando su respuesta. Aunque Jeon solo miraba el techo mientras descansaba su espalda en la cama.

— ¿Jungkook? — reitero el muchacho. Le parecía común ver al maknae mirando a la nada con atención, pero la manera en que su mirada se suavizaba le dio curiosidad.

Jeon finalmente reaccionó a su llamado y miro a Jimin solo unos segundos antes de abrir la boca.

— Chapotear. — pensó en voz alta.

Jimin miro a Namjoon por encima de su laptop, compartiendo facciones confundidas, preguntándose qué mierda había dicho. Pero antes de que el pudiese preguntar, Jungkook se irguió en la cama.

Ya se cómo se dice chapotear en inglés. — señaló como si fuera algo relevante en la conversación. Sin embargo, recordó la propuesta de Jimín y lo poco que le interesaba por los momentos hacer un live—. Y no, yo tampoco quiero hacer nada.

No era que no querían hacerlo, pero más allá de eso tenían por certeza que su energía era tan negativa y alicaída que no querían ser un live de mala calidad teniendo en cuenta que la mayoría de los fanáticos buscaban elocuencia y emoción. Jimín comprendió aquello, después de todo el sabía lo mal que les quería un vivo si tenían caras largas.

Pero el seguía insistiendo un poco.

No se desanimen, por favor. Apenas es nuestro segundo día aquí. — sonrió, pero nada de eso podía recibir de vuelta cuando Jungkook asintió ligeramente.

lo siento, no hablo chino  ||  btsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora