Un problema grande estaba tornándose en el mundo del cultivo más sin embargo tampoco en cada secta faltaban los inconvenientes, la tensión en las personas era cada vez más grande al ver pasearse a los soldados de la secta del sol, ellos tomaban lo que querían con prepotencias desde las hijas más hermosas de los más ricos hasta sus tierras si ellos deseaban si se negaban hasta sus vidas mismas las tomarían sin piedad.
Las grandes sectas solo trataban de no meterse en líos con ellos, y cedían muchas de las veces a muchos de sus pedidos, Wen Ruohan tenía el cultivo más poderoso conocido y su nivel de crueldad era inmedible.
Los problemas más evidentes causados de parte de los Wen fueron hacia dos de las sectas principales y nadie sabía el motivo realmente, la secta Gusu Lan Y la secta Yúnmeng Jiang a quienes los Wen habían matado a sus soldados de las fronteras, y dejado más que pruebas que habían sido ellos.
En este momento los líderes de esas dos sectas se encontraban juntos por los problemas a parte, madame Yu y el Líder Lan XiCheng se encontraban dentro discutiendo el tema de la agresión causada por los miembros Jiang a los Lan. Pero al encontrarse con un problema en común los dos líderes tratarían ese asunto en completa privacidad, nadie sabía de lo que allí acordarían.
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En una habitación un joven empezaba a despertar su cabeza se sentía mareada, al observar el alrededor empezó a recordar en la noche él se había desmayado frente a ese hombre, aun sentía esa vibración en el pecho, su garganta estaba seca porque parecía que sus entrañas habían sido revueltas, Jiang Cheng se preguntaba en donde estaban sus soldados y por qué él estaba siendo dejado en esa habitación.
Con lentitud se levantó de la cama y realmente sus piernas estaban muy débiles, el vientre aun le dolía el joven no sabía por qué pasaba aquello, pero decidió ignorarlo y sosteniéndose de las paredes camino temblorosamente hacia la salida, sorprendentemente la puerta ni siquiera tenía seguro pero el ya no tenía su espada consigo por lo que no podría ni defenderse en el estado en el que estaba.
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Los soldados de Yúnmeng arrodillados permanecían en el patio de castigos ya sus posturas no eran correctas muchos estaban padeciendo de fiebre debido a los golpes, pero de repente los soldados Lan llegaron y ayudándoles a levantarse los llevaron a una habitación grande en donde los habían liberado y devuelto sus espadas los hombres heridos estaban confundidos el porqué de las acciones de los Lan y a pesar de que preguntaron los soldados no les respondieron el motivo.
En la sala de reunión principal los dos líderes habían hecho un trato las dos sectas investigarían que estaba pasando con los asesinatos repentinos de sus soldados pues su preocupación era mutua por lo que utilizando la excusa del castigo la señora dejaría a sus soldados y a su hijo un tiempo investigarían por las sombras a los Wen el tema de Wei también lo trataron las dos personas madame conto sus razones a XiCheng quien estaba asombrado pues ahora sabia la versión de madame Yu por que perseguía a su cuñado, la mujer por otra parte acepto que se juzgara a Wei en gusu pues ahora era parte de ese lugar y lo retrasarían en un tiempo, pues ahora la mujer es quien debería de dar prueba de los hechos de los que acusaba a Wei... la mujer en su mente aun pensaba en obtener su venganza así que ella era una espada afilada esperando su momento para mostrar su letalidad.
Finalmente, en el cuarto de los soldados Jiang la puerta se abrió y los atentos hombres miraron quienes ingresaron en seguida al unísono saludaron a su señora la cual hablo seriamente era obvio su molestia con ellos de no haber cumplido bien su trabajo, las dos guardianas de la señora informaron la situación mientras que madame salió de la habitación y fue guiada por un soldado Lan a otro lugar en donde debería estar su hijo.
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El frio entre dos almas.
Fanfic_Pero, es que acaso aun después de toda la amargura seré capaz de mirarte. _ si tan solo la sangre lavara y borrara cada error, sin dudarlo exprimiría cada gota de mi ser... . . Wei Wuxian un omega con una vida bastante difícil y una gran culpa en...