Amor Dulce / NightCross / Rocio15000

°1°

Si bien era cierto que la pareja de su mejor amigo tenía una cafetería bastante popular, nunca se dispuso a visitarla. Después de todo su hermano menor cocinaba increíblemente, no necesitaba pagar demás por un postre delicioso

Sintió que esa sensación cambiaba cuando Error lo invito a ir, ofreciéndose a pagar todo lo que comiera.

Ese día acepto sin chistar, por fin podría saber porque a la gente le encantaba el lugar. Y sin gastar ni un centavo.

Sonrió cuando ya estaban frente al lugar, se veía más vacío de lo normal, agradeció esto. Sabía que si ocacionaba algún conflicto el azabeche lo mataría por traerle mala fama al café de su novio.

Suspiró antes de pasar al lugar, Error permanecía con la cabeza baja, al conocerlo hace años sabía que estaba avergonzado, de seguro pensando que si actuaba con su pareja de forma melosa no lo dejaría de molestar, y era cierto.

Se sentaron frente al ventanal, cada uno en lo suyo, él se mantuvo en su lugar y cruzo los brazos, el frío era intenso en esa época del año.

Ambos alzaron la mirada al ver a el dueño del lugar llegar, Ink sonreía ruborizado, feliz de ver a su pareja luego de una semana.

-Ruru!- Exclamó el albino acercándose a el de lentes para besar su mejilla con cariño.

Error solo se escondió en su bufanda, devolviendo el beso y sonriendole a el pastelero.- Convencí a este amargado de venir...-

Nightmare rodo los ojos, era su forma de hablar, no había peleas por frases así.

-Hola, Nightmare. Me alegra que te hayas animado.-

La pesadilla sonrió altanera.- Vine porque tu novio pagá, de mi no sacarás un centavo.-

-Lo que pidan hoy será un regalo, no puedo dejar que mi novio y su mejor amigo paguen tanto.- dijo jugando con el pelo de Error, este se giro para besarlo.

-Gracias, Kiky.-

Sin dar más charla pidieron lo que querían, el albino se retiró al mostrador cuando terminó de anotar las cosas.

El celular de el de ropas negras empezó a sonar haciendolo levantarse y empezar a caminar hacia la salida, solo para hablar en un ambiente más privado con su hermano.

-Nightmare!- escucho a su amigo llamarlo, como casi había gritado se giro rápidamente algo alarmado.- No pises el suelo que es amarillo.-

Entrecerró los ojos y miro hacia abajo, viendo que en efecto, estaba pisando un pedazo de suelo amarillo pastel.

-Ok?...- dijo saltando al piso normal y evitando tocar esos lugares.

Eso lo descolocó un poco por el resto de la tarde.