¡Psicóloga adolescente! {En edición}

Creo que Jane salió del closet. PARTE UNO.

“Entonces… ¡tu cabello!” Dice Amber, alegremente, Llegando a mi lado, mientras sacaba mis cuadernos del casillero.

Yo sonrío y muevo mi cabello, tontamente, como Amanda.

“Te queda increíble” Dice asombrada.

“Er, ¿Gracias?” Digo, sin embargo, les estoy muy agradecida a Philip. Es  la primera vez es mucho tiempo en donde me siento verdaderamente bonita. TODOS, y cuando digo TODOS, es porque TODOS, han mirada mi cabello asombrados por el cambio y algunos incluso me han comentado que es lindo.

¡Sé que es lindo!

“No es que enserio, te ves increíble. Increíble en todas sus letras” Dice tocando mi cabeza, como si mi cabello fuera de oro o algo parecido, Le sonrió “TIENES que decirme a que peluquería fuiste” me apunta.

Oh, esto será bueno.

“De hecho, mi hermano Philip ahora está en la faceta de peluquería, y él hizo todo… esto” Apunto mi cabeza.

“De ninguna manera” Dice riendo, pensado que es broma.

“No estoy bromeando. Él lo hizo” Sonreí.

Se vuele seria “¿Me dejas ser novia de tu hermano?” Pregunta.

“¿Hablas en serio?” Pregunto.

“Si. Es más, iré a tu casa y él pensará que estaré allí por ti…pero estaré allí por él, Uf, será hilarante” Dice entusiasmada.

“Hey, no es por nada, pero estamos hablando de mi hermano y por más grano en el trasero que pueda ser, no quiero que sea otra de tus victimas” Dramatizo, honestamente “Creo que realmente eres su Crush, así como platónico o algo” Me elevo de hombros.

“¡Y eso me hace quererlo más!” dice, suspirando.

“Hablo en serio” Le digo, con los ojos entrecerrados y Amber asiente, seria.

Cierro mi casillero, para encontrarme con la cara sonriente de Nate, amigo de James, y James, frente a nosotras.

“Lindo corte” Dice Nate tocando una de mis californianas, nunca había hablado con Nate antes. NUNCA. EN LA VIDA.

“Gracias” Digo divertida.

James rodea los ojos, sonriendo y pasa una mano por los hombros de su amigo. “Birdie, ¿Puedo hablar contigo?” Pregunta.

Amber y Nate se miran de manera…Rara.

Me alejo de los chicos, rodando los ojos, y probablemente, ruborizada.

Estamos al costado contrario del pasillo de donde estábamos y james se pone frente a mí, aun recibiendo miradas de odio por chicas que piensan que fue infiel.