XVI. Herido

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Lara Malfoy

Estos colombianos caprichosos me ponían de mal humor.
Ya bastante tenía con mi tía interrumpiendo mi momento con Misha y ahora esto.
Si a eso le sumamos a Lorcan...
Dios, tenía el nivel de estrés por los cielos durante toda la semana.
Aún cabreada salgo con mi perro guardián de turno.
Si, Lorcan ha tenido que venir como escolta a la reunión.
Todo gracias a que necesitaban a mí hermano cuanto antes en casa.
Se había llevado a la tía Luna y a Mijaíl de paso.
¡¿Qué acaso todos se habían puesto de acuerdo para dejarme a solas con Lorcan?!
No habíamos avanzado ni cien metros en el auto cuando un cristal rozó mi brazo.
_¡Señorita!
¡Bum! ¡Bum!
El cuerpo de Lorcan se pone como escudo sobre el mío.
_agachate. No te muevas
_Lorcan, tengo que...
Una mueca de dolor se filtra en su rostro
_¿Estás bien?
Él asintió intentando no mostrar lo que siente.
_no te muevas, Lara.
_¿Que...?
¡Bum! ¡Bum! ¡Bum!
_esos cabrones quieren asegurarse de que estás muerta.
_esto no se va a quedar así.
_Lara...
_¿Traes un arma?
_la duda ofende
_bien, es hora de que conozcan de lo que es capaz esta rusa.
Mi chófer está agachado en la parte delantera del auto con su arma en mano.
_llama a los demás, Dolohov.
_si señorita.
Necesitaríamos refuerzos para acabar con estos tipos.
Mijaíl tenía mucho que explicar respecto a ellos.
Con sigilo salimos por la otra puerta del auto y empezó al diversión.
¡¿Creyeron que no sabía manejar un arma?!
No tenían ni la menor idea de dónde me había criado.

Lorcan Nott

No me gustaba nada lo que había visto.
Varios de los tipos que estaban en la reunión nos miraban burlones.
Sé que algo se traen entre manos.
Y estuve seguro en cuanto esa puñetera bala atravesó el vidrio.
Mi prioridad era proteger a Lara así que no me importó que ella no me quisiera cerca.
La cubrí con mi cuerpo.
_agachate. No te muevas
_Lorcan, tengo que...
En su intento de moverse me hizo apoyar con fuerza la mano en el asiento y sentí un pedazo de vidrio clavarse en mi palma derecha.
_¿Estás bien?
Notó el dolor en mi cara así que asentí intentado ignorar el ardor en mi mano.
_no te muevas, Lara.
_¿Que...?
¡Bum! ¡Bum! ¡Bum!
_esos cabrones quieren asegurarse de que estás muerta.
Buen intento.
_esto no se va a quedar así.
No me gusta ese tono
_Lara...
_¿Traes un arma?
_la duda ofende
Mi padre siempre nos ha exigido ir con al menos un revólver cargado a donde sea que fuéramos.
Eso era regla en casa.
_bien, es hora de que conozcan de lo que es capaz esta rusa.
Ella voltea a ver al chofer y aprovecho para quitarme el pedazo de vidrio de la mano.
Vaya tajo que me ha dejado.
_llama a los demás, Dolohov.
_si señorita.
Con el cuidado de no dar un paso en falso salimos por la otra puerta trasera.
Me rompo los bajos de la camisa y amarro mi mano para detener un poco la sangre.
Esto se va a poner bueno.
Hace tiempo que no tenía algo de acción.
Solo espero no estar tan oxidado en esto.
Con sigilo, mi prima se camufla entre los autos del estacionamiento y luego suelta un par de disparos que toman por sorpresa a los colombianos.
La buscan muy cerca de donde ella está así que decido despistarlos.
Yo también disparo en dirección del otro auto de su propiedad.
Los tipos empiezan a dispersarse.
Tengo que poner a salvo a Lara, pero estoy demasiado lejos.
Dolohov se une a mí posición.
_ve donde Lara...
_la señorita está cubierta por Rowle y McLaggen.
_bien, ¿Sabes cuántos son?
_diez. Contado al jefe.
Asiento y otra vez empiezo a moverme.
Suelto disparos en dirección de los otros tipos.
Camuflado entre los autos me muevo con rapidez.
Hasta que tengo a uno de los colombianos frente a mí.
Dispara y trato de esquivarlo rodado por encima del capó de uno de los autos.
Pego mi espalda a la puerta de este.
Vuelvo la cabeza para ver si aún sigue ahí y entonces siento un calor intenso cerca de la clavícula.
El hierro atraviesa mi piel.
_hurensohn (hijo de puta).
Me importa poco el dolor en la mano y en el pecho.
Empiezo a disparar como loco a todo lo que se me atraviesa.
Sería imposible no haberle dado a ninguno.
Veo un cuerpo caer y disparo en su dirección varias veces más hasta que me quedo sin municiones.
¡Maldita sea!
Tanteo en mi cuerpo buscando una nueva carga mientras me acerco a donde está el tipo este.
Está en medio de un charco de sangre y su arma aún está en su mano.
Se la quito y reviso si aún le quedan balas.
Por suerte está casi llena.
Estoy por levantarme cuando una mano se posa en mi hombro.
De inmediato golpeo a quien sea que esté detras de mí y le apunto.
Una suerte el solo apuntarle porque tengo a Lara tras de mí con una mueca de dolor.
_lo siento
Suelto su brazo de inmediato y veo el horror pintado en sus ojos.
_estas sangrando...
_estoy bien. No es nada
_vamonos de aquí, voy a curarte en casa.
_no es necesario que lo hagas, solo salgamos de aquí.
Subimos al auto en el que vino la escolta.
_¿Y los demás?
Pregunto cuando solo veo a Dolohov en el asiento del piloto.
_ellos limpiarán todo, además tienen que desaparecer los otros autos.
Su mirada es ansiosa.
_tranquila, estoy bien.
Tomo sus manos entre las mías.
Y entonces me mira ceñuda
_¿Que te paso en la mano? Esto está lleno de sangre.
Desenvuelve la tela de mi mano y ve la herida.
_vas a dejar que te cure, Lorcan
_no...
_quieras o no, lo haré.
Su rostro ceñudo me manda a callar.
A veces hasta se parece a mí madre con lo mandona que se pone.
_si mamá
Ruedo los ojos.
Y me gano un zape.
Ella ríe por lo bajo y yo no puedo evitar hacer lo mismo.
Su rostro sonriente se vuelve hacia mi y juro que puedo morir en paz.
Lo daría todo por ver una vez más esa sonrisa.

Russkaya Koroleva || Reina RusaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora